Para resolver la problemática del agro "no hay presupuesto que alcance"

Usabiaga: yerran quienes piensan que los campesinos no pueden ser empresarios

MIRIAM POSADA GARCIA

Están equivocados quienes critican y cuestionan que los campesinos puedan convertirse en empresarios, porque desconocen su capacidad y sus aspiraciones, aseguró el secretario de Agricultura, Javier Usabiaga, durante el encuentro de empresas exitosas del Fondo Nacional de Empresas en Solidaridad (Fonaes).

Enfatizó que "no debemos, no es correcto, tampoco posible, mantener a los productores en un eterno tutelaje, en una pobreza crónica y negarles su capacidad de aprender y enfrentar nuevos retos y objetivos".

Consideró que las comunidades rurales de México "se siguen quedando vacías" porque en el país no hay oportunidades para los jóvenes y porque no existe "un sentido de pertenencia de la propiedad rural".

Asimismo instó a los productores agropecuarios a denunciar a los funcionarios que les nieguen recursos bajo el pretexto de que "se acabaron" o que están dirigidos a los que más tienen. Eso es falso, dijo, porque 70 por ciento de los fondos están dedicados a los más necesitados, así que "el funcionario al que se le haya acabado el dinero que mejor se vaya de vacaciones, porque si no tienen qué administrar que no gasten en luz, teléfono y papel".

El titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación (Sagarpa) admitió ante pequeños productores agropecuarios que en la dependencia están conscientes de que "muchas veces ponemos los apoyos en la punta del palo ensebado debido a que la excesiva normatividad impide conseguirlos", por lo que se comprometió a hacer más eficientes los mecanismos de apoyo.

Durante su participación en el encuentro nacional de empresas sociales del Fonaes, en el panel El asociacionismo como estrategia de crecimiento, el funcionario señaló que con frecuencia se critica, se cuestiona y se ve con incredulidad que los campesinos puedan convertirse en empresarios.

"Quienes dudan que esto puede ser posible subestiman la capacidad y la fortaleza que subyace en la población rural, desconociendo además sus afanes de progreso." Sin embargo, añadió, la estrategia de asociacionismo, o de asociación u organización económica promovida por la actual administración ha resultado adecuada para el desarrollo de la sociedad rural mexicana.

Usabiaga reconoció que durante mucho tiempo la sociedad rural ha padecido una problemática estructural caracterizada por el escaso patrimonio, un difícil acceso a las oportunidades y a un mejor nivel de vida de sus habitantes, "se ha enfrentado a condiciones frágiles de producción, altos costos de gestión y transición, y a un mundo nuevo en el que la competencia y la competitividad son la divisa".

Destacó que el gobierno federal y la sociedad "tienen que ser realistas y honestos: no hay presupuesto público que alcance ni gestión gubernamental exitosa cuando se busca resolver la problemática rural con una visión individualista del productor y su parcela, o con la aplicación de políticas tradicionales de fomento con énfasis meramente agropecuario".

Puntualizó que el Ejecutivo busca eliminar la burocracia, la ineficiencia y la corrupción, que los productores reciban más por la venta de sus productos en la zona urbana y pasar de 25 a 38 por ciento del precio final, y al mismo tiempo impulsar los agronegocios, introducir mejoras tecnológicas, mejorar las condiciones de compraventa, el acceso a mercado y agregar valor a la producción primaria.

Aseguró que en esta administración se pasó de una política de simple gasto a una de inversión, "que buena falta hacía", por lo que ahora es posible llevar el proceso de un agronegocio desde su planeación, creación desarrollo y consolidación, "con lo que se confirma que los campesinos pueden y deben convertirse en empresarios".

Usabiaga destacó como factores fundamentales de la migración de mexicanos en busca de trabajo en el extranjero la falta de oportunidades en el país, pero también la carencia de ese sentimiento de pertenencia de la propiedad rural, por lo que instó a los empresarios sociales a fomentar esa actitud.

"Es indispensable fortalecer el sentimiento de pertenencia y propiedad de los agremiados para que se sepan y se sientan dueños en las buenas y en las malas. Por eso por eso se promueve que los apoyos a los productores se conviertan en certificados de aportación, para asegurar su propiedad en el proyecto y la sustentabilidad de la organización productiva."

Sin embargo, admitió que en las áreas rurales no ha sido posible inculcar ese sentido de pertenencia a la propiedad rural.