Cuestiona el proteccionismo y la falta de ayuda a los países en desarrollo

Recomienda el Ecosoc apoyar al agro para erradicar pobreza y hambruna

KYRA NUÑEZ CORRESPONSAL

Ginebra, 3 de julio. La erradicación de la pobreza rural y de la hambruna en el mundo -con especial énfasis en Africa- es crucial para el logro de las metas para el desarrollo acordadas internacionalmente, razón de peso para que el apoyo al agro sea parte integral de las políticas nacionales e internacionales, incluyendo la respuesta bilateral de donantes y el trabajo coordinado de las agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Tal fue el resultado al que llegaron los ministros y jefes de delegaciones participantes en el segmento de alto nivel del Consejo Económico y Social de la Organización de las Naciones Unidas (Ecosoc, por sus siglas en inglés) expresado en una declaración ministerial adoptada al término de tres días de debates enfocados, este año, al desarrollo rural.

En lo relacionado con la apertura de los mercados de los países industrializados a los productos agrícolas y no agrícolas de los países en desarrollo, Ecosoc no fue más allá del reconocimiento de "que dicho impedimento es un problema serio. Es un tema que los ministros de comercio habrán de resolver en la conferencia de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en septiembre próximo, en México", expresó Gert Rosenthal, presidente de este órgano directivo de la ONU.

El 75 por ciento de la población mundial vive en áreas rurales, sobre todo en más de 40 países entre los más pobres del planeta. Sin embargo, la situación dramática del campo y de la pesca se ha agudizado por la sequía y desertificación, entre otros males medioambientales, pero sobre todo porque los productos agrícolas no son colocables en el comercio internacional, a lo que debe sumarse la marcada disminución de las inversiones extranjeras en el sector agrícola y la permanencia de subsidios y otras medidas proteccionistas en países industrializados.

La declaración confirma la postura política de que la agricultura sustentable y el desarrollo rural son esenciales para impulsar programas para la seguridad alimenticia y la protección medioambiental.

La citada declaración dedica varios apartados a la urgente necesidad de apoyo para Africa, región asolada por la sequía, las guerras y la epidemia de sida. Llama a los países industrializados a respetar la meta de 0.7 por ciento de contribución para la asistencia al desarrollo general y de 0.15 a 0.20 por ciento para los países menos adelantados.

Rosenthal, Inti Desai, subsecretario de la ONU para Asuntos del Desarrollo, y Lennart Bage, presidente del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola, coincidieron separadamente en la necesidad de revalorar el papel de los ministerios de agricultura, que aparentemente podrían ser entidades obsoletas en tiempos de la globalización. Quizá se esté acercando el tiempo en que éstos sean parte estructural de la agenda industrial "pero es una decisión que compete a cada país, de acuerdo con sus necesidades", expresó Rosenthal.