Descarta Elizondo despidos en la dependencia; no hay dinero ''para liquidaciones''

Sectur reacomodará programas y recursos ante la baja del presupuesto

MIRIAM POSADA GARCIA

La reducción de presupuesto a la Secretaría de Turismo obligará a un reacomodo de programas y recursos provenientes del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) y del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), a fin de no afectar los apoyos a estados, aseguró el secretario del ramo, Rodolfo Elizondo. El funcionario descartó despidos en la dependencia ''porque tampoco tenemos recursos para liquidar al personal''.

Señaló que ni la situación presupuestal ni los operativos de seguridad en aeropuertos nacionales obligará a la dependencia a modificar sus metas de crecimiento para 2004, basadas en una captación de divisas de 10 mil millones de dólares y la recepción de casi 20 millones de visitantes internacionales.

Junto con el subsecretario de Innovación y Calidad, Humberto Sarmiento, el secretario de Turismo señaló que la reducción al presupuesto de la dependencia es sensible, toda vez que pasó de mil 458 millones de pesos asignados para 2003 a mil 230 millones para el ejercicio 2004.

Esto, dijo Elizondo, podría afectar los programas de apoyo a estados y municipios así como los donativos que se hacen a las entidades a través de Sectur. ''Se trata de aproximadamente 120 o 130 millones de pesos, que en teoría son pocos, pero que ya en la práctica dan un resultado expansivo de hasta 600 millones, como ocurrió el año pasado''.

Los funcionarios señalaron que para hacer frente a esta situación la secretaría se apoyará en los dos órganos que sí pueden hacerse de recursos adicionales como son el CPTM y el Fonatur.

Detallaron que el presupuesto del Consejo de Promoción Turística se redujo en 100 millones de pesos para ubicarse en 294 millones, pero ese organismo contará con los ingresos por derecho de no inmigrante (DNI), que para este año se ubicaron en 600 millones de pesos, de tal forma que los recursos para promoción no se verán afectados.

En tanto, Fonatur tendrá un presupuesto total de 2 mil 765 millones de pesos, de los cuales sólo 220 millones corresponden a recursos fiscales; 400 millones son resultado de deuda que el fondo está contratando con Banobras; 520 millones son de amortización de la deuda; 500 millones corresponden a la aportación de su filial Baja Mantenimiento y Operación; 950 millones serán recursos por venta de terrenos, entre otros renglones.

Elizondo señaló que el problema con Fonatur radica en que si bien contará con un presupuesto relativamente amplio, también corre el riesgo de descapitalizarse si continúa contratando deuda y vendiendo terrenos sin adquirir nuevas propiedades.

Consideró además que reducir el gasto corriente de la dependencia tampoco es una opción, debido a que 80 por ciento del presupuesto corresponde a ese gasto corriente, de tal forma que para disminuirlo habría que liquidar al personal ''y tampoco tenemos recursos para pagar esas liquidaciones''.

Negro panorama para restauranteros

Por separado, el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), Rafael de Jesús Saavedra, aseguró que los resultados para este sector al cierre de 2003 fueron negativos, con una caída en las ventas de 4 por ciento respecto a 2002.

Precisó que ese retroceso equivale a 5 mil 440 millones de pesos que dejaron de percibir alrededor de 36 mil restauranteros afiliados a la Canirac. Atribuyó esta caída en las ventas del sector a la difícil situación económica, que lleva a los consumidores a recortar las comidas en restaurantes.

De igual forma, la incertidumbre política generada en los últimos meses del año repercutió en la actividad económica, en los inversionistas y en los propios consumidores, quienes se condujeron con mucha más cautela.

Saavedra señaló que para 2004 las cosas no pintan mejor para los restauranteros, debido a que han surgido elementos adversos como la contaminación de carne de res en Estados Unidos y el cierre de las fronteras mexicanas a ese producto, por lo que en unas semanas podría haber escasez en el sector y los precios de platillos con carne se podrían incrementar.

Aunado a ello está la posibilidad de que los afiliados a la Canirac se amparen contra la ley de protección a no fumadores que se pondrá en marcha en la ciudad de México, debido a que perjudicaría sus ingresos, porque obligaría a los restauranteros a denunciar ante las autoridades a los comensales que fumen en áreas no autorizadas