Bombardeos de los rebeldes alcanzan la embajada de Estados Unidos en Monrovia

Al menos 60 muertos y 400 lesionados durante violentos combates en Liberia

"Urge desplegar tropas para salvar la situación", afirma el secretario general de la ONU

AFP, REUTERS Y DPA

Monrovia, 21 de julio. Al menos 60 personas murieron en los violentos combates que se registran en la capital de Liberia entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes del grupo Liberianos Unidos por la Reconciliación y la Democracia (LURD), quienes dispararon decenas de proyectiles de mortero, uno de los cuales impactó la embajada de Estados Unidos, que tuvo que ser evacuada.

Habitantes de Monrovia trasladaron 18 cadáveres frente a la embajada, en protesta porque Estados Unidos no quiere poner fin a la violencia. "Si no valoran nuestras vidas y no vienen a ayudarnos deberían irse", expresó Josiah Dogbah, uno de los rebeldes.

Un contingente adicional de 41 marines estadunidenses llegó este lunes a reforzar la seguridad en la sede diplomática, ante el recrudecimiento de los combates. Por su parte, el Departamento de Defensa manifestó que movilizará 4 mil 500 soldados hacia el Mediterráneo para eventualmente enviarlos a Liberia.

Sin embargo, el presidente George W. Bush no se comprometió a enviar tropas para poner fin a los enfrentamientos. Se limitó a señalar que su país "vigilaría estrictamente" la situación y "trabajaría con la Organización de Naciones Unidas (ONU) para poner en marcha las políticas necesarias para restablecer el cese el fuego".

Empero, Washington solicitó a los rebeldes liberianos poner fin a los "irresponsables e indiscriminados" bombardeos sobre Monrovia y a volver a la mesa de negociaciones. "Si quieren que les tengamos confianza para participar en un futuro gobierno democrático en Liberia, es necesario que cumplan sus compromisos", indicó el portavoz adjunto del Departamento de Estado, Philip Reeker.

También solicitó a líderes de Africa occidental que utilicen su influencia y fuerza para prevenir más actos de violencia mediante el control de sus fronteras e impidiendo el flujo de armas hacia Liberia.

Por su parte, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, destacó en Nueva York la necesidad de una "acción urgente" en favor de Liberia. "Creo que aún podemos salvar la situación si se despliegan rápidamente tropas", sostuvo.

Este día la capital liberiana fue objeto de un intenso bombardeo de morteros, que alcanzó diferentes barrios y provocó al menos 60 muertos, aunque fuentes de organizaciones humanitarias aseguraron que fueron cerca de 100. "Todavía no tenemos un balance preciso, pero decenas de personas murieron en los combates", dijo Pierre Mendi, responsable de Médicos Sin Fronteras en Monrovia.

Uno de los proyectiles cayó en una vivienda del centro de Monrovia y mató a 18 personas. De acuerdo con testigos, un niño murió al ser alcanzado por una esquirla cerca del hotel Mamba Point. Otras siete personas habrían fallecido en una iglesia, a causa del fuego de artillería. Además impactaron en el principal hospital de la ciudad. El total de heridos fue de 400.

Charles Benniem, uno de los responsables de LURD, afirmó que sus tropas no son responsables de los bombardeos, y acusó al régimen del Charles Taylor de querer "provocar el terror y el pánico". Mientras tanto, el jefe rebelde Seku Damate Conneh indicó que su grupo no tiene más opción que tomar "el control total" de Monrovia.

Los rebeldes -que luchan por deponer a Taylor, quien ha jurado estar hasta el final y que sólo abandonaría Liberia cuando se despliegue una fuerza internacional de paz en el país- intentan tomar el control de los puentes que conducen al corazón de la capital.

Los bombardeos provocaron caos en el centro de la ciudad, cuya población, que intentaba comprar comida y agua potable, era presa del pánico. Muchos civiles intentaron refugiarse en los edificios de la ONU, en clínicas y en el estadio.

El presidente nigeriano Olusegun Obasanjo llamó hoy en Abiyán a un alto el fuego en Liberia, "antes del despliegue de las fuerzas de la Comunidad Económica de los Estados de Africa de Oeste (CEDEAO)", acordado a principios de julio entre sus países miembros.