Se incluyen las actividades pesqueras y silvícolas

El PIB agropecuario creció 4.9% en el segundo trimestre: Fernández Ortiz

MATILDE PEREZ U.

A pesar de que en el campo faltan inversiones y financiamiento, y aumentan la pobreza y migración, el coordinador del Programa de Apoyos Directos al Campo (Procampo), Juan Antonio Fernández Ortiz, aseguró que el producto interno bruto (PIB) agropecuario -incluyendo las actividades pesqueras y silvícolas- tuvo un crecimiento de 4.9 por ciento en el segundo trimestre del año. El aumento se debió al registro de las cosechas otoño-invierno, explicó.

En conferencia de prensa en la que habló del PIB, Fernández Ortiz dijo que el sector agropecuario fue el único que registró ese aumento sustancial, ya que en el de servicios fue de 1.3 por ciento y el industrial tuvo un decremento de 3 por ciento; así, el PIB nacional sólo creció 0.2 por ciento en dicho periodo.

Al respecto, el Consejo Agrario Permanente expuso que los beneficios de ese crecimiento del PIB agrícola se concentran en apenas 10 por ciento de los agricultores del país, mientras el resto sigue en la angustia de no tener crédito y apenas sobrevive, además de que hay un franco retroceso en los ingresos de los medianos y pequeños productores.

Precisó que el crecimiento del sector agropecuario se registra en un grupo reducido -como los exportadores de tomate, aguacate, ajonjolí, canola y sorgo-, "todavía hay productores con problemas de pobreza y de atraso tecnológico; en una vasta superficie del territorio hay productores de frutas tropicales. Sin embargo, no se les da un tratamiento para que tengan valor agregado y accedan con mayor facilidad al mercado internacional".

Otro de los atrasos es la falta de una estadística detallada de la superficie destinada a la siembra de cítricos, hortalizas y granos, número de productores y producción total. Por ello el grupo de técnicos de Procampo tiene a su cargo el levantamiento de 12 padrones por rama de producción, entre ellos los de café, copra, mango, pesquero, alterno de Procampo, aguacate, cítricos dulces, limón, cacao y caña.

"Ya no se trata de sólo sembrar y cosechar, sino de que los productores se integren a una cadena productiva para que sus cultivos tengan un mercado asegurado; la filosofía de venta a pie de parcela ya no funciona; ahora es de venta en anaquel", dijo, y aceptó que al mercado nacional está ingresando mandarina fresca de Chile, diferentes variedades de chile de países centroamericanos, además de piñas, manzanas y otros productos agropecuarios.