Casi cubierta la demanda de ingreso a universidades de la ciudad de México, asegura

Elección de carreras saturadas, causa del rechazo de aspirantes: Rubio Oca

La alternativa, crear nuevas instituciones en Hidalgo, Morelos, Puebla y Edomex

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

La Secretaría de Educación Pública (SEP) aseguró que la oferta de lugares en las universidades de la ciudad de México casi cubre la demanda de ingreso, y que el rechazo de estudiantes se debe a que muchos quieren estudiar carreras saturadas, como medicina, derecho o administración.

El subsecretario de Educación Superior e Investigación Científica, Julio Rubio Oca, explicó que -según un estudio reciente- 40 por ciento de los egresados en los años 90 estaban subempleados o percibían sueldos bajos porque sus profesiones eran de poca demanda.

Ante esta disparidad entre el mercado de trabajo y la preferencia de los estudiantes, dijo que "el gran desafío de la SEP y de las universidades públicas es no seguir formando futuros desempleados, porque eso de nada le sirve al país".

De acuerdo con el análisis que hizo la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), explicó que hay abogados o médicos que trabajan como vendedores, es decir, en empleos donde requieren apenas el certificado de bachillerato o inclusive el de primaria.

Reconoció que mientras las instituciones públicas restringen su matrícula en estos programas, las privadas siguen ofreciendo lugares en estas carreras tradicionales, y la SEP no ha podido hacer nada para evitarlo.

Acerca de la demanda de ingreso, indicó que una investigación de 1999 demostró que ésta iba a crecer mucho en la próxima década en los municipios conurbados del estado de México, así como en Morelos, Puebla e Hidalgo, por lo que se ha puesto atención en crear nuevas instituciones en esas entidades.

Anadió que la Universidad Autónoma del Estado de México abrió nueve campus, la de Morelos dos y la SEP, junto con los gobiernos de los estados, fundó cuatro nuevas universidades politécnicas y tecnológicas, y pretende abrir otras dos en el transcurso de este año.

El ex rector de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) se refirió a los concursos de selección de la UAM, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Politécnico Nacional (IPN), que dieron como resultado un elevado número de aspirantes rechazados.

Rubio comentó que las cifras de demanda de ingreso aparentemente son muy altas, porque se estima que 30 por ciento de los aspirantes presentan solicitud al mismo tiempo en la UAM, el IPN y en la UNAM.

Aunque aseguró que las universidades de la ciudad de México tienen capacidad para recibir a casi la totalidad de los aspirantes, no especificó las cifras e insistió en que el problema es que la mayoría de los aspirantes quieren estudiar carreras saturadas.

Mencionó el caso de la UAM, que concentra 65 por ciento de su demanda de ingreso en apenas siete licenciaturas: administración, derecho, diseño de la comunicación gráfica, comunicación, sicología, estomatología y medicina.

Expuso que en cambio hay carreras menos demandadas, como ingeniería, arquitectura, sociología, diseño industrial, ingeniería biomédica y química, donde se aceptó a más de 50 por ciento de los candidatos.

El IPN se encuentra en la misma situación: la cuarta parte la demanda se concentra en los programas de contaduría pública, medicina, odontología y sicología.

Advirtió que el resultado de la saturación de carreras es que los egresados encuentran empleos mal remunerados o que no corresponden con su perfil. Para ilustrarlo refirió los resultados del estudio que elaboró la ANUIES, el cual señala que en 2000, 97 por ciento de los profesionales tenía empleo.

El problema es que de esta población, 40 por ciento conseguía puestos de menor rango y mal remunerados. Esta situación, añadió, está creando una "dinámica perversa", donde los licenciados son "subempleados" y los técnicos no consiguen trabajo, porque los licenciados obtuvieron el suyo.

Rechazó que este problema se deba al mercado de trabajo, y dijo que buena parte de la responsabilidad es de las instituciones de educación superior, que deben crear "programas pertinentes", tal como lo recomiendan organismos como la UNESCO.

Afirmó que las universidades públicas están conscientes de ello, y mencionó el caso de la Universidad de la Ciudad de México -de reciente creación y que es financiada por el Gobierno del Distrito Federal-, que no ha optado por crear carreras tradicionales.

Considero lamentable que se estén formando pocos profesionales en áreas que son fundamentales para el desarrollo del país, y lo atribuyó a que muchos jóvenes optan por determinadas profesiones porque rehúyen el estudio de las ciencias básicas y las matemáticas.