México D.F. Martes 24 de febrero de 2004
Dice estar consciente de que le pagan para que
el Cruz Azul gane
Estoy seguro de que no me van a cesar, afirma el Ojitos
Meza
MARLENE SANTOS A.
El técnico del Cruz Azul, Enrique Meza, adelantó
que ante Jaguares hará cambios en la alineación e indicó
sobre sus jugadores: "Yo necesito que me respalden en el campo de juego,
no de palabra. De palabra yo también los aprecio mucho, pero no
me pagan por apreciarlos o por ayudarlos fuera del campo, me pagan por
hacer que el equipo juegue y gane".
Ayer,
tras la práctica realizada en las instalaciones de Acoxpa, los argentinos
Daniel Díaz y Luciano Figueroa expresaron su respaldo al timonel,
algo que no han podido demostrar en la cancha.
Luego de dos derrotas como local y cuando el equipo se
encuentra en el sitio 18, la presión se manifestó en forma
severa en el plantel azul, pero el Ojitos Meza aseguró no
albergar temores. "No me quiero ir de acá, tengo la certeza de contar
con un gran equipo. Pero mi cabeza está ahí, y tampoco me
va a pasar nada. Nadie se muere antes de tiempo."
Respecto a los rumores de que el argentino Américo
Gallego lo relevaría en el timón, anotó: "Es un gran
técnico, pero de acá no me voy a mover, tengo mucha confianza
en la directiva y tengo contrato hasta junio. No me asusta nada de lo que
pueda ocurrir, estoy poniendo todo mi entusiasmo".
-Sin embargo, usted llegó en medio de una rescisión...
-Sí ¡claro! pero yo soy Enrique Meza, seguro
estoy de que no me van a cesar, conozco perfectamente a los señores
Alvarez. Antes trabajé aquí 29 años.
Meza insistió en la falta de actitud y concentración
de sus pupilos, pero identificó como lo más grave el que
no hayan asimilado un estilo de juego.
"A los jugadores les hablo de la manera en que siempre
lo he hecho, llámese como se llame. Hace falta adoptar una idea,
una manera de jugar. No necesito que (los jugadores) me protejan y hablen
bien de mí; necesito que corran y hagan lo que les pido, que estén
dispuestos a jugar fácil y no busquen el lucimiento personal", añadió.
-¿Y qué hacer si les da las indicaciones
y no obedecen?
-Nadie entra con el deseo de hacer mal a su equipo. Todavía
no se concientizan de una manera más simple de jugar... Falta un
20 para el peso, es cuestión de tiempo, ¡y no me estoy curando
en salud! No soy afecto a eso.
Se refirió a los empujones que se dieron sus jugadores
en plena cancha, cuando el Conejo Pérez tuvo que apaciguarlos.
"No me espanto de que se alcen la voz; en todos los equipos hay roces,
conflictos, pequeños celos. Lo extraordinario es que hayan discutido
de esa manera. Es imposible tener a todos contentos. Pero esto no es de
afectos, sino de que todos adopten una manera de jugar", dijo.
Por último, reconoció que Jaguares será
un rival difícil, es ordenado y está bien dirigido, por lo
que los suyos deberán jugar como si fuera el último partido
de su vida. Precisó que habrá modificaciones en la alineación,
porque los técnicos siempre están en la búsqueda de
la oncena que garantice resultados.
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