Argentina se sumaría a la condena contra
la isla en comisión de Naciones Unidas
Exigen a Cuba respetar derechos humanos
Human Rights Watch reprueba los juicios sumarios a los
secuestradores fusilados
AFP, DPA Y REUTERS
La condena por la ejecución el viernes de tres
cubanos fue generalizada. Líderes políticos, organizaciones
humanitarias y medios informativos de América Latina y España
rechazaron ayer el fusilamiento de los secuestradores de una lancha con
la que intentaban viajar a Estados Unidos.
La organización humanitaria Human Rights Watchs
reconoció que los crímenes alegadamente cometidos por los
acusados fueron graves, "y pueden haber merecido castigos severos", pero
rechazó el uso de la pena de muerte. Además, condenó
la naturaleza sumaria de los juicios, así como el proceso de apelaciones.
El
gobierno chileno, del presidente Ricardo Lagos, expresó su rechazo
a la aplicación de la pena de muerte de los tres cubanos. "Lo ocurrido
ayer (viernes) tiene la agravante de haberse producido sin las garantías
mínimas del debido proceso. Nuestro país no puede permanecer
indiferente ante la aplicación de juicios sumarios que distan mucho
de una verdadera administración de justicia", expresó un
vocero oficial del Palacio de la Moneda.
En la Comisión de Derechos Humanos de la Organización
de Naciones Unidas, que se pronunciará la semana entrante en Ginebra
sobre la situación en Cuba, Chile apoyará una resolución
de Costa Rica, Uruguay, Perú y Nicaragua que exhorta al gobierno
de La Habana a respetar las garantías ciudadanas.
El presidente de Argentina, Eduardo Duhalde, también
habría decidido -después del fusilamiento de los tres cubanos-
que su país vote en favor de la condena a Cuba, reportó hoy
el diario Clarín.
El presidente del gobierno español, José
María Aznar, condenó de igual manera los fusilamientos, así
como la oleada de penas impuestas recientemente a disidentes políticos
de la isla, y expresó sus deseos de paz y concordia para el pueblo
cubano.
El ex presidente español Felipe González
equiparó, sin nombrarlos, al presidente de Cuba, Fidel Castro, con
las fuerzas angloestadunidenses en Irak.
"Hay quienes detienen a la gente, la meten en prisión
o ejecutan a seres humanos supuestamente en nombre de la revolución
y sin garantías, y otros que lo hacen suspuestamente en nombre de
la libertad y sin garantías", declaró.
La prensa española también fue unánime
al condenar lo que consideró un escala de represión en Cuba.
A esa posición se sumaron los diarios de Chile, que señalaron
que Castro "endurece la mano" y su imagen pasa por un "momento delicado".
En la propia isla, el comité permanente de la Conferencia
de Obispos Católicos de Cuba rechazó las ejecuciones.
"Nadie tiene derecho a poner en peligro a otras personas,
como hicieron los asaltantes, pero del mismo modo nadie debe decidir que
la muerte sea inferida a otras personas como remedio a sus acciones delictivas",
sostuvo.