Según un estudio de diputados se apropian
de uno de cada tres pesos invertidos
Las Afores que operan en México cobran las comisiones
más altas del mundo
Niegan legisladores que el capital del SAR fortalezca
el ahorro interno En 2002, los gastos de operación de los administradores
bajaron, pero se incrementaron las tarifas a trabajadores
ROBERTO GARDUÑO
Las administradoras de fondos para el retiro (Afores)
que funcionan en México cobran a los trabajadores la comisión
más alta en el mundo por el manejo de sus cuentas. En suma, cada
año, los ciudadanos mexicanos pagan a esas empresas -controladas
en su mayoría por capital extranjero- 30 por ciento del monto ahorrado.
En México, el control de los recursos para el retiro
de los trabajadores es un negocio tan redituable para las 11 Afores autorizadas
que en el transcurso del año pasado obtuvieron una ganancia de 10
mil 800 millones de pesos.
La
Comisión de Seguridad Social de la Cámara de Diputados advierte
sobre la pasividad de las autoridades hacendarias "para controlar la voracidad"
de las administradoras, porque ahora "se pretende incorporar en ese esquema
a los trabajadores al servicio del Estado y a los trabajadores independientes".
Samuel Aguilar, integrante de la comisión legislativa,
dio a conocer un estudio en el que se asume la inviabilidad de las Afores
por el monto tan elevado en el cobro de las comisiones.
En 2002 las Afores obtuvieron 10 mil 800 millones de pesos
por concepto de comisiones. Las administradoras que lograron más
ingresos fueron Banamex y Bancomer y entre las que vieron caer sus ganancias
se encuentran Tepeyac e Inbursa.
Según el estudio, en 2002 Bancomer fue la administradora
que cobró más a cada uno de los clientes de Afores, pues
retuvo 534 pesos con 40 centavos por cada una de las cuentas que opera.
Inbursa registró el menor monto, con 148 pesos en todo el año.
Gastos y utilidades
Las Afores destinaron a sus gastos de operación
48 pesos 18 centavos promedio por cada 100 pesos cobrados por comisiones,
poco menos de los 50 del año 2001. De las 11 administradoras sólo
tres: ING, Principal y Tepeyac ocuparon más de 50 pesos para su
funcionamiento.
De esa forma, los gastos cerraron el ejercicio anual 2002
con un monto de 4 mil 500 millones de pesos, lo que indica que las Afores
disminuyeron sus erogaciones en 14 por ciento, respecto a los 5 mil 200
millones erogados en 2001.
"Al conjugarse un incremento de las comisiones por administración
(con un 16 por ciento) con una disminución de los gastos de operación
(14 por ciento promedio) el efecto real, en vez de reflejarse en un rendimiento
de los ahorros de los trabajadores, se convirtió en un incremento
de 27.3 de las utilidades de las Afores". (Las utilidades es la
diferencia de restar al total de comisiones cobradas los
gastos de administración, operación y promoción)
En números absolutos, en 2002 las utilidades de
las Afores fueron de 4 mil millones de pesos, 27 por ciento más
respecto a las utilidades de 3 mil 130 millones de pesos en 2001. Banamex
obtuvo el mayor volumen de utilidades con mil 100 millones pesos, seguida
de Bancomer con 909 millones.
El diputado Samuel Aguilar manifestó que a esa
disparidad en el cobro de comisiones se agrega la defensa emprendida por
las autoridades hacendarias y los agentes financieros, quienes argumentan
que las futuras pensiones a través de las administradoras incrementarán
el ahorro interno y el financiamiento de las actividades productivas con
el consecuente incremento del empleo.
"Esta justificación ha resultado totalmente falsa,
ya que más de 85 por ciento de los recursos se encuentra invertido
en instrumentos del gobierno federal para financiar su gasto corriente,
y el 15 por ciento restante se canaliza a la compra de acciones de grandes
empresas que cotizan en el mayor mercado especulativo que existe en el
país, es decir, en la Bolsa Mexicana de Valores".
Los trabajadores al servicio del Estado, el siguiente
nicho
A la fecha las autoridades de Hacienda y de la Comisión
Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro han impulsado reformas a
la Ley del SAR, en las que se establece que los trabajadores al servicio
del Estado y los independientes se pueden incorporar a las Afores. Incluso
la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores
del Estado (ISSSTE) abre la puerta a las Afores, porque determina la voluntad
como único requisito para incorporarse a ese sistema de ahorro para
el retiro.
En la actualidad, los trabajadores incorporados al régimen
del ISSSTE obtienen una tasa de rendimiento real de 5 por ciento anual,
la cual es determinada trimestralmente por Hacienda. A ese rendimiento
hay que descontarle una comisión por administración equivalente
a 1.49 por ciento anual, restándole al trabajador un rendimiento
real neto de 3.51 anual.
También en el régimen del Instituto Mexicano
del Seguro Social las Afores otorgan un rendimiento real de 8.79 por ciento,
cual es determinado por el mercado de valores. A este rendimiento también
hay que descontarle una comisión por administración y utilidades
de 6.34 anual, con un rendimiento anual de 2.45 por ciento.
"Ante este panorama, Hacienda, en lugar de disminuir las
comisiones y utilidades de las Afores, pretende determinar un rendimiento
menor de los recursos del SAR-ISSSTE para hacerlos poco competitivos, y
así obligar a los trabajadores al servicio del Estado a trasladar
los recursos a las Afores", manifiesta el documento elaborado en la Comisión
de Seguridad Social de la Cámara de Diputados.
