En la redacción del borrador no se especifica la exclusión de maíz y frijol del acuerdo
No satisface a campesinos la revisión del capítulo agropecuario del TLCAN
ANGELICA ENCISO
La aceptación del gobierno federal para iniciar la revisión del capítulo agropecuario del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no satisfizo a organizaciones campesinas, porque en el borrador del Acuerdo Nacional para el Campo no quedó explícita la exclusión de maíz y frijol del acuerdo comercial.
Frente a ello y el hecho de que el gobierno federal no tuviera definido aún el paquete económico para el fondo de emergencia del campo ni su postura sobre el presupuesto multianual, se volvió a aplazar la reunión de la comisión organizadora y de acuerdos, donde participan ocho representantes campesinos y los secretarios de Gobernación, Economía y Agricultura.
Además, El campo no aguanta más, El Barzón, el Congreso Agrario Permanente (CAP) y la Confederación Nacional Campesina (CNC) pidieron tiempo para llevar el borrador del Acuerdo Nacional para el Campo -que consta de alrededor de 90 cuartillas- a consulta con las organizaciones locales y las comunidades.
La discusión del apartado del TLCAN dejó inconformes a varias organizaciones, ya que piden que su demanda de excluir maíz y frijol del acuerdo comercial quede acentada con precisión en el documento, porque, en la redacción actual, el planteamiento es vago y está condicionado a una evaluación que terminará en diciembre de este año y a la definición de "estrategias más convenientes para el interés nacional".
El dirigente de El Barzón, Alfonso Ramírez Cuéllar, dijo que las negociaciones del acuerdo siguen estancadas en los puntos esenciales y que por eso el gobierno federal solicitó prorrogar la reunión para el próximo lunes.
Precisó que falta la definición sobre el programa de emergencia para el campo; el TLCAN e instrumentos; el presupuesto para garantizar la soberanía alimentaria; los recursos para el fondo de vivienda rural; el seguro social para el sector rural y lo referente a las pensiones para la gente de la tercera edad en el sector rural. En resumen, dijo, "no hay avances".
Sostuvo que el gobierno había anunciado que ayer por la noche entregaría la propuesta económica, así como un documento en el que se incluiría su propuesta integral del acuerdo, pero pidió aplazar la reunión y las organizaciones estuvieron de acuerdo, por el trabajo que tienen que hacer con sus bases.
Insistió en que en lo que concierne al TLCAN la exigencia es "la exclusión de maíz y frijol, no comenzar consultas y negociaciones con Estados Unidos y Canadá, porque evaluaciones sobre los impactos del tratado, como lo señala el borrador, ya se han hecho".
Por su parte, Alberto Gómez, vocero de El campo no aguanta más, dijo que el borrador no es satisfactorio y que los asuntos centrales siguen en la mesa del debate. Reconoció que hay algunos avances, pero sobre el TLCAN "la demanda es renegociación no revisión". Este mismo planteamiento lo presentó el coordinador en turno del CAP, Rafael Galindo, quien dijo que ante esta situación "no se ve que se vaya a llegar a un acuerdo".
Detalló que en el borrador del apartado del TLCAN, el gobierno aceptó la revisión, pero para las agrupaciones "el mecanismo más eficaz tiene que ser la renegociación, porque el objetivo es fortalecer la soberanía alimentaria".
Los puntos de discusión
De acuerdo con el análisis que algunos de los dirigentes hicieron del borrador, lo que no convence es que el planteamiento de que el Ejecutivo federal "iniciará de inmediato consultas con los gobiernos de Estados Unidos y Canadá, con el objeto de revisar el proceso de desgravación de maíz blanco y frijol", está condicionado a que antes de que esto se haga, se realice una "evaluación del impacto en las cadenas productivas del proceso de desgravación de maíz blanco y frijol y, a partir de ello, determinar los tiempos y las estrategias más convenientes para el interés nacional".
Este texto, dijeron, no garantiza que los granos queden fuera del tratado. Además, la primera parte del documento también indica que el "Ejecutivo federal llevará a cabo una evaluación integral de los impactos e instrumentación del capítulo agropecuario del TLCAN, así como lo referente a los productos forestales en los tratados comerciales internacionales. Dicha evaluación (...) deberá concluir a más tardar el 31 de diciembre del presente año".
Estos párrafos del borrador son lo que mantienen inconformes a los campesinos y podrían hacer que no se firmará el acuerdo; además, éstas serán demandas que impulsarán en las movilizaciones del 10 de abril.