El cardenal y el rector de la Basílica fueron demandados por fraude y despojo
Rivera Carrera y Diego Monroy están dispuestos a comparecer ante tribunal
Afirman que no respondieron a citatorio porque fue por vía de jurisdicción voluntaria
JOSE ANTONIO ROMAN
En una versión distinta a la expresada en la víspera, en la que se dijo confiado de no tener ningún proceso penal en su contra, el cardenal Norberto Rivera Carrera aceptó ahora de manera sorpresiva "no tener ningún tipo de fuero o privilegio" que lo exima de cumplir la ley, y afirmó estar dispuesto a acudir a los tribunales judiciales, donde es acusado de fraude y despojo por la firma de un contrato millonario para comercializar la imagen de la Virgen de Guadalupe.
Othón Corona Sánchez, impresor original de la imagen digitalizada, tiene un contrato que lo beneficia con la comercialización de las imágenes. Sin embargo, el cardenal Rivera y el rector de la Basílica de Guadalupe, Diego Monroy, vendieron a la trasnacional Viotran, en 12.5 millones de dólares y en "exclusividad", los derechos de propiedad de estas imágenes, pasado por alto el contrato firmado con él.
Incluso ya existe una denuncia contra Rivera y Monroy, interpuesta en el juzgado 27 de lo civil, el cual ya giró, por la vía de la jurisdicción voluntaria, un citatorio a ambos religiosos, quienes no respondieron al llamado de las autoridades.
En un comunicado la arquidiócesis primada de México aclaró que Rivera Carrera y Monroy Ponce responderán ante las instancias legales que así lo soliciten. Agrega que en el citatorio anterior no tenían ninguna obligación jurídica de comparecer, pues los requerimientos por vía de jurisdicción voluntaria son actos preparatorios de índole civil.
Destaca el comunicado que Monroy tiene la convicción de que estos diferendos no se solucionan "mediante la difamación", sino en las instancias legales creadas para esos fines.
Respecto a las acusaciones de que ambos religiosos buscan enriquecerse de manera impune aprovechando su cargo, Diego Monroy aseveró que el quejoso y sus abogados no presentan pruebas. Indicó que se trata de una difamación que denota el desconocimiento que tienen los acusadores del gobierno interno de la Basílica.
De acuerdo con la versión de Othón Corona, en muchos establecimientos comerciales de México y del extranjero se siguen vendiendo artículos con la imagen que él digitalizó de la Virgen de Guadalupe y de San Juan Diego. Cabe recordar que él diseñó el logotipo de la reciente visita del papa Juan Pablo II a México y la comisión es entregada a la empresa Viotran.
El rector Diego Monroy consideró que si el creador de la imagen digitalizada de la Virgen de Guadalupe ha optado por la vía penal, "es sólo a través de estas instancias como se dará respuesta a los requerimientos legales que se han solicitado".