Bush, seguro que Europa responderá a
su llamado, asegura vocero de la Casa Blanca
China y Rusia se unen a la postura franco-alemana contra
la guerra
Confía el titular de la OTAN en que la Alianza
supere sus diferencias al respecto
AFP, DPA Y REUTERS
Berlin, 23 de enero. Europa "mira hacia el futuro",
declaró este jueves en Berlín el ministro francés
de Exteriores, Dominique de Villepin, al responder al secretario estadunidense
de Defensa, Donald Rumsfeld, que había calificado a Alemania y Francia
de representar a la "vieja Europa". Los gobiernos de China y Rusia se plegaron
a la postura común franco-alemana y el gobierno de Nueva Zelandia
dijo que considera hacer lo mismo.
El
presidente francés, Jacques Chirac, y el canciller federal alemán,
Gerhard Schroeder, reiteraron aquí este jueves que no pueden aprobar
"una legitimación de la guerra" contra Irak.
"Esa es la política exterior común", recalcó
Chirac, al reiterar que Berlín y París están en absoluto
acuerdo sobre este punto.
"Tenemos una Europa que mira hacia el futuro", afirmó
el ministro en una reunión de las comisiones parlamentarias de Relaciones
Exteriores francesa y alemana, reunidas en Berlín por el 40 aniversario
del Tratado del Elíseo, donde los gobiernos de ambos países
ratificaron su postura hostil a una guerra contra Irak manifestada el miércoles.
El ministro del Exterior alemán, Joschka Fischer,
abogó por que los inspectores de armas de la ONU en Irak emitan
un segundo informe después del que tiene previsto presentar el próximo
lunes, antes de tomar cualquier decisión en torno a la crisis.
El presidente ruso, Vladimir Putin, llamó al presidente
estadunidense, George W. Bush, para pedirle calma ante la crisis con Irak.
"Lo más importante para juzgar la situación son las conclusiones
a las que lleguen los inspectores internacionales, que harán conocer
al Consejo de Seguridad", dijo Putin a Bush según el Kremlin. El
canciller, Igor Ivanov, afirmó que no hay pruebas suficientes que
justifiquen una guerra contra Irak.
La cancillería china dijo que Pekín sigue
favoreciendo una solución diplomática al conflicto iraquí
por medio del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones
Unidas.
El secretario general de la Organización del Ttratado
del Atlántico Norte (OTAN), George Robertson, se dijo confiado en
que los países de la Alianza superen sus diferencias sobre un posible
apoyo de la organización a Estados Unidos en caso de intervención
militar en Irak.
El vocero de la Casa Blanca, Ari Fleischer, aseguró
que "el presidente está seguro que Europa responderá al llamado.
Es muy posible que Francia no esté en las filas. Es muy posible
que uno o dos países no lo estén", subrayó.
España parece ser el único país europeo
que secunda abiertamente los planes estadunidenses. Este jueves, la ministra
española del Exterior, Ana Palacio, estimó que "Irak representa
un peligro para la comunidad internacional", y "un desafío permanente
para el Consejo de Seguridad". También sostuvo que Irak es "el único
país que no ha condenado los atentados del 11 de septiembre", y
si bien habló de buscar una solución política y pacífica,
la funcionaria prácticamente repitió las declaraciones de
Bush al afirmar que "nuestro objetivo es el desarme de Irak y que se cumpla
la legalidad internacional", refirió Armando G. Tejeda, corresponsal
de La Jornada en Madrid.
Analistas europeos sostienen que si Estados Unidos logró
una sólida coalición de países para apoyar la primera
Guerra del Golfo, esto se debió a que hubo una invasión a
Kuwait; una provocación mucho más clara que la simple posibilidad
de que Irak tenga armas de destrucción masiva.
Hay quien no excluye que el petróleo acabe convenciendo
a los europeos de participar en la guerra contra Irak. "Si rusos y franceses
quieren tener acceso a las operaciones, concesiones petroleras o cualquier
cosa luego, ellos deben estar involucrados en el esfuerzo por derrocar
a Saddam (Hussein) también", sostuvo Andy Fisher, vocero del influyente
jefe republicano del Comité de Relaciones Exteriores del Senado
de Estados Unidos, Richard Lugar.