Presenta la PGJDF a ocho integrantes de la banda; habría otros 20 miembros

Imputan a El Tanque extorsión y secuestro

Vendían protección a comerciantes formales e informales desde 500 a 10 mil pesos

MIRNA SERVIN VEGA

Con la detención de Jorge Ortiz Reyes, alias El Tanque, presunto sicario de Tepito, y su cómplice Alejandro Sánchez Zamudio, alias El Papis, quedó al descubierto una banda de extorsionadores acusados de robo con violencia, homicidio calificado y secuestro, que cobraba por "protección" en el barrio bravo.

El pago mínimo que tanto comerciantes formales como informales eran obligados a dar iba desde 500 pesos a la semana hasta 10 mil, dependiendo del giro y dimensión del negocio. De negarse a pagar la cuota fijada por la banda, que se presentaba a cobrar con armas en la cintura, los comerciantes eran objeto de agresiones, robo, secuestro e inclusive homicidio.

La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) presentó ayer a la banda de nueve integrantes, encabezada por El Tanque y El Papis, quienes operaban divididos en la zona poniente y oriente de Tepito.

Sus cómplices son Víctor Manuel Méndez Linares, El Topo; Ariel Cabrera Aguilar, El Boga; José Gabriel Ortiz Torres, El Pepino; Rodrigo López Medina, El Silverio; Jorge Esquivel, El Said; Marco Antonio Aguilar, El Chirris, y Elizabeth Linares Suárez, La Carola. Además de quienes ahora serán trasladados al Reclusorio Norte, se sabe que la banda está integrada con por lo menos 20 personas más.

Las acusaciones contra esta organización delictiva incluyen tres homicidios denunciados, pero se espera que se interpongan recursos de otros casos más en el transcurso de las investigaciones.

Uno de los homicidios fue cometido el 17 de febrero de 2002 en la calle Jesús Carranza por El Topo, El Papis y El Said. Otro fue contra el hermano de un comerciante que se negó a pagar "la protección", por lo que fue secuestrado y le exigieron rescate de 5 millones de pesos. La víctima fue mutilada y asesinada.

Con esta información y los dictámenes de estudios de foniatría para identificar la voz de las llamadas que hacía la banda para cobrar el rescate, se podrá establecer la participación de estas personas en el doble homicidio y secuestro de comerciantes del barrio.

Con la detención de la banda, la procuraduría prevé que la incidencia delictiva baje en las zonas de Tepito, la colonia Morelos y el Centro, perímetro donde actuaba la banda.

Además, autoridades de la PGJDF reconocieron que se investiga a funcionarios de la dependencia por la presunta protección o participación en los hechos ilícitos cometidos por la banda.