México D.F. Miércoles 29 de octubre de 2003
Promueve en México su disco Alma 2003;
mañana estará en el Auditorio Nacional
Nunca he obligado a nadie a que me quiera ni a que
le guste mi música ni mi persona, afirma Camilo Sesto
ARTURO CRUZ BARCENAS
El
cantautor español Camilo Sesto está de vuelta en México
para ofrecer una serie de conciertos, lo cual no hace desde 1991; el lapso
estuvo marcado por asuntos familiares y de salud (le trasplantaron un hígado).
Ya se presentó en países como Chile, Ecuador y Colombia,
donde la armó como en sus buenos días, allá
por los años 70 y 80 del siglo pasado, cuando millones de parejas
hicieron suya la pregunta flamígera (de acuerdo con la moral de
esos ayeres) : "¿Quieres ser mi amante?"
Vendedor de más de 50 millones de discos en el
mundo, Camilo era sexy para ellas (aún lo es, según pudo
constatarse por reporteras fans que le lanzaban besos desde sus
asientos, en la rueda de prensa del ibérico, ayer) y deambulaba
con fama de enamorado, algo así como el mil amores de ese lado del
océano. Más de una mexicana fue de él, sentimentalmente.
Sus experiencias las plasma en frases novedosas hace más
de 30 años, como en la canción Fresa salvaje, uno
de sus mayores éxitos, en la que, según explicó, se
refiere a una dama que era fuego puro. A la charla llegó echando
tiros y posó para los disparos de los fotógrafos con sus
típicos ademanes, los brazos abiertos, como en sus días de
estrella del programa Siempre en domingo y en sus conciertos en
el Teatro de la Ciudad.
Promueve su disco Alma 2003, que da título
a la gira y se suma a sus más de 600 canciones. De sus conciertos,
expuso que ahora "mi alma explota de felicidad en cada una de mis presentaciones.
El Auditorio Nacional -donde estará mañana- es la catedral
del espectáculo del mundo, no sólo de Latinoamérica,
e interpretaré todo lo que soy. Voy a complacer al público,
para que salga tocando el cielo".
Con humor y buena voluntad
A las preguntas respondió con humor y buena voluntad.
Tal fue el caso de: "¿Por qué tardaste tanto en regresar
a los escenarios de México?" "Porque estaba esperando un hígado."
"¿Tu orientación sexual?" "Eso es asunto sólo mío.
Sobre mi sexualidad no voy a decir nada, porque voy a cantar con el alma."
"¿Qué música escuchas?" "Hasta Cristian (Castro)."
"¿Sobre su imagen?" Se levantó de su asiento, se quitó
parcialmente el suéter y levantó los brazos. Recibió
aplausos. "Admiro a muchos artistas, pero tú eres mi favorito..."
Chiflidos y "eso es todo".
Dijo: "No he obligado nunca a nadie a que me quiera, a
que me escuche ni a que le guste mi música o mi persona".
Camilo ofrecerá conciertos el 31 de octubre en
el hotel Fiesta Americana de León; el 3 de noviembre en el teatro
Galerías de Guadalajara; el 6 en el hotel María Dolores de
San Luis Potosí; el 7 en el hotel Andrea de Aguascalientes, y el
8 en el auditorio Josefa Ortiz de Domínguez de Querétaro.
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