Lesiones por violencia familiar, delito con más incidencia

Aumentó la criminalidad en Tláhuac por las unidades habitacionales: vecinos

SUSANA GONZALEZ G.

La inseguridad creció en Tláhuac con la llegada de las unidades habitacionales y las colonias irregulares y marginadas que se asentaron alrededor de los siete pueblos originales, principalmente los colindantes con Iztapalapa y el estado de México, perciben vecinos y autoridades.

La demarcación cuenta únicamente con dos coordinaciones territoriales de procuración de justicia y seguridad pública, pero la más conflictiva es Tláhuac-1, donde se concentran hasta 120 unidades habitacionales en la zona que va de la colonia Los Olivos, en la cabecera delegacional, hasta Santiago Zapotitlán, en los límites con Iztapalapa.

"Es ahí donde se registra la mayor incidencia delictiva", confirma Rigoberto Salgado Vázquez, director de Seguridad Pública de la demarcación y, contra lo que pudiera pensarse, revela que el delito que ocupa el primer lugar en Tláhuac no es el robo, sino las lesiones provocadas en hechos de violencia familiar o riñas entre vecinos, amigos y conocidos.

La mayoría de estos casos ocurren en pleno jolgorio, pues prácticamente cada dos o tres días, en promedio, hay una fiesta en alguna de las colonias o pueblos de Tláhuac: en total cada año hay 140 celebraciones.

"Quienes roban son gente de la misma delegación, pero no de los pueblos. Llegó tanta gente de quién sabe dónde con las unidades habitacionales, que ya no los conocemos, y muchos de los que asaltan viven ahí", refiere Mariana Zamora. Pese al crecimiento de la inseguridad, los habitantes de esa delegación no se han organizado para proteger su patrimonio y vigilar sus calles, como ha ocurrido con los pueblos de otras delegaciones rurales del DF (el caso más conocido es el de Tulyehualco). Eso no ha impedido que de vez en cuando la gente una esfuerzos para protegerse o ayudar al afectado: "un día un taxista atropelló a un muchacho que manejaba un bicitaxi en La Conchita. Se quiso escapar y se fue por la calle principal del pueblo, pero quién sabe cómo hicieron los vecinos que cuando llegó al final de la calle, ellos ya se habían comunicado entre sí y lo atraparon; a veces por eso los rateros no se meten a los pueblos y roban hasta en las mismas unidades donde viven", refiere Leticia Gutiérrez.

Sobre la incidencia delictiva, Salgado Vázquez indicó que el robo de vehículos ocupa el segundo lugar y en tercer sitio se encuentra el asalto a transeúnte; en cambio los homicidios y las violaciones están en los últimos lugares del listado de los 16 principales delitos registrados en la delegación. Sobre el secuestro, sencillamente afirma: "no tenemos incidencia delictiva, no aparece en los registros", pese a los casos que se conocen entre los vecinos de la demarcación.

El funcionario asegura también que, entre las 70 coordinaciones territoriales, las dos que existen en Tláhuac ocupaban los lugares 68 y 70 por su incidencia delictiva; sin embargo, en los meses recientes remontaron hasta los lugares 30 y 40. No obstante, en el Programa Integral de Seguridad Pública 2003-2006 de la delegación se reconoce que diversos problemas, como "la urbanización no planificada y el hacinamiento en hogares de bajos ingresos (entre otros), han provocado un grave incremento en los índices delictivos de los últimos tres años", lo cual coincide con las estadísticas de la procuraduría capitalina, que indican que el año pasado el número de delitos denunciados en Tláhuac se incrementó 20 por ciento y en los años previos el crecimiento fue de 8 y 9 por ciento, en contraste con el descenso general y constante registrado en el Distrito Federal.