Nuevo ataque contra un convoy deja un militar estadunidense muerto y tres heridos

Admite EU que en Irak sus tropas enfrentan una guerra de guerrillas

"No dudaré en pedir más efectivos" si la situación se agrava, dice el nuevo jefe del comando central

Soldados descontentos por su no retorno piden a la televisora ABC la renuncia de Donald Rumsfeld

REUTERS, AFP Y DPA

Washington, 16 de julio. Las tropas estadunidenses en Irak se enfrentan a una "guerra de guerrillas", reconoció hoy el nuevo jefe del comando central de Estados Unidos, general John Abizaid, quien agregó que si la situación se agrava "no dudaré en pedir más tropas", en momentos en que un nuevo ataque contra las fuerzas de ocupación dejó un soldado muerto y un misil aire-tierra fue disparado contra un avión militar estadunidense en el aeropuerto de Bagdad, aunque erró el blanco.

El reconocimiento de la resistencia iraquí se produce cuando varios soldados estadunidenses expresaron su disgusto ante la televisión de su país por continuar en Irak pese al anuncio de que regresarían a sus hogares tras ser remplazados.

Un ataque a un convoy militar mató hoy a un soldado estadunidense, elevando a 147 el total de bajas de Estados Unidos en Irak, lo que iguala el total de los caídos en la Guerra del Golfo, en 1991.

Un vehículo militar iraquí calcinado que se encontraba a las orillas de una autopista al oeste de Bagdad, cerca de la localidad de Abu Gharib, fue cargado de explosivos para estallar al paso de la caravana de 30 vehículos, dijo el teniente coronel Kenneth Gantt, de la tercera división de infantería, ataque que también dejó tres heridos.

Blancos fáciles

"Debemos partir. Somos blancos fáciles. No podemos defendernos sentados en los caminos", dijo el soldado David McCall, mientras pobladores salieron de sus casas para observar la escena.

"Estamos felices porque se trata de una fuerza de ocupación", dijo por su parte Mansour Badri, adolescente que vive en la zona.

Habitantes del lugar informaron que desconocidos habían lanzado un cohete contra un vehículo blindado que circulaba por la ruta hacia Fallujah, a 50 kilómetros de Bagdad, donde soldados de la tercera división habían dado muerte en la madrugada de ayer a iraquíes que habían atacado con lanzacohetes.

Otros dos soldados estadunidenses fueron heridos hoy, así como cinco iraquíes, entre ellos un niño, cuando una granada fue lanzada contra un vehículo blindado estacionado en el centro de la capital.

También en Bagdad una bomba artesanal estalló cerca de un banco hiriendo a un soldado.

Asimismo, un avión militar es-tadunidense fue atacado esta ma-ñana con un misil tierra-aire cuando aterrizaba en el aeropuerto de Bagdad, anunció esta noche una portavoz del ejército, el sargento Amy Abbott, quien dijo que se trata del primer ataque de este tipo.

Los ataques de hoy coinciden con el 24 aniversario de la llegada al poder del derrocado presidente Saddam Hussein, el 16 de julio de 1979, y se registran cuando Estados Unidos reconoce por primera vez que hay guerrillas en Irak.

El mes pasado el secretario de Defensa, Ronald Rumsfeld, sostuvo que no existía en ese país una "resistencia bien organizada".

Sin embargo, el general Abizaid dijo que "se está llevando a cabo lo que describiría como una campaña clásica de guerrilla contra nosotros. Es un conflicto de baja intensidad, pero es bélico. El nivel de resistencia ha aumentado", precisó.

"Nos tomó un poco desprevenidos la destrucción completa del ejército iraquí y la desaparición casi total de sus servicios de seguridad, sobre todo de la policía", declaró el jefe del comando central militar durante su primera conferencia de prensa en el Pentágono, desde que asumió este mes en remplazo del general Tommy Franks.

Esta caída contribuyó a la anarquía y a la inseguridad en Irak tras la derrota del gobierno. "Una vez que comprendimos este ambiente, supimos que debíamos prolongar la misión de militares más tiempo que el que deseabamos", explicó.

Abizaid dijo también que los mi-litares en Irak que denigren públicamente a las autoridades serán sometidos a sanciones. Varios soldados de esa división expresaron su descontento a la cadena ABC este miércoles, e incluso pidieron la renuncia de Donald Rumsfeld.

"Nadie que lleve uniforme tiene la libertad de decir cualquier cosa que denigre al secretario de De-fensa o al presidente de Estados Unidos", señaló Abizaid.

El sargento Felipe Vega se quejó a su vez que "nos dijeron que la forma más rápida de regresar a ca-sa" era tomar Bagdad, y "eso hicimos. Pero todavía estamos aquí".

Pero la Casa Blanca rechazó que haya una baja moral en las tropas: "Saben que lo que están haciendo es muy importante, ayudar a imponer la seguridad y estabilizar Irak para que pueda avanzar hacia la libertad y la democracia -dijo el portavoz Scott McClellan-. Nuestras tropas están haciendo un gran sacrificio y el presidente (George W. Bush) está agradecido por ello".

El salvavidas de la ONU

En Irak hay más de 147 mil soldados estadunidenses y 13 mil británicos, además de contingentes me-nores de países como Polonia, Ru-mania, Hungría y Lituania.

Tropas de Ucrania, España, Honduras, República Dominicana, El Salvador y Nicaragua formarán una segunda brigada.

Pero Estados Unidos no ha lo-grado persuadir a países como Francia, que al igual que India ha puesto como condición para en-viar tropas que estén bajo bandera de la Organización de Naciones Unidas (ONU).

El ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Joschka Fischer, se mostró hoy en Washington partidario de que la ONU juegue un rol más importante en Irak, aunque esto no modifica una posición de rechazo de Berlín a la participación militar alemana, que sólo está dispuesto a brindar ayuda humanitaria y para la reconstrucción.

Por su lado, el secretario de Es-tado, Colin Powell, opinó que la resolución 1483 ya cubre la inclusión de otros países en la administración de Irak, aunque reconoció que existen quienes desean un nue-vo mandato de la ONU. Señaló que mantiene conversaciones con el secretario general, Kofi Annan.

Annan, a su vez, confirmó que el Consejo de Seguridad analiza la posibilidad de contribuir con una fuerza en Irak.

En Viena, entre tanto, la Agencia Internacional de Energía Atómica reveló que 10 kilos de compuestos de uranio desaparecieron de la instalación de Tuwaitha, cuando saqueadores irrumpieron en ese sitio y vaciaron varios contenedores, durante el caos de la posguerra.