Arizmendi Esquivel rechazó que católicos provoquen divisiones en la región

Zapatistas de Zinacantán, dispuestos a concluir choques con perredistas

Los enfrentamientos obedecen a la mezcla de lo político y lo partidista, dice el obispo

ELIO HENRIQUEZ CORRESPONSAL

San Cristobal de Las Casas, Chis., 23 de febrero. Los indígenas bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) del municipio de Zinacantán están dispuestos a colaborar económicamente con el ayuntamiento y a aceptar cargos comunitarios, afirmó el obispo Felipe Arizmendi Esquivel, quien negó que el prediácono Mariano Gómez Pérez provoque división, como aseguró el alcalde perredista Martín Sánchez Hernández.

Añadió que los perredistas y zapatistas de algunas comunidades de Zinacantán, como en otros municipios chiapanecos, "se han enfrentado porque a veces se mezcla lo político y lo partidista, o la rivalidad por distintos cargos comunitarios".

Desde diciembre pasado, pobladores perredistas de las comunidades Jech'vó, Elambó Alto y Bajo, así como de San Isidro, suspendieron el servicio de agua a unas 100 familias zapatistas con el argumento de que no cooperaban económicamente ni aceptaban cargos que se otorgan por el sistema de usos y costumbres. En una carta dirigida al obispo, el edil Sánchez Hernández acusó al prediácono Gómez Pérez de encabezar a las bases del EZLN para provocar el conflicto.

En entrevista, Arizmendi Esquivel informó que después de recibir la misiva habló con el candidato a diácono Mariano Gómez y con algunos catequistas, quienes le dijeron ser zapatistas y desear "colaborar con las obras comunitarias, pero cuando la gente sabe que somos zapatistas ya no va a cobrarnos las cuotas porque piensa que nos vamos a negar a cooperar y eso es mentira, nosotros sí queremos cooperar, somos parte del pueblo".

Añadió que designó al coordinador de los catequistas en Zinacantán para que a su nombre explicara la situación a las autoridades municipales, porque "el candidato a diácono no es el que está promoviendo la división" en la comunidad.

"Espero que se sigan aclarando las cosas y que efectivamente los catequistas y los candidatos a diáconos no alteren el orden; ellos son libres de pertenecer a cualquier grupo, partido u organización, pero desde que estaban los obispos Samuel Ruiz y Raúl Vera se ordenó en el sínodo diocesano que los que tienen algún cargo en la Iglesia católica no pueden ser líderes de ninguna organización ni partido político, porque la misión de los servidores de la Iglesia es que convoquemos a la unidad, no que dispersemos más a las personas por cuestiones de política partidista", acotó.

Afirmó que ha pedido al candidato a diácono y a los demás catequistas que "sigamos todos obedeciendo las normas del sínodo diocesano que pone ciertas restricciones a la actividad política de los mismos servidores de la Iglesia". Al asegurar que las comunidades indígenas "siempre son muy responsables de ejercer los cargos comunitarios", el obispo comentó que en días pasados, en el municipio de Pantelhó, a un diácono lo nombraron presidente del comisariado ejidal, lo cual es "incompatible con sus servicios" religiosos, por lo que solicitó permiso para no ejercer durante un año el cargo para cumplir la obligación comunitaria.