Falta de consulta a cada gobernador, entre las causas del desacuerdo en Monterrey

Retrasan firma de la convocatoria a la convención nacional hacendaria

ENRIQUE MENDEZ Y DAVID CARRIZALES ENVIADO Y CORRESPONSAL

Monterrey, NL, 28 de septiembre. Un desacuerdo político por el contenido de la convocatoria -cuyo proyecto fue modificado en la Secretaría de Gobernación- y el jaloneo por definir los mecanismos de competencia en el manejo fiscal de los gobiernos federal y estatal, fueron las principales causas para retrasar la firma y emisión de la convocatoria a la convención nacional hacendaria. Aunque con distintos matices, la visión general de hoy fue que, efectivamente, "no hubo consensos".

La falta de acuerdos derivó precisamente de que no se consultó a todos los gobernadores la última versión del documento, error que el secretario técnico de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), Rolando García Martínez, redujo a "un problema de cortesía, de que conozcan bien el documento. Los tiempos son los que nos ganaron y había que tener claro que todos lo conocieran bien". En comunicado conjunto, los gobiernos de Coahuila, Nuevo León y Chihuahua informaron el sábado que se posponía la firma de la convocatoria, con el fin de "dedicar tiempo adicional a la discusión" del contenido.

Una de las causas que detuvieron el acuerdo fue que -comentaron fuentes de la Conago- la semana pasada la comisión redactora envió el texto a Gobernación, donde el gobierno federal hizo unos ajustes, y lo devolvió. El viernes 26 la versión "final" se distribuyó entre los gobernadores, lo que molestó a algunos, pues no les consultaron los cambios.

La redacción tampoco se consultó con los diputados ni los senadores, lo que se consideró como un error político y de procedimiento, pues finalmente en el Congreso de la Unión se discutirá la iniciativa que conjuntamente le envíen el gobierno federal y los de los estados, como resultado de la convención.

La Presidencia de la República emitió un comunicado en el que señala que los gobernadores de Coahuila y Nuevo León, Enrique Martínez y Martínez (presidente en turno de la Conago) y Fernando Elizondo Barragán, respectivamente, dieron a conocer el sábado pasado que "cuando exista consenso de todos los participantes que hayan aceptado suscribir la convocatoria para la convención nacional hacendaria", el documento final será presentado al Presidente de la República, razón por la que se reprogramó la reunión con Vicente Fox, en tanto continúa el diálogo de ejecutivos locales.

En este contexto, Fox reiteró "su interés y disposición" para celebrar los encuentros y reuniones que sean necesarios, para avanzar en los acuerdos políticos que el país necesita y alcanzar las reformas estratégicas planteadas en su tercer Informe de gobierno.

En entrevista, García Martínez dijo que durante la reunión del lunes -que no se suspendió, a pesar de que se difirió la firma de la convocatoria y de que, por tanto, no vendrá el Presidente- se hará una "presentación" del documento "a los demás convocantes" de la convención: senadores, diputados, diputados locales y alcaldes y explicó que, aun cuando se le había considerado en principio como "firmante solidaria", la participación de la Suprema Corte de Justicia de la Nación aún está en duda, pues consideran que sería "juez y parte".

Las fuentes consultadas señalaron que parte del diferendo se centró en que la federación pretendía imponer sólo su posición. Por tanto, en el encuentro del lunes se buscará reparar el error, pero ello implicará otra etapa de discusiones para decidir si es posible que la convocatoria se emita en la reunión de octubre, a celebrarse en Durango.

Otro punto de desacuerdo fue qué funcionarios del gabinetazo foxista se integrarían al órgano técnico de trabajo, pues desde la reunión de Cuatro Ciénegas, Coahuila, un ala de gobernadores rechazó la propuesta para que se sumaran el titular de la Oficina de Políticas Públicas de la Presidencia, Eduardo Sojo, y la secretaria de Desarrollo Social, Josefina Vázquez Mota.

Trascendió que otro de los principales desacuerdos estriba en la competencia del gobierno federal y los estatales en la recaudación fiscal, punto en que la federación se niega aún a ceder facultades.

Mientras, el gobernador interino de Nuevo León, Fernando Elizondo -quien dejará el cargo el 3 de octubre y se maneja como el próximo "enlace" entre la federación y la Conago- buscó minimizar los desencuentros, y argumentó: "En todos los propósitos nacionales encontramos obstáculos y en todos la unión es una clave importante para superarlos.

"La convocatoria se retrasó porque hubo interés en participar en el contenido de la convocatoria por muchas otras instancias. Hasta ahora, la convocatoria había sido elaborada y discutida básicamente entre gobernadores, y con algo de participación de los secretarios de Finanzas. Pero como la intención es que la suscriban diputados, senadores, los alcaldes y las legislaturas estatales, es difícil pedirles que lleguen a una mesa, se sienten, vean un documento y lo firmen."

Reconoció que "hay desacuerdos" y que persisten puntos, como la estructura y la conducción de la convención hacendaria, sobre las que falta consenso.

"La idea es que la convención se haga de tal manera que ningún partido, nivel de gobierno, persona o grupo tenga el control del resultado. La firma no se aplazó por motivos políticos, sino para trabajar. La idea inicial era firmarla aquí, pero eso suponía que hubiéramos terminado el consenso hace dos semanas, para hacérselas llegar a los demás gobernadores que no tenían parte en el proceso", indicó.