Agua y energía, recursos que más escasean en el mundo

Insuficientes, los esfuerzos para proteger el ambiente

En México, la falta de líquido frena ya el desarrollo

ANGELICA ENCISO L.

Aunque el Día Mundial del Medio Ambiente se celebra cada año, los compromisos de las naciones para proteger el ecosistema aún son limitados, los convenios internacionales permanecen estancados porque continúa la fase del establecimiento de programas.

Los protocolos de Cartagena, sobre biodiversidad, y el de Kyoto, sobre cambio climático, derivados de la cumbre de Río de Janeiro, todavía no son ratificados por todos los países para su puesta en marcha. Este último no será firmado por Estados Unidos, la nación que genera más emisiones de monóxido de carbono, el principal gas que provoca las modificaciones del clima.

De acuerdo con el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, los problemas ambientales que pesan sobre el mundo son agua, porque cada año mueren 3 millones de personas por enfermedades derivadas del consumo de líquido contaminado; energía, 2 mil millones carecen del servicio; salud, millones de personas fallecen anualmente a causa de problemas relacionados con el medio ambiente, y los casos más frecuentes se dan por contaminación del aire y por desechos tóxicos; agricultura, alrededor de dos terceras partes de las tierras cultivables están afectadas por erosión, y biodiversidad, 25 por ciento de mamíferos y 12 por ciento de aves están amenazadas y corren el riesgo de desaparecer.

Situación en México

El agua, considerada asunto de seguridad nacional por el gobierno foxista, es un recurso sujeto a alta presión y ya es causa limitante del desarrollo. A pesar de ello, las pérdidas anuales por fugas se mantienen en alrededor de 50 por ciento, según reporta la Comisión Nacional del Agua, a lo que se suma la contaminación de las principales cuencas hidrológicas.

En el uso del agua se da prioridad a los centros urbanos, mientras en las zonas rurales la escasez del líquido es una constante, lo cual se evidencia en las cifras oficiales, porque de los 12 millones de personas que carecen del servicio de agua potable, 73 por ciento vive en el sector rural.

Los problemas para abastecer de líquido a la población se extienden a 38 ciudades del país, de las cuales destacan las urbes fronterizas; las zonas metropolitanas de Monterrey, Guadalajara, ciudad de México, Toluca y Puebla; centros turísticos como Cancún, Los Cabos, Ixtapa y Acapulco, así como las áreas industriales, de acuerdo con información de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

En las urbes, el reparto y consumo del líquido se da en forma diferenciada; por ejemplo, en la ciudad de México las diferencias son drásticas, ya que en los asentamientos sin servicios cada persona utiliza 28 litros diarios; en los sectores medios el gasto va de 275 a 410 litros, y en los de máximos ingresos el consumo llega a ser de 800 a mil litros.

También hay diferencias en la distribución natural en el país, porque en el centro, el norte y el noroeste -zonas áridas y semiáridas-, donde reside 77 por ciento de la población, se da 28 por ciento del escurrimiento, mientras que en el sureste se localizan los mayores cuerpos de líquido y zonas de recarga, pero hay 3 millones de personas sin agua potable.

Además del tema del agua, alrededor de 30 por ciento de los suelos de México -60 millones de hectáreas- son inservibles por su alto grado de deterioro y se llevará millones de años su recuperación, indica información de la Red Mexicana de Esfuerzos contra la Desertificación y la Degradación de los Recursos Naturales.

Al año se pierde alrededor de 11 por ciento del producto interno bruto, el equivalente a 700 mil millones de pesos, a causa de la degradación de los recursos naturales, lo cual no se restituye en el presupuesto asignado al sector -13 mil millones de pesos-, indica la organización no gubernamental.