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México D.F. Lunes 11 de agosto de 2003
Bajo peso y nacimiento prematuro son las amenazas, afirma experto
Peligran en su primera semana de vida 7% de recién nacidos en el Seguro Social
Las enfermedades infecciosas dejan de ser la principal causa de mortandad infantil, dice
De los 640 mil casos de recién nacidos atendidos anualmente en los hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), siete por ciento "corren riesgo muy alto de fallecer en los primeros siete días de vida, ya que son niños prematuros o de bajo peso", aseguró Sa-muel Flores Huerta, jefe de la División de Salud del Niño y del Adolescente de dicha institución.
Agregó que la prematurez y las enfermedades asociadas a ella, sobre todo del aparato respiratorio, son las primeras causas de muerte en el primer año de vida. Por ello, indicó, es una tarea fundamental cuidar la salud de la madre durante el embarazo y del niño durante su gestación que, aunque son aspectos paralelos, se tratan de forma independiente.
El especialista destacó que en nuestra país las enfermedades infecciosas han dejado de ser una de las principales causas de muerte entre niños menores de cinco años. Sin embargo, dijo, "aún se presentan de cinco a siete infecciones diarréicas o respiratorias en el primer año de vida, que si bien no tienen como conclusión la muerte, sí representa una frecuencia muy elevada", indicó.
En este sentido, Flores Huerta aseguró que gran parte de estas enfermedades se debe a la falta de un ambiente sano para los niños en el hogar o la escuela. "Esa es todavía una deuda que tiene la sociedad con los infantes, generar escuelas, hogares: centros educativos y recreativos con ambientes sanos", afirmó.
Accidentes, tumores y malformaciones congénitas son algunas de las principales causas de muerte que afectan a los menores de 14 años, aseguró Flores Huerta, quien agregó que gracias a los programas aplicados en la materia, los niños mexicanos han dejado de fallecer por enfermedades como la malaria, que sigue ocupando el cuarto lugar en mortandad infantil a nivel mundial, mientras que en nuestro país ya no aparece entre los primeros 20 motivos de decesos.
"Lo mismo ocurre con padecimientos como la diarrea, que ocupa el tercer lugar a nivel mundial en cuanto a muerte infantil, pero en México es la quinta causa, lo que significa que los niños ya no están muriendo por enfermedades curables, aunque reconocemos que existe el riesgo de puedan emerger nuevamente", indicó.
Desnutrición crónica, obstáculo en la salud infantil
Flores Huerta reconoció que la desnutrición aguda ya no es un problema de salud para los menores de cinco años atendidos en el IMSS, pues "ocupa la novena causa de muerte, y sólo se presenta como una enfermedad secundaria, es decir, asociada a algún padecimiento crónico o cáncer, que a pesar de los tratamientos aplicados, genera en los niños desnutrición", dijo.
No obstante, reconoció que el problema que ahora enfrentan es la desnutrición crónica entre los menores que viven en la pobreza. "La falta de alimentos en proporciones correctas y en cantidades adecuadas, hace que los niños vayan sobreviviendo, con algunas carencias, pero esta desnutrición crónica ya no los mata, sin embargo, año con año, les va restando centímetros de talla".
Se estima, dijo, que actualmente, cuando los menores van a ingresar a la escuela presentan un retardo en el crecimiento de 15 por ciento en su talla, "por eso nuestra población es bajita". El galeno destacó que al menos 10 por ciento de los niños atendidos en el IMSS presenta este problema, pero en poblaciones vulnerables, dijo, puede llegar hasta 40 por ciento, en donde no fallecen por desnutrición, pero ahora se presenta como un problema crónico.
"Si un niño debiera medir a los cuatro años un metro, estos infantes miden 90 centímetros. Aparentemente no se nota, corren, juegan, parecen sanos, excepto que los vemos de menor edad, pero esta problemática no sólo afecta su talla, también su rendimiento escolar y su salud", concluyó. LPS
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