ASTILLERO
Julio Hernández López
Ingrato mundo
Cada vez más cuestionados los viajes de Fox
Incumplimientos afectan su figura externa
VICENTE FOX QUESADA haría un extraordinario servicio a la figura institucional del Presidente de México si entendiera que hoy le sería mejor valorado atender y resolver los graves y crecientes problemas internos de la nación, en lugar de insistir en sus cada vez más innecesarios, demeritados y accidentados viajes internacionales.
TAL VEZ EL PUNTO de quiebre está en que Fox se niega a aceptar que ya no le funciona por sí misma la fascinación lejana de haber sido el famoso vaquero mexicano que enterró a uno de los partidos autoritarios más longevos a escala mundial, y que ahora -sustituido en las marquesinas del gran circo internacional por Lula- pueden resultar indeseados y menospreciados sus paseos foráneos en busca de reafirmaciones personales de identidad, movido sólo por lamentables urgencias de aplausos y honores entre audiencias extranjeras que supone poco informadas de su fracaso como gobernante. Atrás quedó, aunque él no lo quiera ver, el candidato carismático, el exterminador de dinosaurios, el hombre de las grandes promesas; ahora, el personaje a quien reciben los empresarios altamente pragmáticos, los políticos que no pierden el tiempo, e incluso los segmentos radicales de, por ejemplo, universidades alemanas, es al Presidente que no ha podido hacer lo que había anunciado que sería facilísimo, que ha perdido dos valiosísimos años de gobierno, que no ha podido echar a andar ninguna reforma estratégica, que está peleado impolíticamente con los principales factores del poder institucional de su país y que resulta poco confiable en sus palabras, anuncios y acuerdos porque, en esencia, es un hombre sin mayor poder que el de despilfarrar tiempo, dinero y expectativas.
ASI, OBSTINADO EN seguir cabalgando por las praderas mundiales en su cuaco de presunto líder mundial, de personaje de primerísimo nivel del escenario internacional, el Presidente ha debido abandonar indecorosamente una conferencia oficial de prensa en la que el canciller alemán le recetó un "hablas y te vas", exhortándolo con imperativo movimiento de mano a que ahuecara el ala y se fuera a comer cabrito a su automóvil mientras él, Gerhard Schroeder, atendía sin acompañamientos incómodos a quien sí le importaba, que en el caso no era el presidente George W. Bush, como en el caso cubano-regiomontano ahora tan oportunamente recordado, sino la prensa de su país. Fox, nuestro Fox que en casa se alebresta con cualquier ciudadano que en gira le reclama incumplimientos, que es capaz de decirle a una vieja sin casa "búscale" cuando ella le pedía ayuda, el Gran Señor Omnipotente, no supo hacer otra cosa que dejarse echar de la susodicha rueda de prensa, sin contestar dos preguntas él y dos el alemán, como estaba diplomáticamente convenido.
PAGA TAMBIEN EL Presidente la lamentable decisión de habilitar como secretario de Relaciones Exteriores a Luis Ernesto Derbez, hombre de poca monta y poco brillo, nombrado por meros criterios grupales, que parece irse achicando conforme la carga del trabajo se acumula sobre sus hombros medianamente preparados para tareas de otro corte. Las tempranas y acentuadas pifias que se han cometido en materia internacional desde que Derbez fue nombrado canciller abonan una visión simplista que cree entonces justificado suponer que el antecesor, Jorge G. Castañeda, era extraordinariamente bueno en su trabajo y, por ello, incluso, debería pensarse en que volviera al cargo para ayudar al Presidente a repuntar. En realidad, lo que hoy se está viendo es que Fox erró terriblemente al optar por el amiguismo, haciendo a un lado a un servicio exterior mexicano en el que hay suficientes personajes expertos e institucionales para encabezar la cancillería. No es que Castañeda hubiese sido tan importante que ahora resultase imprescindible, sino que el remedio escogido por Fox está resultando peor que la enfermedad anterior. El Amigo Lino Ernesto Derbez -perdón, es Luis en lugar de Lino-, por ejemplo, quiso ayudar a su jefe ante el descolón germano y acabó produciendo material como para ser analizado por su sobrino Eugenio en la sección del sabio de lentes de botella que disecciona palabras, frases y conceptos. Dijo Lino bis que el canciller Schroeder "tenía una enorme presión de la prensa alemana" para que fijara postura sobre previas declaraciones de Bush, y que ante ello quiso evitar colocar en una posición incómoda a Fox, al no darse la importancia que merecía su visita de Estado". šNo me defiendas, canciller-compadre!
OTRO PUNTO QUE muestra cómo los problemas internos no resueltos echan a perder al Presidente sus viajes tan queridos es el de la impropia acusación de "asesino" que en la Universidad Humboldt le lanzaron ayer algunos alemanes que se decían zapatistas y varios mexicanos residentes en aquellos lares. No hay ninguna relación directa imputable al Presidente por cuanto a asesinatos, aunque una interpretación de algunos segmentos políticos querrían enlazar subjetivamente algunas muertes habidas en los dos años del foxismo con el incumplimiento de sus promesas o con las fallas del aparato de poder que tan equivocadamente ha conducido. Ya en ocasión anterior en que se pretendió endilgar a Fox tan grave acusación, esta columna desfacedora de entuertos saltó al campo de batalla para decir que le parece desproporcionada e injusta: muchos otros defectos tiene el presi-Chente, y de ellos se da afanosa cuenta en estas líneas, pero no encuentra este tecleador algún asidero válido para afrentarlo así. Como dijeron ayer los priístas: Fox es irresponsable y mentiroso, pero no asesino. Agravia y lesiona a la sociedad con su lengua sin control, pero tales golpes verbales no suelen causar muertes más que de risa, a unos, y de enojo a otros. En Berlín mismo, defendiéndose de las acusaciones de homicidio, aseguró que en Chiapas las cosas son mejores que cuando él entró de Presidente, y dijo que la ley indígena es una chulada universal. Bueno...
Y YA CON ESTA se marcha por hoy, para retornar el lunes, el megacolumnista arribafirmante, deseando a su clientela chilanga que no sufra demasiado con los sublimes atorones viales de hoy, a causa de la magna recepción desagraviadora de maltratos alemanes que a nuestro Presidente también marchista le han organizado miles de campesinos agradecidos... šFeliz fin de semana!
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