GUERRA CONTRA IRAK
Califica de "disparate" la acusación de que
Siria posee armas de destrucción masiva
"Hipocresía" de EU, impulsar una condena contra
Cuba, acusa Duhalde
Apoya el juez Garzón iniciativa de abogados argentinos
para juzgar a responsables de la guerra
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 17 de abril. En el contexto de un
complicado proceso electoral, el presidente Eduardo Duhalde defendió
hoy la abstención de Argentina en la votación sobre los derechos
humanos en Cuba, y acusó a Estados Unidos de "hipocresía"
luego que Washington manifestara su "decepción" por esta postura.
"Nosotros condenamos todas las violaciones (a los derechos
humanos), pero me parece que es una hipocresía lo que estamos viendo,
que una potencia avasalle países públicamente", dijo el mandatario,
cuya decisión fue apoyada por varios candidatos presidenciales para
las elecciones del 27 de abril.
En declaraciones radiales desde la localidad balnearia
de Pinamar, también consideró como un "último disparate"
la advertencia de Estados Unidos de que Siria debe demostrar que no posee
armas químicas. Duhalde sostuvo que tanto la guerra contra Irak
como las imposiciones a Siria "quedarán en la historia".
Duhalde ha admitido -y lo dijo el año pasado cuando
su gobierno votó junto a Estados Unidos en Ginebra en el caso de
Cuba- que "la concepción de derechos humanos cubanos no incorporan
derechos civiles", aunque sí "los sociales".
Asimismo, diversos analistas locales señalaron
que varios gobiernos violan permanentemente los derechos humanos, sin que
esto signifique que se les designe un relator especial, y que Estados Unidos
se ha colocado a la cabeza de esas violaciones. También fue la posición
de Néstor Kirchner y Adolfo Rodríguez Saá, dos de
los tres candidatos justicialistas (peronistas, como Duhalde) a la presidencia,
y de la candidata de Alternativa para una República de Iguales (ARI),
Elisa Carrió.
Los que apoyan a Washington
Sólo
el ex presidente Carlos Menem, también del Partido Justicialista,
aliado incondicional del gobierno de George W. Bush, con cuya familia mantiene
sociedades de negocios, y Ricardo López Murphy, el economista ortodoxo
y ex ministro de Economía del gobierno de Fernando de la Rúa,
ahora convertido en el candidato de la derecha conservadora, apoyan la
línea de Washington.
Pero la mayoría de los argentinos consultados en
las encuestas, que revelaron que 90 por ciento se oponía a la guerra
de Irak, ha exigido también la abstención en el caso de Cuba
o directamente un voto contrario a la posición exigida por Washington.
Los pedidos de cubanos residentes en Miami, divulgados aquí, de
que Estados Unidos ahora vaya a por Cuba tras Irak, contribuyeron a aumentar
aquí la posición de rechazo a la política de George
W. Bush hacia Cuba.
Por su parte, el Comité Nacional de la centrista
Unión Cívica Radical (UCR) había reiterado su tradicional
postura de abstención en Ginebra, al considerar que Estados Unidos
utiliza la reunión de la Comisión de Derechos Humanos de
Naciones Unidas para trasladar su conflicto de más de cuatro décadas
contra el país caribeño, mezclando "las correctas políticas
de defensa de Derechos Humanos con la intención de condenar" a Cuba.
La UCR sostiene que Cuba debe respetar los compromisos
pronunciados en distintas cumbres iberoamericanas vinculados con los Derechos
Humanos y la pluralidad de ideas políticas, al tiempo que "es fundamental
que Argentina recupere la decisión soberana sobre sus actos de política
exterior", ratificando "la vocación de respeto a los principios
de no intromisión y de autodeterminación de los pueblos".
Por su lado, el juez español Baltasar Garzón,
quien la víspera fue distinguido con el título Honoris
causa por la Universidad Nacional de Quilmes, condenó la acción
de Estados Unidos contra Irak: "No sólo ha sido una invasión,
también ha sido injusta, inmoral y desproporcionada".
El magistrado de la Audiencia Nacional de España
la definió como "una guerra de conquista", y recordó cómo
fueron colocadas banderas estadunidenses en lugares públicos iraquíes,
resaltando también la ilegalidad de una acción realizada
al margen del Consejo de seguridad de la ONU.
Garzón, quien habló con La Jornada,
dio su apoyo a una inicitiva de abogados argentinos para enjuiciar a los
responsables de esa guerra ilegal, declarada fuera del marco de Naciones
Unidas. "Argentina tiene un sistema jurídico que responde al principio
de justicia penal universal y por lo tanto tiene no sólo la posibilidad,
sino la obligación de intervenir si hay una denuncia", sostuvo.
Se refirió así a la decisión del
fiscal Eduardo Freiler de aceptar la demanda presentada por la Asociación
de Abogados de Buenos Aires (AABA) "para que se juzgue en Argentina por
conspiración contra la paz y asociación ilícita, por
cometer crímenes de guerra y de lesa humanidad, a los responsables
de la invasión" a Irak. La AABA hizo su presentación ante
la Procuración General de la Nación antes que se iniciará
el ataque contra el país árabe.
Empate de candidatos
Cuando faltan apenas 10 días para unas elecciones
cuya campaña transcurre en medio de la indiferencia ciudadana, el
presidente Duhalde señaló que existe una paridad en la intención
de voto de entre "cuatro o cinco competidores", pero confió en que
Néstor Kirchner terminará imponiéndose.
Duhalde sostuvo también que "las encuestas dicen
que no está adelante Carlos Menem", a pesar de que algunos sondeos
lo ubican en primer lugar en la intención de voto con un punto escaso
sobre Kirchner.
Pero Kirchner y Rodríguez Saá suman más
del doble de lo que Menem obtendría (18.3 por ciento), y además,
Menem es el candidato que más rechazo general, por lo cual se las
vería muy difícil en una segunda vuelta que parece segura,
cuando ningún candidato llega ni siquiera a 20 por ciento. Detrás
de Menem y Kirchner logró colarse ahora López Murphy, al
parecer gracias a indecisos y votantes de derecha. En cuarto lugar está
Rodríguez Saá y Elisa Carrió, según los sondeos,
descendió a un quinto puesto de los 19 candidatos en liza.