"Ese esquema debe ser modificado en su concepción original", afirma Venezuela

ALCA, de los principales obstáculos para lograr consensos en la declaración final

Aborta propuesta de conformar mecanismo de exclusión a naciones corruptas, trasciende

ROSA ELVIRA VARGAS, BLANCHE PETRICH Y ROBERTO GONZALEZ AMADOR ENVIADOS

Monterrey, NL, 11 de enero. Los jefes de Estado que participarán a partir de mañana en la Cumbre Extraordinaria de las Américas tendrán que negociar directamente, o a través de sus cancilleres, para salvar las diferencias que subsisten e impiden llegar a un consenso sobre la llamada Declaración de Nuevo León.

En la víspera, cuatro fueron los temas que impidieron dar conclusión al documento por la fuerte oposición que presentaron sobre todo Brasil, Argentina y Venezuela en propuestas a temas como el Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA), la iniciativa para establecer un nuevo mecanismo de exclusión a naciones corruptas, los plazos para concretar el compromiso de disminuir los costos por el envío de remesas y la formación de un fondo humanitario internacional a partir de recursos provenientes de incautaciones hechas, por ejemplo, al narcotráfico.

Al final, en el caso de corrupción se dijo que el acuerdo fue sacar en definitiva el punto de crear un nuevo mecanismo de exclusión en la Organización de Estados Americanos (OEA), como proponía Estados Unidos. A cambio se ratificó el compromiso de impulsar la lucha contra ese fenómeno, no sólo por lo que se refiere al sector público, sino también al privado, y Venezuela fue enfático al señalar el daño que han hecho a muchos países en desarrollo las prácticas corruptas de grandes empresas multinacionales.

El secretario general de la OEA, César Gaviria, explicó por la tarde que "la cláusula sobre corrupción es parte de uno de los borradores de la declaración; todavía no tiene un consenso".

El canciller mexicano, Luis Ernesto Derbez, aseguró al mediodía de hoy que la declaración estará a tiempo, y consideró "absolutamente normal" la demora en las negociaciones sobre el documento.

"Es normal... hubieran visto cómo fue el de Seguridad (Hemisférica), fue mucho más complicado." Momentos antes el funcionario había ubicado sólo en dos los temas que atoraban la negociación.

En la vocería de Relaciones Exteriores se aseguró, sin embargo, que Derbez Bautista bromeaba cuando hizo este último aserto, porque en realidad para todo mundo está claro que son cuatro los puntos de conflicto.

Para Miguel Ruiz Cabañas, embajador de México ante la OEA, instancia que impulsa y promueve formalmente esta cumbre, en rigor son apenas tres los puntos aún insalvables. "El de las remesas no lo considero corchete, porque lo único que está por definirse es una fecha, ponerle un numerito... (pero) todo está consensuado".

Las expectativas de cuándo finalmente podrá difundirse la Declaración de Nuevo León, ya con la aprobación general, no son las mismas aun en el propio equipo mexicano. Ruiz Cabañas aseguró que el documento final "se irá afinando en el transcurso de estos días y no se va a difundir hasta el martes", mientras que Miguel Hakim Simon, subsecretario para América Latina, señaló a su vez que por la noche del domingo se verán los últimos detalles y el lunes se dará a conocer ya completo.

Para este funcionario, lo que está pendiente de la declaración tiene que ver sobre todo con detalles de fecha, de lenguaje y de elaboración en cuatro idiomas (español, inglés, francés y portugués), aunque también reconoció que en la negociación del mismo las diferencias de opinión se refieren a temas "muy complejos".

Por la noche trascendió que negociadores de la declaración final aseguraron que Estados Unidos y Brasil están a punto de alcanzar un acuerdo sobre un texto que, si bien contendría una mención al ALCA, enfatizaría los objetivos sociales del proceso de integración comercial. Esta salida representaría lo que aquí consideraron una solución de "medio camino" entre lo que eran las posiciones originales de ambos países.

Con todo, el texto puntual sí incluye un abanico de temas que lo mismo hace extensa referencia a la lucha antiterrorista que al sida y el crecimiento socioeconómico con equidad, entre otros.

Jorge Valero, embajador de Venezuela ante la OEA, indicó que en el caso del ALCA las objeciones de países como el suyo y Brasil es que ese esquema de integración hemisférica debe ser modificado en su concepción original porque de lo contrario, "lejos de favorecer los procesos integracionistas, llevará a una mayor fragmentación de las sociedades y las economías latinoamericanas".

Para el caso de la cláusula de exclusión opinó que si bien es necesario y posible expulsar, extraditar a los corruptos y sus corruptores y lograr la devolución de lo sustraído, la diferencia con la propuesta formulada por Estados Unidos -que plantea que mediante consultas entre países dicha condición pueda imponerse-, la pregunta de Venezuela es: "Ƒquién determinará quién es corrupto? Es una cláusula riesgosa y que puede usarse de manera inadecuada, pues ya existen mecanismos para darle una jurisdicción especial a la lucha contra ese fenómeno".