REPUBLICA DE PANTALLA

Jenaro Villamil

Bush-Blair, la caja negra de la invasión a Irak

La posguera mediática ha comenzado

El Chiquihuite en Perú, ¿se reproduce un modelo?

LA POSGUERRA MEDIATICA contra los gobiernos de George W. Bush y Tony Blair comienza a develar los secretos de la caja negra de la invasión a Irak, como si ambos mandatarios fueran aeropiratas que estrellaron los poderosos aviones de sus imperios en las Torres Gemelas de las instituciones internacionales. Lo que antes, durante y después de la guerra se dijo con insistencia -se infló la peligrosidad de Irak para justificar una acción unilateral que cobró más de 2 mil vidas- se confirma paso a paso, aun con el alto grado de autocensura que prevalece en Washington y en Londres.

POR SI FUERA poco, a la nueva actitud de acoso de los medios de Estados Unidos y Gran Bretaña frente al "engaño" de los informes de inteligencia anglo-estadunidenses sobre las armas de destrucción masiva del régimen de Hussein, acusado por Bush en enero de querer comprar "signficativas cantidades de uranio en Africa" (polémica frase utilizada por el mandatario estadunidense en su informe prebélico ante el Congreso) se ha sumado la muerte del científico David Kelly, el informante de la BBC de Londres, cuyas revelaciones al periodista Andrew Gilligan acabaron por catapultar al gobierno de Blair.

LA MUERTE DE Kelly podría ser considerada el primer asesinato político de la coalición Bush-Blair para frenar el efecto boomerang en la opinión pública que se ha generado con las revelaciones, las contradicciones de la CIA y la inteligencia británica y las crecientes protestas de los 146 mil soldados estadunidenses apostados en Irak, enfrentando una auténtica "guerra de guerrillas" contra la ocupación. O, quizá, si la policía británica llamara a los fiscales de la procuraduría de la ciudad de México, descubrirían que Kelly, como la abogada Digna Ochoa, se suicidó para generarle la peor crisis política a Tony Blair, cuyo cargo ahora pende de un hilo. No están muy lejos de hacerlo: según reportes de la televisión inglesa, el portavoz de la policía, superintendente David Purnell, dijo que el cadáver del doctor Kelly presentaba cortes en las venas de su muñeca izquierda y que al lado de su cuerpo fueron encontrados un cuchillo y un tubo de analgésicos llamados co-proxamol.

La credibilidad derrumbada

LA POSGUERRA MEDIATICA tiene diversos ingredientes. He aquí algunos de ellos:

1. LA CADENA televisiva CNN, tan autocensurada frente a los reportes del Pentágono durante la invasión a Irak, dio a conocer el pasado 17 de julio un sondeo con 2 mil 505 llamadas con la pregunta: "¿Cree usted que Bush deliberadamente usó información dudosa o falsa para justificar la guerra contra Irak?" El 84 por ciento opinó que sí fue deliberado y sólo 16 por ciento consideró que lo hizo "de buena fe".

2. FRENTE A LA crisis de credibilidad sufrida por todos los medios estadunidenses después de la guerra (recuérdese el escándalo de Jayson Blair en The New York Times, las revelaciones sobre el fraude y el telemontaje que resultó ser el "rescate" de la soldado Jessica Lynch y la creciente baja en los ratings de los informativos de las cuatro grandes cadenas televisivas), las televisoras estadunidenses se han colocado a la cabeza de la pugna por ejercer la función de "perro guardián" frente a la censura del gobierno de Bush. Es su sobrevivencia o el creciente hartazgo de los ciudadanos estadunidenses frente a los engaños lo que está en juego. La cadena televisiva ABC ha sido particularmente incisiva frente a las contradicciones del jefe de la CIA, George Tenet, y el periódico The Washington Post reveló el pasado viernes que el gobierno de Bush, a pesar de las reservas de la CIA sobre la autenticidad de los reportes británicos acerca de la compra iraquí de uranio a Africa, decidió incluirlo en sus reportes.

3. ANTE LAS constantes revelaciones y la tardía crítica de legisladores demócratas, el gobierno de George W. Bush acusa una fuerte caída frente a los crecientes problemas de la economía y la posguerra en Irak. Según el sondeo de la compañía Zogby International, el nivel de aprobación de Bush bajó de 82 por ciento, registrado dos semanas después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, a 53 por ciento en la tercera semana de julio de 2003. La opinión negativa hacia Bush aumentó de 17 a 46 por ciento durante el mismo periodo. El 66 por ciento de los mil cuatro encuestados tuvo una mala opinión del manejo de Bush de la economía y, por primera vez, 47 por ciento de los posibles votantes consideró que es hora de un cambio en la Casa Blanca, en comparación con 46 por ciento que opinó que Bush merece una relección. Los especialistas demoscópicos prevén que esta brecha crezca y la relección de Bush en 2004 esté en serio peligro.

4. LOS PRINCIPALES periódicos británicos estimaron ayer que Tony Blair enfrenta la peor crisis de su gobierno. El Daily Telegraph tituló así su información sobre el hallazgo del cadáver de David Kelly: "Muerte del chivo expiatorio". Este periódico, como la mayoría de los rotativos británicos, le demanda a Alastair Campbell, director de Comunicación de Blair, que renuncie; al ministro de Defensa, Geoff Hoon, que "rinda cuentas"; a Blair, que formule "una declaración política". El Daily Mail ataca al gobierno laborista. Publica en primera plana las fotos de Blair, Campbell y Hoon con el subtítulo: "¿Están orgullosos?" The Independent considera que Kelly era "un hombre de bien y un funcionario fiel" que fue presionado hasta alcanzar "niveles intolerables". Financial Times indica que "la muerte de David Kelly es un enorme golpe asestado a todo el gobierno de Tony Blair".

FRENTE A ESTAS reacciones, ¿podrá repetir Blair la frase que hace unos días pronunció ante los congresistas estadunidenses: "la historia nos perdonará"?

5. ESTA CRECIENTE animosidad contra Bush y Blair se concatena con los reportes de una ocupación militar en Irak cada vez más difícil de sostener y con mensajes mediáticos de Saddam Hussein, que demuestra así que ni él ni Osama bin Laden han podido ser neutralizados. Sus mensajes son golpes de precisión en una opinión pública occidental cada vez más desfavorable a la ocupación. A pesar de los 25 millones de dólares de "recompensa" a quien ayude a atrapar a Hussein, éste se dio el lujo de difundir el pasado 4 de julio una videograbación con su voz y con un mensaje para alentar la resistencia a la invasión. El 17 de julio la emisora de televisión por satélite Al Arabiya, de Dubai, volvió a emitir una grabación de Hussein. El mensaje del tirano iraquí subraya que todas las acusaciones contra su régimen "eran infundadas" y llama a arreciar las acciones de resistencia.

EL MIERCOLES 16 de julio la cadena ABC difundió imágenes y testimonios de desmoralizados soldados estadunidenses, quienes dijeron haber perdido fe en su ejército. "Si Donald Rumsfeld estuviera aquí, le pediría su renuncia", declaró molesto un soldado. El sargento Filipe Vega dijo que desde el 9 de abril la tercera división de infantería está en espera de retornar a su país. "Nos dijeron que la forma más rápida de regresar a casa era a través de Bagdad y eso es lo que hicimos. Ahora todavía estamos aquí", afirmó.

FRENTE A ESTA ola de críticas, el vocero de la Casa Blanca, Ari Fleischer, declaró el lunes 14 de julio que todo se debe al "furor periodístico" de los medios de su país. Dos días después abandonó su cargo.

Chiquihuitazo en Perú

LA TECNICA UTILIZADA por Televisión Azteca para "cobrar deudas" y asaltar las instalaciones de otra cadena televisiva concesionada -como ocurrió con el Canal 40, el 27 de diciembre de 2002- parece ser ahora exportada a Perú, revelando el alto grado de impunidad y de concentración que pueden adquirir los dueños de las corporaciones mediáticas latinoamericanas, que se imponen sobre el propio Estado.

EL VIERNES 18 de julio, después de una semana en litigio, la señal de Panamericana de Televisión, la cadena más importante del país andino, salió del aire tras una disposición del Ministerio de Transportes y Comunicaciones que suspende por 30 días la licencia de dicho medio de comunicación.

LA HISTORIA DEL litigio involucra a dos poderosos empresarios televisivos, Genaro Delgado Parker y Ernesto Schutz, ambos involucrados en actos de corrupción con Vladimiro Montesinos, el segundo hombre más poderoso en la era de Alberto Fujimori, y cuyo tele-juicio se transmite en Perú. Schutz se encuentra actualmente prófugo en Argentina y es dueño de Canal 4, la competencia.

EL 11 DE JULIO, ejecutivos cercanos a Schutz se presentaron en Panamericana de Televisión para "recuperar el control" de Canal 5, después de que una resolución judicial que benefició inicialmente a Genaro Delgado Parker quedó sin efecto. El enfrentamiento dejó más de 10 periodistas heridos y serios daños materiales.

DELGADO PARKER ADUJO que la administración de Schutz sobre Panamericana de Televisión era ilegal porque contó con el apoyo del ex asesor Montesinos, quien a finales de la década pasada lo apoyó para tomar el control de la estación a cambio de promover la relección de Fujimori en 2000. Sin embargo, también se ha demostrado que Genaro Delgado Parker estuvo vinculado a Montesinos, este émulo de Raúl Salinas de Gortari en el régimen de Fujimori que corrompió a prácticamente toda la clase política. Prueba de ello son dos videos en donde Montesinos le pide a Delgado Parker que retire de la programación de Canal 13 al periodista César Hilldebrandt, un férreo crítico del régimen de Fujimori.

EN MEDIO DE esta pugna y con una posición aún sospechosa por parte del gobierno de Alejandro Toledo, los principales afectados son los trabajadores de Panamericana de Televisión, que no saben a ciencia cierta quién les pagará sus salarios y quién se quedará con el control del canal.