BAJO LA LUPA
Alfredo Jalife-Rahme
La "carga del hombre blanco": el petróleo de Irak
Del destino manifiesto al mandato divino
La defensa del "imperialismo moral"
AHORA SE ENTIENDE que la captura de los 13 yacimientos
de Irak es el gran favor que el equipo Bush le hereda a la humanidad, los
que el Pentágono proyecta privatizar de acuerdo con el modelo del
neoliberalismo y el concepto colonial de la "carga del hombre blanco",
argumento filantrópico que empleó Estados Unidos para dominar
el archipiélago de Filipinas a inicios del siglo XX.
ESTADOS UNIDOS PASA en 105 años -desde 1898,
con el presidente Teddy Roosevelt- de la aplicación del destino
manifiesto al mandato divino de 2003 con Baby Bush.
EL DESTINO MANIFIESTO decimonónico
y el mandato divino del fundamentalismo cristiano apocalíptico
(el "síndrome Armagedón") a inicios del tercer milenio que
profesa eminentemente la denominación protestante de los "bautistas
sureños" forman parte de la evangelización militar del imperio
estadunidense, que vislumbra su misión de sacrificio y liberación
en los términos conceptuales de la "carga del hombre blanco".
MUCHO
DEL PENSAMIENTO de los bautistas sureños (escindidos de los
del norte durante la Guerra Civil) proviene de la mentalidad esclavista
de los confederados del eje Texas-Oklahoma, donde abundan los supremacistas
blancos, y ha renacido bajo la máscara de la guerra preventiva
unilateral. Cabe recordar que los supremacistas blancos de confesión
bautista sureña del eje Texas-Oklahoma fueron los aliados del entonces
imperio de Gran Bretaña contra los independentistas y antiesclavistas
del noreste.
EN FORMA INTERESANTE, Jeel Heer, del Boston
Globe (23 de marzo) demuestra que los más ardientes neoimperialistas
aliados del equipo Bush no nacieron en Estados Unidos y exhiben la mejor
opinión sobre el imperio británico, a grado tal que abogan
por la instauración de un "imperio estadunidense", que debiera concretarse
en una anglosfera en la que Estados Unidos juegue el papel previo
de Gran Bretaña. Se basan en los preceptos racistas y humillantes
del escritor colonial británico Rudyard Kipling, quien avaló
la captura de Filipinas por el entonces presidente de Estados Unidos Teddy
Roosevelt, bajo el lema de "la carga del hombre blanco".
EN FORMA IDENTICA, los "25 neoconservadores" de
Estados Unidos que diseñaron la guerra contra Irak, en su mayoría
israelí-estadunidenses, según la misma prensa de Israel (ver
Bajo la Lupa, 9 de abril), consideran la tarea de liberación
y reconstrucción extensiva a todo el nuevo Medio Oriente,
como "la carga del hombre blanco".
EN ESTE TENOR, Paul Wolfowitz, el subsecretario
de Defensa e ideólogo de la guerra preventiva, piensa aplicar
el modelo filipino a los países islámicos.
FUE JUSTAMENTE KIPLING quien calificó como
"gran juego" la lucha geopolítica que libraron Rusia y Gran Bretaña
por la posesión de Afganistán en el siglo XIX. Los "grandes
juegos" de los anglosajones no han cesado en Afganistán, totalmente
devastado pese a sus múltiples reconstrucciones seculares
y a sus experimentos democráticos: ahora es administrado
por los halcones de Estados Unidos. Heer señala a los neoimperialistas
que no nacieron en Estados Unidos: Max Boot (nacido en Rusia); Charles
Krauthammer (nació en Uruguay y creció en Canadá);
Dinesh D'Souza (nació en India); Paul Jonson (Gran Bretaña);
Mark Steyn (Canadá); Michael Ignatieff (de origen ruso, nació
en Canadá) y Conrad Moffat Black (israelí-anglocanadiense).
ES NOTORIO QUE los neoimperialistas proceden de
Gran Bretaña o de colonias británicas donde fueron intoxicados
mentalmente.
MERECE UNA CITA especial Conrad Moffat Black, uno
de los principales magnates de los medios de comunicación a escala
mundial (The Jerusalem Post, The Daily Telegraph, Toronto Star,
etcétera), bajo el paraguas corporativo de la trasnacional Hollinger
Corporation, cuyo sector de multimedia es dirigido por el israelí-estadunidense
Richard Perle (metido en serios líos criminales de triangulaciones
de negocios inmundos desde el Pentágono, donde abusó del
influyente puesto al que fue obligado a renunciar). En un delirante artículo
(Edmonton Sun, 31 de marzo), Conrad Moffat Black, después
de despotricar contra Francia y Alemania (solamente le faltó acusarlos
de "antisemitas"), exigió la "disolución de la ONU", cuyas
"votaciones son una farsa" y donde los países son sujetos a "sobornos"
para votar.
LLAMA LA ATENCION que todos los neoimperialistas,
que se traslapan con los "25 neoconservadores" (en su mayoría israelí-estadunidenses),
piensen igual: Perle y Krauthammer se habían adelantado a Black
en sus diatribas contra la ONU, que consideran desechable (pese a la invaluable
colusión del ghanés Kofi Annan), para sustituirla por el
"nuevo imperio" anglo-texano-israelí basado en el "imperialismo
moral" (sic).
¿CABE LA CAPTURA de los 13 yacimientos petroleros
de Irak dentro de "la carga del hombre blanco"? El día de la caída
del régimen baazista de Bagdad, Bronwen Maddox señaló
que "la madre de todas las batallas será la del oro negro"
(Times, 8 de abril): "¿Quién se quedará con
el petróleo de Irak? ¿Sus acreedores, a quienes se les debe
miles de millones de dólares, o las trasnacionales que reconstruirán
el país, o el nuevo gobierno iraquí?" Maddox aduce que los
100 mil millones de dólares para la reconstrucción
de Irak "se ven muy bajos para reparar los efectos de tres guerras en 23
años".
CON LA DESTRUCCION de la infraestructura de Irak,
gracias a la notable precisión de la tecnología militar angloestadunidense,
solamente regresar la electricidad al estado de 1990 costará 20
mil millones de dólares, según la Academia Estadunidense
de Artes y Ciencias.
DESARROLLAR LOS NUEVOS yacimientos petroleros costará
40 mil millones de dólares, según un reporte del Consejo
de Relaciones Extranjeras, con sede en Nueva York (cuya publicación
en español apadrina el ITAM, el caballo de Troya del equipo
Bush en la fase de desnacionalización de México).
IRAK FIRMO CONTRATOS con empresas foráneas
por 57 mil 200 millones de dólares para el desarrollo petrolero
y de las telecomunicaciones, que van a causar cefaleas en cualquier corte
legal internacional.
IRAK AUN NO HA pagado los daños de guerra
de 1991, acordados en la ONU (bajo el lema "el que pierde paga"), por 27
mil millones de dólares, y todavía están bajo litigio
(que seguramente "perderá" Irak) por compensaciones de daños
de guerra del mismo 1991 otros 172 mil millones. ¿Cuánto
cobrarán ahora Estados Unidos y Gran Bretaña por su destrucción
masiva, que aún no concluye?
IRAK ADEUDA UN mínimo de 383 mil millones,
según Frederick Barton y Bathsheba Crocker, del Centro Internacional
de Estudios Estratégicos (CSIS, por sus siglas en inglés,
que fomenta la privatización del petróleo mexicano con un
grupo de ex funcionarios polkos, juniors del PRI, panistas nuevos
ricos y centralbanquistas zedillistas-cordobistas). Desde 1990 Irak no
ha realizado pagos de capital y los intereses no han cesado de correr,
por lo que en forma "conservadora" el mínimo adeudo total (considerando
los intereses moratorios) sería de unos jadeantes ¡2 billones
958 mil millones de dólares! (¡casi cinco veces el PIB de
México!).
¿DE DONDE SALDRA tanto dinero? ¿De
la "liberación y democratización" de Irak? ¿Será
el petróleo de los 13 yacimientos de Irak "la carga del hombre blanco"
anglo-estadunidense-israelí que tendrá que sacrificarse al
máximo para reconstruir al devastado Irak? Maddox (del Times,
que comparte fuertes vínculos con las petroleras anglosajonas Shell
y British Petroleum) sugiere la respuesta al asegurar que Irak posee más
de los 112 mil millones de barriles (MB) de reservas probadas, que serían
más bien 200 mil MB, no muy atrás de los 250 mil MB de Arabia
Saudita, pero deja entrever que pudiera alcanzar hasta 550 mil MB: "los
exploradores apenas han mirado las 9/10 partes del país, en especial
el vasto desierto en la parte occidental". Así que todavía
viene lo bueno. El Departamento de Energía de Estados Unidos (reporte
de octubre de 2002) había adelantado que las reservas probadas de
Irak alcanzarían 300 mil MB, mucho más que las de Arabia
Saudita, consideradas las primeras mundiales. Pero Maddox se atreve a enunciar
la azorante cifra de 550 mil MB, sin dejar de enfatizar que el barril tiene
un precio de extracción de medio dólar en la región
de Basora: el más barato del mundo, por encontrarse a flor de suelo;
en comparación, la extracción del barril del mar del Norte
es de 11 dólares y el de México de tres dólares. Estos
"nuevos hallazgos" transformarán radicalmente la geopolítica
regional.
PARA QUIENES A estas alturas duden sobre las evidencias
de que la guerra de Irak versa primordialmente sobre el petróleo,
"la carga del hombre blanco", al que se han agregado otros factores que
la convirtieron en parte de una "guerra multidimensional", sería
conveniente analizar un nuevo estudio "Cruda Visión: como los intereses
petroleros de EU oscurecieron el enfoque del gobierno de EU sobre las armas
químicas de Saddam Hussein", por el Institute for Policiy Studies
(IPS, por sus siglas en inglés; Instituto de Estudios Políticos),
que se basa en comunicaciones diplomáticas secretas (recientemente
desclasificadas por los Archivos Nacionales) y comunicaciones internas
de Bechtel Corporation.
DAVID LINDORFF (Counterpunch, 9 de abril)
cita profusamente parte de los documentos desclasificados, "que demuestran
que el petróleo es la causa subyacente a la guerra en Irak", donde
se conjugan los intereses corporativos de Bechtel Corporation (cuyo representante
fue George Schultz, el secretario de Estado de Reagan) con los del actual
vicepresidente, Dick Cheney (de la petrolera texana Halliburton), y del
actual secretario de Defensa, Donald Rumsfeld (como directivo de la empresa
farmacéutica Searle). El encuentro de Saddam y Rumsfeld en la década
de 1980 revela "los esfuerzos de la administración Reagan con el
fin de obtener la aprobación de Saddam para la construcción
por Bechtel de un oleoducto desde los campos petroleros del Eufrates, en
la parte suroccidental, hasta Jordania y el golfo de Aqaba". El proyecto
ha sido resucitado y hoy Bechtel es una de las favoritas para reconstruir
Irak: "la carga del hombre blanco".