México D.F. Martes 22 de julio de 2003
Digna hacía planes para seguir trabajando antes
de su suicidio
Señora directora: Le solicitamos atentamente
publicar la presente carta en El Correo Ilustrado.
La tarde del 18 de octubre de 2001 cuatro sujetos con
traje oscuro y pelo corto entraron en la oficina que la abogada Digna Ochoa
compartía con otros defensores de derechos humanos. Tres de ellos
inspeccionaron el sitio mientras uno se quedó afuera vigilando.
"Ya llegamos, estamos aquí, pero no lo encontramos", dijo uno de
ellos a través de un celular o un radio.
De la misma forma ostentosa y prepotente en que entraron
se dirigieron a nosotros para preguntarnos por uno de los departamentos
y por un abogado de nombre "Javier". Minutos después llegó
Digna para atender la cita de trabajo que tenía con nosotros a las
18:30 horas.
Mientras duró la reunión la abogada nos
atendió con todo profesionalismo, concentrada en la información
que nos requería, analizándola, orientándonos, muy
entera, muy dueña de sí, demostrando su compromiso con las
causas que defendía.
Antes de irnos nos habló de las audiencias que
tenía en puerta y del trabajo preparatorio que implican. Una de
ellas era con los hermanos Cerezo, a quienes visitaría el fin de
semana, motivo por el cual no podía reunirse con nosotros antes
de nuestra audiencia el jueves siguiente, 25 de octubre.
Al día siguiente nos enteramos por los medios de
comunicación de la muerte de la licenciada, cuyo cuerpo había
sido encontrado en la misma oficina donde el día anterior nos había
atendido.
Durante el tiempo que Digna se hizo cargo de nuestro caso
jamás observamos signo alguno de depresión. Especialmente
las dos horas y media que permanecimos con ella el jueves 18 de octubre.
En ningún momento percibimos un estado mental y
emocional tan alterado que indicara la intención de suicidarse en
las horas posteriores, como afirman las conclusiones de la fiscal Margarita
Guerra. Al contrario, se mostró como una persona ocupada en sus
planes y proyectos inmediatos. En esas circunstancias nos despedimos de
ella a las 21 horas del día anterior a su asesinato. Esto también
lo dejamos asentado en las dos declaraciones ante el Ministerio Público.
Nos indigna y nos llena de rabia no sólo la conclusión
a que llegaron los encargados de la investigación, sino el empleo
de la difamación descarada que ensucia a los luchadores sociales
que, como Digna, llevan el signo que les habrá de marcar la vida:
dignidad.
La difamación ha servido a los gobiernos federal
y del Distrito Federal para esconder su incapacidad, la ausencia de una
investigación rigurosa que nunca estuvieron dispuestos a asumir,
así como la cobardía o la complicidad con los autores de
este artero crimen.
¿Tendrán ahora que realizarse estudios sicológicos
todos los defensores de derechos humanos y declarar, como en su momento
hizo Bárbara Zamora, que no piensan suicidarse?
La conclusión sobre el asesinato de Digna Ochoa
deja en mayor indefensión a los luchadores sociales y defensores
de derechos humanos.
Por eso responsabilizamos directamente al presidente Vicente
Fox; al jefe de gobierno del DF, Andrés Manuel López Obrador;
a los procuradores Rafael Macedo de la Concha y Bernardo Bátiz,
así como a los fiscales especiales Renato Sales y Margarita Guerra,
de la integridad física y emocional de los que dedican su vida a
la causa de los derechos humanos; especialmente los abogados Leonel Rivero
y Bárbara Zamora, quienes ya han sufrido amenazas e incluso agresiones
directas que en su momento han denunciado.
Atentamente
José Luis Peralta Chávez, Silvia Mariñelarena
Estrella, Adriana Vidal Millán, Margarita Gutiérrez Cuartero
y Rafael García Rodríguez
Cuestiona desempeño de fiscales en el caso de
la abogada
Señora directora: Por medio de la presente
me manifiesto respecto de la guerra de la fiscal Margarita Guerra
y de una protesta valiente contra ella.
¡Felicitaciones por el excelente artículo
revelador de Blanche Petrich, publicado el 20 de julio, con cabeza "Caso
Digna: resultado vergonzoso, por ahora"! En éste se llama a los
misioneros del suicidio por su nombre y se dirige la atención a
los intereses que influyeron en la fiscalía, mejor dicho las fiscalías
especiales del caso.
En su última declaración, la estrategia
de la guerra de Margarita se revela en distintos frentes. Los magos
aparecen nuevas pruebas con efecto retroactivo y hacen desaparecer
las que no cuadran con sus cuentos.
Aquellos que nunca conocieron a Digna le inventaron una
personalidad indigna. Los investigadores, en lugar de escuchar a los testigos
a quienes llaman "de oídas", hurgan en las intimidades de la difunta.
La señora Margarita desprecia el informe de la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos que de manera diplomática
sacó a la luz un escándalo jurídico; además,
la generala apunta sus baterías contra la coadyuvancia.
Si la justicia no hace justicia sino la guerra se
necesitan personas como Blanche Petrich, que se interesen por la verdad
más que por la victoria.
Atentamente
Harald Ihmig, a título personal
Niños zapotecos piden libertad para sus padres,
integrantes de la OPIZ
Señora directora: El 27 de abril fue detenido
y desaparecido Marcelino Santiago Pacheco, el 21 de junio pasó lo
mismo con su hermano Anselmo. Los dos fueron llevados de la ciudad de Oaxaca
por personas desconocidas. Ellos son indígenas zapotecos loxichas;
su único objetivo ha sido luchar al lado de sus pueblos y cumplir
el pensamiento y los acuerdos de sus comunidades.
Ellos son nuestros papás y nosotros, con nuestras
mamás, queremos decirles que los estamos esperando en nuestras casitas,
que con nuestras mamás sufrimos que no estén a nuestro lado.
Marcelino chico sacó 9.7 de promedio en la primaria,
Miguel sacó 9.9 y Gaviota 9.8; a los tres les dieron diploma que
queremos enseñarles y también volver a oír su risa,
porque no merecen que se los hayan llevado.
Marcelino grande había sido nombrado presidente
del Consejo Directivo de la Organización de Pueblos Indígenas
Zapotecos (OPIZ) por las asambleas de comunidades y por el Consejo de Representantes;
después de eso se lo llevaron. Su hermano Anselmo encabezó
del 16 al 19 de junio un plantón en Oaxaca de 60 comisionados por
las comunidades. Demandaron la presentación con vida y la libertad
de Marcelino Santiago Pacheco, la libertad de los presos políticos
loxichas y la solución a las peticiones del pueblo.
Nuestros papás nunca dejaron de luchar por sus
pueblos y no merecen que se los llevaran. Nosotros les pedimos que por
favor nos los devuelvan y que respeten la lucha de nuestros pueblos.
Atentamente
Marcelino Santiago Santiago, Gaviota Santiago Martínez,
Miguel Angel Santiago Martínez, Teresita Santiago Pacheco, Eva Santiago
Ramírez, Paulina Martínez Antonio
INVITACIONES
A presentación de proyecto cultural
Hoy a las 19 horas se presentará el proyecto Saberes
y conocimientos de México, en la Casa de la Primera Imprenta de
la UAM, ubicada en Moneda y Lic. Primo Verdad, a un costado de Palacio
Nacional. El propósito del proyecto es crear el catálogo
del patrimonio cultural intangible de la ciudad de México, que será
configurado como un sistema electrónico de los procesos vivos de
la cultura que derive en la creación de una red de redes, banco
de imágenes, directorios de creadores, atlas culturales y cartografías
de indiscutible valor como insumo para el sustento de proyectos comunitarios
y de investigación multidisciplinarios. Este esfuerzo lo realizaremos
con la convicción de que sólo desde la sociedad civil, junto
con la UAM, se podrá articular, sistematizar y operar un registro
puntual del proceso de los creadores. Alberto Dogart Murrieta, creador
y coordinador general del catálogo. Teléfono: 5547 9176.
E-mail: [email protected].
A la conferencia sobre la situación global tras
la guerra en Irak
La conferencia La situación global después
de la guerra contra Irak, del ciclo Guerra infinita y movimiento global,
tendrá como ponentes a Alfredo Jalife-Rahme y Alfredo Rojas Díaz
Durán.
Miércoles 23 de julio a las 18 horas, Café
de la Red, Chiapas 155 A, colonia Roma, entre Medellín y Monterrey,
55 84 43 42. Red de la sociedad civil, Saúl Sánchez, Edilberto
Bautista.
El
Correo Ilustrado
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