80% de los jóvenes se casa por esta causa,
afirma la Procuraduría de la Defensa del Menor
Al año, un millón de adolescentes tienen
embarazos no planeados
Problemas económicos, entre los principales motivos
de divorcios entre adultos
ALMA E. MUÑOZ
En promedio, un millón de menores de edad se embarazan
cada año y al menos 200 mil son madres solteras, aunque no todas
ellas concluyen el proceso de gestación porque en 14 por ciento
de los casos los productos se malogran. Aunque la mayoría del total
alcanza un matrimonio, estos compromisos por lo general duran como máximo
un año, principalmente por el desencanto entre las parejas después
de verse obligados a responsabilizarse de niños no planeados.
Aunque el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral
de la Familia (DIF) tiene rezago informativo sobre los divorcios que anualmente
se realizan a nivel nacional, se acepta que por lo menos entre tres y cinco
por ciento de los separaciones globales las representan quienes aún
no cumplen 18 años, no obstante que dentro de la institución
actualmente no se registra caso alguno.
La experiencia nos los dice, sostuvo en entrevista la
coordinadora de la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia,
Sonia Delgado, para quien los conflictos matrimoniales entre adolescentes
se presentan a los 30 días de unión, sobre todo cuando "80
por ciento de los jovencitos se casaron por embarazos no deseados y al
año o seis meses después vienen sus papás a representarlos
para pelear la custodia de los descendientes de los primeros, quienes quedan
en estado de indefensión mientras se lleva a cabo el proceso legal".
En 2000 sólo 16 de las 32 procuradurías
de defensa del menor reportaron, en igual número de estados, la
disolución civil de dos mil cien matrimonios en general, mientras
en 2001 se contabilizaron sólo cuatro estados con 492. Del año
pasado aún no hay datos, aunque según Delgado, los 40 juzgados
familiares existentes atienden anualmente 300 divorcios cada uno. No se
aventuró a dar cifras concretas sobre la separación entre
adolescentes porque "un muchachito con irse de su casa considera que ya
está divorciado y deja al aire la tutela, alimentación y
otros conflictos sociales para su pareja".
Un matrimonio entre mayores de 25 años, desde la
perspectiva del DIF, dura en promedio entre cinco y ocho años y
concluye el compromiso principalmente por problemas económicos;
después siguen la violencia familiar, la infidelidad, el alcoholismo
y demás causales contenidas en el Código Civil.
La sicóloga Magdalena Bautista López, trabajadora
social del DIF, consideró el divorcio entre menores como un problema
social derivado de la crisis familiar y define las relaciones entre adolescentes
como "sentimientos irreales, son amores apasionados donde tienen una serie
de comportamientos mediante los cuales se muestran plenamente enamorados
y esto conlleva a tener relaciones tempranas que en muchos de los casos
concluyen en matrimonio".
Reconoció que brindan orientación a pequeñas
que desde los 13 años se involucraron en estos conflictos y por
su misma inmadurez, crisis emocionales o de personalidad, ignorancia sobre
el uso de anticonceptivos, indiferencia, depresión y/o sentido de
responsabilidad concluyen sus compromisos con un "rompimiento abrupto".
Con base en textos de investigadores independientes, resalta
que al año se registran, por lo menos, un millón de embarazos
en menores de edad, mismas que en 20 por ciento se convierten en madres
solteras aunque unas 28 mil de éstas últimas no concluyen
su proceso de gestación.
Oficialmente se reconoce que la actividad sexual precoz
provoca en México al menos 366 mil partos no deseados en mujeres
de entre 15 y 19 años de edad, según datos de 2000. Mientras
una década antes, el Consejo Nacional de Población registró
415 mil nacimientos en este rubro de edad.
Aunque hubo una reducción en las cifras, la problemática
es considerada como un desafío prioritario en materia de salud reproductiva
sobre todo porque de esto derivan, además de embarazos no deseados,
abortos clandestinos, infecciones de transmisión sexual, violencia
y divorcios en caso de consumarse un matrimonio.
Sonia Delgado sostuvo que una separación voluntaria
se alcanza entre tres y seis meses después de iniciado el proceso,
con un costo aproximado de entre ocho y diez mil pesos; mientras el necesario
puede durar hasta dos años, con un mínimo de 20 mil pesos.