MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

Relaciones que trastocó la guerra contra Irak

Políticas discriminatorias, en primer plano

DE LA GUERRA CONTRA IRAK parece que sólo se acuerdan los familiares de los soldados muertos en acción y, desde luego, los que disfrutan los jugosos negocios producto de la "reconstrucción" del territorio ocupado.

SIN EMBARGO, EL Sistema Económico Latinoamericano (Sela) en un balance sobre las secuelas comerciales que para la región generó dicha invasión y las consecuencias de la "guerra contra el terrorismo" que promueve baby Bush, advierte que la "cruzada" promovida por la Casa Blanca podría prolongar y agudizar la recesión estadunidense, lo cual deprimiría las importaciones y golpearía fuertemente a las economías latinoamericanas. En los hechos, uno de los sectores más impactados ha sido el turístico, del que muchos países regionales captan el grueso de divisas.

ESTE CONFLICTO HA DADO pie a ciertas iniciativas que mejorarían las relaciones comerciales de Estados Unidos con sus adversarios, pero que al mismo tiempo causarían tensiones en los vínculos económicos y políticos con sus aliados. "Washington ha estado prestando considerable atención a las disputas de alto perfil con naciones tradicionalmente amigas como Francia y Alemania, aunque la guerra y sus efectos también podrían tener un impacto igual de fuerte en las relaciones de Estados Unidos con los países de América Latina y el Caribe".

LA GUERRA CONTRA IRAK, señala, trastocó algunas de las "consecuencias usuales" de los conflictos armados. Las guerras suelen estimular y redirigir las actividades económicas, alentando a las partes beligerantes a expandir la producción y el consumo, a buscar relaciones económicas más estrechas con sus amigos y vecinos, y a reducir la dependencia de mercados y fuentes de suministro distantes. Con algunas variaciones y excepciones, así han sido, por lo general, las experiencias vividas en términos de las relaciones económicas y políticas de Estados Unidos con los países de América Latina y el Caribe en los principales conflictos del siglo XX. Ahora parece suceder lo contrario.

A MEDIANO PLAZO, el conflicto también ha agravado las tensiones con respecto a las negociaciones para el Area de Libre Comercio de las Américas. "Aunque no existe razón alguna para pensar que la guerra per se provocará el colapso del proceso del ALCA, sí representa otra fuente de presión centrípeta en las negociaciones hemisféricas. Es posible que estos recientes acontecimientos alienten a Estados Unidos a concentrar sus negociaciones de libre comercio con socios específicos, en lugar de regiones enteras. A largo plazo, tanto la guerra contra el terrorismo como los esfuerzos encaminados a promover la paz en el Medio Oriente han inspirado una propuesta que podría afectar los intereses de los países exportadores de petróleo en esa región. El presidente Bush ha propuesto negociar un Tratado de Libre Comercio con Medio Oriente y, obvio es, el quid es el petróleo.

PARA EL SELA, "LA consecuencia más significativa de la guerra contra el terrorismo en materia de comercio tiene más que ver con una filosofía subyacente que una política detallada. Durante toda una década tras el colapso del comunismo en la URSS, Estados Unidos había flexibilizado las estrechas conexiones entre sus políticas comerciales y su orientación estratégica. Un símbolo de esto, por ejemplo, fue la decisión del gobierno de Bill Clinton de crear un Consejo Económico Nacional que tenía responsabilidades paralelas (no subordinadas) a las del Consejo de Seguridad Nacional, cuya creación es de más larga data, y la decisión de conceder estatus a nivel de gabinete al representante comercial estadunidense. Las conexiones entre la política comercial y los objetivos de seguridad fueron restablecidas de inmediato luego de los ataques terroristas del 11 de septiembre. Esto se evidencia no sólo en el cambio de nombre del Servicio de Aduanas al de Agencia de Aduanas y Protección de Fronteras y en el hecho de que esta agencia haya sido transferida del Departamento del Tesoro al nuevo Departamento de Seguridad Nacional, sino también en el reordenamiento de las prioridades del país. Sería exagerado afirmar que la política comercial ahora se rige únicamente por las necesidades de seguridad nacional, pero las conexiones entre estas dos áreas de la política pública son más fuertes en la actualidad que hace algunos años".

POR EL MOMENTO, EL énfasis principal está siendo colocado en políticas discriminatorias. "Los TLC pueden ser utilizados tanto para recompensar la cooperación como para manifestar descontento. Por ello, para algunos Estados miembros del Sela la iniciativa comercial más significativa que podría surgir de la guerra debería estar orientada a tratar con una región absolutamente distinta. "Los países exportadores de petróleo como Colombia, Ecuador, México y, especialmente, Venezuela, podrían ver el valor que tiene disfrutar de acceso preferencial y protegido al mercado estadunidense, que se vería afectado por la posibilidad de un TLC entre Estados Unidos y los gigantes petroleros del Medio Oriente".

DICHO TLC NO SE NEGOCIARIA como un acuerdo regional y único, sino como una serie de acuerdos bilaterales que podrían ser agrupados en un tratado definitivo. "El petróleo es la causa primaria de discriminación en la política de Estados Unidos hacia Medio Oriente, pero hasta ahora ha producido discriminación contra esta región y en favor del resto del continente americano. El objetivo original de Estados Unidos al proponer negociaciones para establecer tratados de libre comercio con sus vecinos más cercanos era asegurarse el acceso a los suministros petroleros de Canadá y México, y al mismo tiempo reducir su dependencia de las importaciones de los países árabes. Si las negociaciones para el establecimiento del ALCA concluyen con éxito, se culminará un proceso mediante el cual Estados Unidos habrá alcanzado acuerdos comerciales preferenciales con países vecinos que, colectivamente, representan, en primer lugar, más de un tercio de las importaciones de petróleo y gas natural (gracias al TLC entre Estados Unidos y Canadá), luego la mitad (gracias al TLCAN) y finalmente dos tercios (gracias al ALCA)''.

Las rebanadas del pastel:

LO MEJOR DEL CASO ES que (Los Pinos dixit) "otra vez somos amigos" de los güeros.

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