México D.F. Martes 22 de julio de 2003
Es el número uno de la serie Cardinal
7, que relatará los siete pecados capitales
La avaricia, primer corto producido íntegramente
por michoacanos
La producción incluye obra de poetisas como Sylvia
Plath, Alejandra Pizarnik y Rosario Castellanos El trabajo demuestra
que se es posible hacer cine con pocos recursos: Jesús Pimentel
JUAN JOSE OLIVARES
La avaricia es el primer cortometraje filmado de
la serie Cardinal 7, que narrará los siete pecados capitales
por medio de la voz de poetisas como Sylvia Plath, Alejandra Pizarnik y
Rosario Castellanos, cuya obra se transporta a una realidad tan mexicana
como universal. Se trata del primer trabajo fílmico íntegramente
producido por michoacanos, de la emergente Preciosos Productions en colaboración
con Solaris, y dirigido por Jesús Pimentel. El próximo sábado
será presentado a las 19 horas en la Casa Natal de Morelos, en Morelia,
Michoacán.
"La historia es una adaptación libre de poemas
de esas mujeres. Surgió de la admiración que siento hacia
ellas y su obra. Creo que se ha desperdiciado tiempo en hablar de su vida
íntima, cuando su obra es universal y mucho más bella que
las cosas que pudieron vivir en su momento. Lo que ellas dejan en poesía
tiene mucho peso y el reto era poderlo adaptar a una realidad mexicana.
Al final la voz de la mujer sigue siendo la misma a través de la
cultura y el tiempo. La idea es traspolar la realidad de cada una de ellas
y pasarla a una realidad más mexicana", comenta el ahora realizador,
antes abogado de comercio exterior, quien decidió que el cine era
lo suyo.
Un espejo, medio para entrelazar historias
"La idea del proyecto -abunda Pimentel- es que por medio
de un elemento físico, como un espejo, se puedan entrelazar una
historia y otra, y que finalmente pueda darse un largometraje. La idea
es de que sí es posible hacer cine con pocos recursos."
Filmada
en locaciones del lago de Cuitzeo y la ex hacienda del Junco, en San Juan
de Araró, Michoacán, La avaricia relata la historia
de una mujer (María de Lourdes Romero), que regresa a la vieja hacienda
que heredó el día de su supuesta muerte; en realidad entra
en un estado cataléptico, por lo cual se le da por muerta. Esteba,
el avaro esposo (Benigno Figueroa), intenta recobrar la sortija de matrimonio
mandando cercenar el dedo de la difunta, hecho que estimula la circulación
de la sangre y la devuelve a la vida. La mujer regresa de la tumba a buscar
la protección de su esposo, quien al verla de nuevo muere ante el
impacto.
"En este trabajo se pierde todo, está todo en contra
de hacerlo, en principio. La idea que sobrevive es la satisfacción
de poder expresar en imagen lo que alguna vez soñamos. Nunca me
propuse realizar algo que pudiera gustar de tal forma que pudiera venderse.
Lo que sí es importante es que encuentro en el cine la forma de
expresarme, que siempre soñé y hoy la tengo al alcance; una
persona con eso está más que bien pagada", expresa Pimentel,
quien se inició con cortometrajes de animación, y para quien
estudiar cine en la escuela Solaris, de Morelia, fue la posibilidad de
cambiar de vida.
-¿Una alternativa es crear colectivos?
Responde Flora Gallegos, una de las productoras y actrices
del corto: "Fue gratificante realizar este proyecto junto a personas con
deseos de hacer cosas: los dueños de la hacienda, en un gesto bellísimo,
abrieron las puertas de su casa; el entusiasmo de la gente que nos ayudó
con el vestuario, con el maquillaje, con la comida. Siempre pensamos que
era demasiado costoso, pero se puede cubrir con voluntad".
Se armó y se hizo en dos semanas
Jesús comenta que el guión fue visto primero
por la actriz Ofelia Medina, a quien gustó el proyecto. "Eso fue
motivante, que ella me haya dicho que le gustó. Todo fue muy rápido
porque en dos semanas se armó y se hizo."
Flora se acercó a la producción luego de
colaborar con Juan Pablo Villaseñor en la filmación del documental
que hizo sobre los niños de Morelia. Dice: "Originalmente Jesús
me invitó a trabajar como actriz. El proyecto tardaba en despegar
y luego me solicitó si lo podía apoyar en la producción.
Repito: el orgullo es que es un proyecto de buena voluntad, la de Ricardo
Benet, Juan Paulin, Salvador Castanedo... todo mundo llegó al proyecto
con ganas de hacer las cosas, sin la oportunidad más que de estar
en el proyecto. La producción es un espacio nuevo para explorar,
en el que te puedes sumar a proyectos interesantes y frescos con el impulso
y energía de los veinteañeros, capaces de hacer todo sin
nada; resuelven en forma impresionante, porque no teníamos equipo
y solucionan con frescura y se les ocurre cualquier cantidad de cosas para
resolver imprevistos".
-¿Dónde se podrán ver estos trabajos?
-En cualquier foro que esté abierto -comenta Pimentel-.
Siempre hay la oportunidad de presentar trabajos como los que vemos todos
los días. La esperanza es poder presentarlo en festivales; en algún
lugar del mundo se interesarán por este trabajo y tomarlo de forma
diferente.
Flora, por su parte, afirma: "La producción de
las otras seis historias también se hará con buena voluntad".
-¿Han intentado un acercamiento con autoridades
culturales por ser el primer trabajo de cine de michoacanos?
-Estamos en el proceso de promoverlo. Tienes que hacer
mucha antesala para que te reciban. El gobierno, con la iniciativa privada,
promueve el Festival de Morelia, y el corto, aunque está en posproducción,
ya lo enviamos para que pueda ser tomado en cuenta. Si a criterio de ellos
cubre el requerimiento, qué bueno. Qué irónico que
hasta ahora, luego de varios años (y siendo el estado originario
de los dueños de una de las cadenas más importante de distribuidores,
Cinépolis), surja una producción local.
Suma de pobrezas y entusiasmo
Flora interviene: "Algo que me parece importante es que
a veces la gente espera que le den para decidir hacer algo. Es válido,
pero nosotros no esperamos. Con la suma de nuestras pobrezas y nuestros
entusiasmos, terminamos de concretar este corto. Recibir el apoyo de una
institución es maravillo, justo, pero a veces no puedes parar tu
impulso en lo que deciden, porque hay muchos proyectos interesantes. Se
puede hacer todo, a lo mejor no con la parafernalia que uno necesitara,
pero es el inicio. La voluntad con la que se ha hecho este trabajo es lo
que más contentos nos tiene".
Jesús dice: "Todo viene de la falta de alternativas:
soy abogado, egresado de la Universidad Michoacana, y si ésta hubiera
tenido la carrera de cine en ese momento hubiera hecho hasta lo imposible
por entrar, porque es mi pasión. En un momento tengo que sumarme
a la vida laboral, pero con esa idea de hacer cine algún día.
Dije que el día que se me presentara la oportunidad no la dejaría
ir y así fue porque sé que será mi vida. Estoy dispuesto
a renunciar a mi vida de trabajo ahora. Y no es mi historia nada más;
Ricardo Benet (director de foto del corto), quien es arquitecto, me dijo
que un día decidió que lo de él era el cine y tuvo
que renunciar a todo para continuar".
La avaricia, Cardinal 7, cuenta con las
actuaciones de María de Lourdes Romero, Teresa Osorio, Benigno Figueroa,
Francini Ortiz; la producción es de Flora Gallegos y Ladimer Haluke;
la dirección fotográfica de Ricardo Benet; la foto fija de
Gabino Alzati; la música de Juan Paulín; la edición
de Juan Pablo Arroyo, y de locaciones Vicky y Fernando Ochoa.
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