Celebran ONG la apertura y el diálogo del gobierno

En Cancún no se comprometerá el bienestar de México: Derbez

ROSA ELVIRA VARGAS

El diálogo y los encuentros que han tenido las organizaciones no gubernamentales con el gobierno mexicano, con miras a la cumbre de la Organización Mundial de Comercio (OMC) en Cancún, representan un paso importante para una eventual agenda común frente a los planteamientos de este organismo, coincidieron ayer representantes de más de 30 organismos que se reunieron nuevamente con el canciller Luis Ernesto Derbez.

Sin embargo, subrayaron que a pesar de esta apertura no renunciarán al uso de acciones, como la movilización, para hacer patente su inconformidad con las posturas que, sobre todo en materia agrícola, enarbolan los países más poderosos de la OMC, de manera fundamental Estados Unidos y la Unión Europea.

Por su parte, Luis Ernesto Derbez indicó que el gobierno mexicano no tiene una lista negra ni de ningún otro color para ubicar a personas o dirigentes de organismos sociales a los que se les vaya a impedir llegar a ese puerto turístico la próxima semana.

De igual modo adelantó la posición mexicana frente a las negociaciones: "No habría peor fracaso que ceder en resolutivos que comprometan el bienestar de los mexicanos. Eso sería peor a que no hubiera ningún acuerdo", aseguró.

Max Correa, del Congreso Agrario Permanente, destacó que si bien valoran que el gobierno de Vicente Fox tenga una postura frente a los países desarrollados en materia agrícola, y que su posición no irá subordinada a los intereses de aquellos, sino en búsqueda de un consenso de las naciones en desarrollo, no puede decirse que exista una total coincidencia con las organizaciones campesinas; "ojalá fuera así", explicó.

Se pueden acercar las posiciones, a eso se aspira, aunque las organizaciones tienen muy claro que cualquier planteamiento del gobierno de México en materia agropecuaria debe cubrir tres prerrequisitos: garantizar la soberanía alimentaria, ver por la protección del medio ambiente y la biodiversidad, y defender un nivel de vida digna de los campesinos del país.

Por otro lado, Mateo Lejarza, de la Unión Nacional de Trabajadores, indicó que su participación en Cancún tiene mucho que ver con el reclamo de que los temas laboral y de medio ambiente se encuentran excluidos de los tratados comerciales. Igual que sus compañeros aplaudió que el gobierno mexicano intente, a partir de Cancún, el diálogo con la sociedad civil y que ésta contribuya a la construcción de una democracia participativa.

Se refirió en específico a lo que han denominado el "posCancún", esto es, mantener este nivel de intercambio y de acuerdos después de que concluya la cumbre de la OMC.

En esto coincidió también el canciller Derbez, quien apuntó que el gobierno de Vicente Fox desea recoger los planteamientos que en todos los ámbitos -desde medio ambiente hasta la agenda de género- plantean las ONG que se han registrado para acudir a Cancún.

Sin embargo, acotó que en este mecanismo permanente con la sociedad civil la Secretaría de Relaciones Exteriores sería sólo un instrumento para que las organizaciones puedan canalizar sus agendas en las secretarías e instancias correspondientes. "Sí se desea un posCancún", admitió.