Desde marzo de este año existen diferencias entre Soberanes y Kompass

La CNDH se retira del comité de seguimiento de oficina de la ONU

VICTOR BALLINAS

La oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en México (OACNUDH), a cargo de Anders Kompass, y la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), cuyo presidente es José Luis Soberanes Fernández, han acrecentado sus diferencias, lo que culminó con el retiro del organismo nacional del comité de seguimiento a esa oficina.

Las discrepancias entre Kompass y Soberanes datan de meses y son públicas. Primero, el representante en México de la OACNUDH "realizó, a finales de febrero, la selección de los expertos -en derechos humanos- que elaborarán el diagnóstico nacional sobre derechos humanos y el programa nacional sobre el mismo tema, sin consultar al comité de seguimiento, como había sido acordado", reclamó la CNDH a Kompass el 4 de marzo pasado.

Un nuevo desencuentro entre Kompass y Soberanes se presentó diez días después del primer reclamo, esta vez por la difusión en la página web de la OACUNDH del informe La situación de los derechos humanos en México. Desarrollo y análisis. En dicho informe -elaborado por la oficina de Kompass- se aseguraba que "la oficina ha constatado mediante información y apreciaciones recibidas de diversos sectores que la CNDH enfrenta problemas de credibilidad y autoridad moral ante la sociedad en su conjunto, el gobierno federal e inclusive ante ciertas comisiones locales de derechos humanos. Esto debe ser sin duda, un foco rojo de atención para la cooperación técnica con México".

Abundaba el informe que "en México se continúan cometiendo violaciones sistemáticas a los derechos humanos por agentes del Estado, tanto a escala federal como local, principalmente municipal. Las violaciones se refieren a detenciones arbitrarias, procesos judiciales no apegados a derecho, tortura y malos tratos físicos, negligencia médica, acoso y hostigamiento contra defensores de derechos humanos, discriminación y exclusión de los indígenas, violación a los derechos de los trabajadores migratorios, entre otras".

También se anotaba en el documento que "la oficina percibe que las acciones gubernamentales sobre derechos humanos no han considerado, en su conjunto, acciones integrales que incluyan la ejecución de políticas públicas tendientes a mejorar y hacer justiciables los derechos económicos, sociales y culturales".

Agregaba que varias organizaciones no gubernamentales del comité de enlace con la OACNUDH "continúan mostrando un alto grado de desconfianza y distanciamiento de las acciones del gobierno en materia de derechos humanos". Y fue más allá, al aseverar que "la oficina percibe que varias organizaciones no gubernamentales (ONG) no han ideado con claridad el método adecuado para insertarse en el proceso de transición democrática que vive actualmente el país. Las organizaciones de derechos humanos no han dado el paso que falta para colaborar abiertamente con el gobierno y lograr resultados tangibles".

De nueva cuenta, la CNDH presentó una protesta ante Kompass por ese informe. Y también el gobierno mexicano hizo lo propio, por conducto de la cancillería. La protesta diplomática fue dura. El 12 de marzo, Kompass recibió una carta de Relaciones Exteriores en la que se le expresó un enérgico rechazo a los juicios que realizó sobre la CNDH la coordinación entre la Secretaría de Gobernación y la propia cancillería en materia de derechos humanos.

Relaciones Exteriores señaló que dicho informe más que acciones, "lo que contiene son juicios de valor y apreciaciones erróneas que reflejan desinformación y falta de comprensión, tanto del contexto, como del proceso que se vive en México".

La protesta llegó incluso a la oficina del alto comisionado de las Naciones Unidas para los derechos humanos, Sergio Vieyra de Mello, y el informe referido fue retirado el 13 de marzo de la página web. Kompass ofreció disculpas públicas tanto a la CNDH como a la cancillería.

En su disculpa, explicó que el contenido del informe "fue realizado sin su supervisión". También manifestó que "no compartía las descalificaciones hechas en el informe".

Kompass fue cuestionado la semana pasada sobre estas discrepancias, y sólo dijo que el asunto ya ha sido aclarado. Lo cierto es que la CNDH dejó de participar en el comité de seguimiento y el informe referido fue retirado definitivamente de Internet.

Por lo pronto, en la mesa de diagnóstico sobre la situación de los derechos humanos (realizada los pasados jueves 31 de julio y viernes primero de agosto, en Ciudad Juárez, Chihuahua), organizada por la oficina de Kompass, él estando presente, varias organizaciones civiles expusieron la falta de eficacia de la CNDH ante sus quejas y demandas.