Veinte millones ya dependen de la ayuda: PMA

Alerta Unicef de hambruna a gran escala si el conflicto se prolonga

DPA Y AFP

Madrid, 2 de abril. Existe el riesgo de una hambruna a gran escala en Irak si se prolonga el conflicto, advirtió hoy el representante del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) para la nación árabe invadida, Carel de Rooy, quien efectúa una gira por varios países europeos para informar sobre la gravedad de la crisis humanitaria que amenaza a los niños iraquíes.

Señaló que los invasores "tienen una responsabilidad muy clara sobre los efectos humanitarios de esta guerra", en alusión a Estados Unidos y Gran Bretaña.

No obstante, dijo que estaba solicitando a los gobiernos y a la sociedad civil internacional que aporten fondos de emergencia.

Recordó que en Irak un millón de menores de cinco años sufren ya desnutrición grave, mientras que la mortalidad infantil creció 160 por ciento en la última década y uno de cada ocho niños muere antes de alcanzar los cinco años.

Explicó que el Unicef contaba con 10 millones de dólares para asistir a la población antes del estallido de la guerra de agresión, pero que la dependencia de la Organización de Naciones Unidas (ONU) requiere de unos 166 millones adicionales para hacer frente a la actual emergencia.

De Rooy indicó que las familias iraquíes guardaron alimentos para un mes, pero que si la guerra se prolonga por más tiempo entonces el hambre tendrá "un impacto inmediato" sobre los menores de cinco años y las mujeres embarazadas.

Por otra parte, Unicef pidió a las fuerzas invasoras de Irak que cambien el color del envoltorio de los alimentos destinados a la población iraquí, pues éste coincide con el del tipo de bombas utilizadas en la guerra de ocupación.

Tales envoltorios son de un plástico brillante amarillo, del mismo color que las bombas BLU-97.

A su vez, el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU advirtió que tras desatarse la guerra unos 20 millones de personas en Irak dependen de la ayuda humanitaria, equivalente a dos tercios de la po-blación del país asiático.

El director ejecutivo del PMA, James Morris, sostuvo una entrevista en Berlín con la ministra alemana de Ayuda al Desarrollo, Heidemarie Wieczorek-Zeul, y am-bos llamaron a las partes en guerra a abstenerse de obstaculizar la actividad de voluntarios que ayudan a la población.

"La situación humanitaria en Irak es terrible", declaró la ministra alemana, al subrayar que las reservas de alimentos se están agotando y cientos de familias carecen de agua potable.

Hasta la fecha el PMA ha montado unos 44 mil sitios de distribución de alimentos en Irak, pero se espera que la guerra y la invasión arroje unos 2 millones de refugiados o desplazados, dijo Morris.

Además, añadió, hoy en día un tercio de la población cubre sus propias necesidades y 60 por ciento recibe del gobierno la totalidad de los alimentos requeridos.

Estados Unidos anunció que donará otros 200 millones de dólares al PMA para su labor humanitaria en Irak, en respuesta a una petición que busca evitar una catástrofe humanitaria.

Asimismo, el Pentágono dijo que se es-pera en el golfo Pérsico la llegada de dos barcos con unas 50 mil toneladas de trigo, que servirán para alimentar a unos 5 millones de iraquíes.

En Ginebra, la Unión Europea se puso de acuerdo en forma muy rápida en torno a un proyecto de resolución sobre la situación de los derechos humanos en Irak, presentado ante la comisión del ramo y elaborado en tan sólo dos días para su discusión.

Sin embargo, se dejó fuera un debate so-bre el ataque militar contra Irak por las fuerzas angloestadunidenses, como quería un grupo de países asiáticos, africanos, árabes y Rusia.

En tanto, se informó que tropas británicas que controlan Al Zubair, en el sur de Irak, distribuyeron por segundo día consecutivo agua potable a la población.