Empresarios se quejan de severa crisis del sector
"Aumento salarial cero", proponen a trabajadores de la industria hulera
FABIOLA MARTINEZ
Los empresarios de la industria hulera propusieron a los trabajadores de este sector que "acepten un año de austeridad", lo que significa "aumento salarial cero" y la eliminación de diversas cláusulas del contrato ley, y permitir la introducción de convenios para "elevar la productividad".
El emplazamiento a huelga de los 4 mil 500 empleados de esa industria, incluidos los obreros de las tres llanteras que subsisten en el mercado (Firestone, Continental de México y Tornel), vence el 12 de febrero; sin embargo, por decisión de los patrones la negociación se reanudará hasta el próximo lunes, apenas 48 horas antes de que concluya el plazo legal.
"La perspectiva para este año es muy mala, por lo que una actitud responsable de ambas partes sería rehacer nuestro contrato y aplicar los ajustes administrativos necesarios, porque de lo contrario en unos cuantos meses estaremos frente a otras quiebras", señaló Jorge de Regil, representante de los industriales del hule y asesor laboral de los organismos del sector privado.
Según datos difundidos en la convención de este esta rama industrial, en los últimos cinco años la plantilla laboral se ha reducido más de 50 por ciento, al pasar de 10 mil a 4 mil 500 empleados, en especial por el cierre de tres importantes llanteras.
En ese contexto, los dueños de las principales firmas insisten, una vez más, en "modernizar" el contrato ley, uno de los siete que sobreviven en la industria mexicana, y firmar condiciones laborales de acuerdo con las necesidades productivas y financieras de cada compañía.
Por ello, dijo Juan Moisés Calleja, asesor jurídico de la Coalición de Trabajadores de este sector, "en la revisión anterior aceptamos un aumento salarial mínimo de 3 por ciento, pero ahora no estamos dispuestos a aceptar la estrategia de 'cero por ciento' de incremento: pretenden espantarnos, por eso rompieron con las pláticas hoy".
Los empresarios argumentan que atraviesan por una "severa crisis económica" derivada del ingreso -legal e ilegal- de neumáticos, unidades que han superado en 60 por ciento al mercado doméstico; sin embargo, los sindicatos responden que son los patrones quienes promueven esa sobreoferta y los altos costos de producción.
Calleja precisó que los convenios de producción a los que hace referencia De Regil ya se aplican en las llanteras, incluso en una de las cláusulas más importantes del contrato ley: el descanso general dominical y la rigurosa jornada de ocho horas, lo que ha redundado en un mayor nivel de producción.
"Estamos abiertos a la modernización del contrato ley, pero también tenemos que proteger al resto de las empresas de la industria (las no llanteras), por lo que iremos por un aumento salarial por lo menos en el promedio nacional", agregó.