TOROS
Hermoso vs Bohórquez
Rivalidad taurina en Yucatán
LUMBRERA CHICO
Motul, Yucatan., 29 de diciembre. Dos años atrás, el famoso empresario taurino yucateco Jalil Xacur, rompió sus viejos vínculos con la Plaza Mérida y se trasladó a la simpática Plaza Avilés de esta pequeña localidad para hacer la competencia a sus antiguos aliados. La disputa se dio a propósito de la tradicional corrida de Año Nuevo, que en estas tierras gira en torno de los rejoneadores del momento. De aquella primera confrontación el colmilludo promotor libanés resultó triunfante, al anunciar como base del cartel motuleño al caballista español Andy Cartagena. Su éxito fue tal que el festejo organizado por sus competidores en Mérida debió cancelarse dado el nulo interés del público.
Pasado mañana, miércoles, las cosas podrían salir exactamente al revés. Pese a su larga amistad con el vasco Pablo Hermoso de Mendoza, Xacur no pudo contratarlo este año para Motul, como sí lo hizo en enero pasado, y debió conformarse con el andaluz Fermín Bohórquez, que tan buen sabor de boca dejara a los aficionados de la Monumental Plaza Muerta (antes México) el día de su reciente presentación en Mixcoac.
Hermoso fue fichado por la división taurina de Telmex, que viene dirigiendo con acierto Pepe San Martín, quien a lo largo de 2002 se convirtiera en el promotor taurino más exitoso de México gracias a la cuadrilla de niños toreros encabezada por Joselito Adame, que sin duda ha pasado ya a la historia como la máxima revelación de la fiesta brava mexicana en lo que va del siglo XXI.
Al hacerse cargo de la Mérida, el binomio Telmex-San Martín echó por delante a Pablo Hermoso, quien el sábado pasado actuó en la posmoderna placita desarmable y acondicionada con clima en el puerto veracruzano de Boca del Río, donde luego de repetir el numerito de la "despedida" del caballo Cagancho falló en siete ocasiones con el rejón de muerte, no obstante lo cual el villamelón juez en turno lo premió con dos orejas.
A escasos tres días de la corrida de Año Nuevo, para la que Hermoso de Mendoza ha vendido todo el boletaje de la Mérida, aquí en Motul se espera el arribo de la cuadra de Bohórquez, pero los encargados de las taquillas no abrigan muchas esperanzas respecto al futuro de la función. Porque si bien es cierto que hay una inmensa y vivísima afición taurina en la península, después del huracán Isidore y lo decaída que anda la economía local, el número de taurinos pudientes no da como para llenar dos plazas de toros, separadas por sólo 40 kilómetros de distancia, en una misma tarde.
Asomado a la posibilidad del fracaso, el empresario Xacur ha ideado una oferta desesperada, pero según él, irresistible, para quitarle público a la Mérida y meterlo al coso de Motul. En los carteles que tapizan los diarios yucatecos ha colocado una vistosa leyenda que asegura: "Las personas que asistan a esta corrida tendrán derecho a ocupar la misma localidad en la corrida de El Juli". Es como una especie de derecho de apartado gratuito. El único problema, sin embargo, es que hasta ahora El Juli no ha firmado una sola tarde para Motul.