México D.F. Jueves 14 de agosto de 2003
Junto con Canadá y Europa propone reducir
las tarifas de bienes industriales
Abandona Estados Unidos la idea de crear un "mundo
libre de aranceles"
El gobierno mexicano no debe aplicar una política
de complacencia ante la OMC, reclaman a Ernesto Derbez
REUTERS Y MATILDE PEREZ U.
Washington, 13 de agosto. Estados Unidos abandonó
su plan de crear un "mundo libre de aranceles" para 2015, al unirse a Canadá
y la Unión Europea en una propuesta dirigida a reducir las tarifas
de bienes industriales.
Gary Hufbauer, del Instituto de Economía Internacional,
dijo que el documento reflejaba una concesión implícita de
Estados Unidos de que los aranceles industriales "probablemente no llegarán
a cero" en 2015, como el gobierno del presidente George W. Bush propuso
el año pasado.
La nueva propuesta se dio a conocer el martes, cuando
los miembros de la Organización Mundial de Comercio (OMC) se preparan
para una reunión de ministros el mes próximo en Cancún.
Estados Unidos espera que los países puedan lograr
acuerdos en suficientes asuntos para mantener viva la meta de concluir
un nuevo acuerdo comercial mundial para enero de 2005.
Muchos países en desarrollo estaban recelosos de
la propuesta original de Estados Unidos, que contemplaba dos pasos para
eliminar los aranceles en 2015, ya que temían tanto la caída
de los ingresos del gobierno como la creciente competencia de bienes del
extranjero.
Publicará la SRE la postura mexicana
Por su parte, el titular de la Secretaría de Relaciones
Exteriores (SRE), Luis Ernesto Derbez, se comprometió a publicar
en la página electrónica de la Cancillería la postura
que mantiene el gobierno mexicano en la Organización Mundial de
Comercio.
También propuso volver a reunirse, a más
tardar el 25 de agosto, con las 36 organizaciones registradas para participar
en la reunión ministerial que se llevará a cabo del 10 al
14 de septiembre en Cancún, Quintana Roo.
Durante la reunión privada, la mayoría de
los representantes de las organizaciones reclamaron a Derbez la falta de
información y transparencia de la postura que asumirá el
gobierno federal en lo que será la quinta conferencia ministerial
de la OMC. Alejandro Villamar, de la Red Mexicana de Acción frente
al Libre Comercio (RMALC), comentó que el encuentro del pasado martes
con el canciller se llevó a cabo en un ambiente en el que se saludó
el acercamiento, pero también fue de reclamo, para puntualizar las
posturas de insatisfacción de varios de los participantes porque
el gobierno mexicano no ha defendido la economía del país.
Las organizaciones protestaron porque el gobierno mexicano
está exigiendo a los extranjeros que llenen la forma FM3 (formato
de no inmigrante) y paguen 158 dólares por el permiso de ingreso
al territorio nacional, incluyendo los países con los que se tienen
firmados acuerdos para no solicitar dicho trámite.
En el caso del sector agropecuario, asentaron la Asociación
Nacional de Empresas Comercializadoras de Productores del Campo, Confederación
de Porcicultores Mexicanos y el Consejo Mexicano de Porcicultura, no se
puede actuar "con ingenuidad" al sostener una postura de solicitar a los
países desarrollados reduzcan los subsidios que entregan a sus productores
y exportadores.
Después, la RMALC expuso que ni el gobierno federal
ni la SRE pueden aplicar una política de complacencia y de facilidades
al comercio que exige la OMC, como es la flexibilidad para que se privaticen
los energéticos. Hasta la fecha, la mayoría de los legisladores
no han aceptado los llamados contratos de servicios múltiples y
por tanto el gobierno no puede adelantarse a algo no aprobado.
Acuerdo agrícola entre EU y la Unión
Europea
REUTERS, AFP Y PL
Ginebra, 13 de agosto. Estados Unidos y la Unión
Europea llegaron a un acuerdo para reformar el comercio agrícola
mundial y lograr avances en la próxima reunión de la Organización
Mundial de Comercio (OMC) en Cancún. El plan ofrece a los países
en desarrollo, según algunos diplomáticos, la posibilidad
de exportar más.
Sin embargo, el documento de tres páginas no presenta
cifras como respuesta a los llamados a reducir los pagos estatales a los
agricultores, eliminar subsidios a la exportación y reducir las
barreras al comercio agrícola.
"Todos los países desarrollados deberán
concretar reducciones a los apoyos que deforman al comercio significativamente
mayores que las de la Ronda de Uruguay", cita el documento en referencia
al acuerdo de libre comercio global de 1993.
Agrega que los países con los mayores subsidios
comerciales realizarán esfuerzos importantes en un intento por responder
a las demandas de los países exportadores agrícolas para
concretar amplias reformas.
La propuesta, que se concluyó el martes por la
noche, entre la Unión Europea y los negociadores estadunidenses
tras días de intensas conversaciones, insta a los países
desarrollados a eliminar todos los derechos a la importación sobre
cierto porcentaje de los productos agrícolas de los países
en vías de desarrollo.
La reacción inicial de uno de los representantes
de los países en desarrollo, cuyanación ha impulsando una
reducción drástica a las barreras comerciales, fue cauta.
Pero Brasil, en nombre del Grupo Cairns, de países que no subsidian
su producción agrícola, dijo que el plan para reformar el
comercio agroexportador de Estados Unidos y la Unión Europea no
alcanza los objetivos de la ronda de Doha de la Organización Mundial
del Comercio.
El representante brasileño, Luiz Felipe de Seixas,
declaró: "Damos la bienvenida al intento (de presentar el plan),
todos dan la bienvenida a eso. Pero no es suficiente", y agregó
que las propuestas de reducir los aranceles externos y los subdsidios fueron
muy vagas. La India, a su vez, lo describió como "inviable".
Clave para el éxito de la ronda de Cancún
El documento, en caso de que sea aprobado por los 146
países miembros de la OMC -algo que está lejos de ser un
hecho-, sería presentado en la reunión de ministros de septiembre
en Cancún.
La reunión es considerada clave para las atribuladas
conversaciones sobre libre comercio de la Ronda de Doha del organismo internacional.
La reforma agrícola -una baja en los aranceles
y una reducción a todas las formas de subsidio con miras a su eventual
eliminación- es ampliamente vista como un elemento clave para alcanzar
el éxito en la ronda y para concretar un nuevo pacto comercial de
libre comercio hacia finales del año próximo.
En cuanto al respaldo doméstico, un tema en el
que tanto Estados Unidos como la Unión Europea han enfrentado severas
críticas internacionales, el nuevo plan convoca a aplicar recortes
en los programas considerados como más distorsionantes de las prácticas
comerciales.
Ciertas condiciones más estrictas también
serían aplicadas a otros tipos de asistencia que tienen menor impacto
directo en el comercio.
Las naciones ricas deberían reducir sus aranceles
bajo una compleja serie de fórmulas que eventualmente combinarían
el acercamiento gradual adoptado en la Ronda de Uruguay, con un porcentaje
más agresivo -que tampoco fue especificado- para las importaciones
agrícolas.
El plan propone establecer un límite a todos los
impuestos sobre importación de productos agrícolas, pero
contempla algunas excepciones en los países que consideren algún
producto de elevada importancia nacional y que necesite protección.
En esos casos, los miembros de la OMC involucrados deben
elevar el monto de las importaciones que hayan sido permitidas bajo determinadas
cuotas.
A los países en vías de desarrollo, muchos
de los cuales se han mostrado reacios a igualar los recortes de aranceles
de las naciones ricas, se les permitirá reducir con más lentitud
sus derechos sobre las importaciones.
Según el plan, los subsidios a la exportación
deberán ser eliminados para algunos productos en cierto tiempo,
mientras que otros simplemente se reducirán. El uso de créditos
a la exportación también deberá caer en una tasa similar.
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