Seguirá recluido en Topo Chico pero ahora le imputan secuestro en Tlalnepantla

Nazar: formal prisión y orden de captura

Todavía prófugo, el ex policía que detuvo a Jesús Piedra solicita un "amparo de fondo"

ALFREDO MENDEZ ORTIZ Y DAVID CARRIZALES REPORTERO Y CORRESPONSAL

La posibilidad de que Miguel Nazar Haro, ex titular de la disuelta Dirección Federal de Seguridad (DFS), recuperara ayer su libertad, se canceló luego de dos fallos de jueces federales: formal prisión y nueva orden de detención.

Mientras que el juez cuarto de distrito con sede en Monterrey, Nuevo León, Guillermo Vázquez Martínez, giró durante la madrugada de ayer auto de formal prisión contra quien fue coordinador de la llamada Brigada Blanca, por su probable responsabilidad en privación ilegal de la libertad en perjuicio de Jesús Piedra Ibarra, el juez séptimo de distrito con sede en Naucalpan, estado de México, Willy Earl Vega Ramírez, emitió una nueva orden de aprehensión por el mismo delito, sufrido por Arturo Ignacio Salas Obregón, uno de los fundadores de la Liga Comunista 23 de Septiembre.

En el segundo caso, el juez Vega Ramírez también ordenó la captura de Luis de la Barreda Moreno, otro ex titular de la DFS; Miguel Galindo Camacho, ex procurador mexiquense, y Joaquín Cázares, ex policía municipal de Tlalnepantla. Junto con Nazar, se les considera responsables de la desaparición de Salas Obregón, detenido el 25 de abril de 1974.

Fuentes del Poder Judicial informaron a La Jornada que el juzgado séptimo de distrito de Naucalpan envió ayer un exhorto al juzgado cuarto de distrito de Monterrey, mediante el cual se solicitó que le sea tomada a Nazar Haro su declaración preparatoria respecto a la nueva acusación que enfrenta en el estado de México. Anoche empezó a declarar.

En tanto, José Luis Nazar Daw, hijo y defensor del ex titular de la DFS que desde el jueves de la semana pasada se encuentra detenido en el penal de Topo Chico, en Monterrey, informó que presentará durante el término de 72 horas -que se vence el próximo lunes- los recursos legales a que tiene derecho su padre: impugnar la decisión del juez Vázquez Martínez ante un tribunal colegiado de Nuevo León o interponer un juicio de amparo indirecto contra la formal prisión.

No obstante, aclaró que lo más probable será que interponga una queja ante un órgano jurisdiccional de segunda instancia. Dijo confiar en que de ser así, el tribunal colegiado correspondiente "desvanecerá los cargos sobre tortura y privación ilegal de la libertad" que enfrenta su padre. Precisó que si Nazar Haro libra el proceso que se le sigue por dichos cargos, tendrá que ser trasladado a una prisión del estado de México, donde enfrenta la acusación de la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado por la desaparición de Salas Obregón.

Por otra parte, ayer trascendió que la defensa de Juventino Romero Cisneros, ex policía judicial de Nuevo León coacusado junto con Nazar y De la Barreda de la desaparición (en abril de 1975) de Piedra Ibarra, presentó una demanda de amparo en juzgados de Monterrey contra la orden de aprehensión que enfrenta desde el pasado 5 de diciembre. El quejoso no solicitó la suspensión del acto reclamado, sino un "amparo de fondo", debido a que el delito de privación ilegal de la libertad está considerado "grave" en el Código Penal Federal.

Durante la entrevista, afuera del penal de Topo Chico, Nazar Daw señaló que el juez Vázquez Martínez desestimó las pruebas de descargo que presentó en su momento para intentar comprobar la inocencia de su cliente.

Aclaró que uno de los argumentos del juzgador para decretar el auto de formal prisión contra Nazar Haro fue que no podía dejarlo en libertad porque es necesario que Romero Cisneros (prófugo al igual que De la Barreda) ratifique personalmente en el juzgado la declaración que hizo a un medio de comunicación, en la que afirmó que Nazar Haro nada tuvo que ver en la detención de Piedra y que fue inducido por personal de la fiscalía especial a culpar "a los de arriba". Nazar Daw entregó en días pasados al juzgado cuarto de distrito la transcripción del dicho.

Sobre la nueva acusación contra su padre, radicada en un juzgado de Naucalpan, el litigante aseguró que lo único que sabe de ese caso es que en 1974 Salas Obregón estaba estacionado en un coche cuando les pareció sospechoso a policías municipales de Tlalnepantla, que fueron recibidos a balazos y en la refriega varios uniformados y el líder guerrillero resultaron heridos.

Este fue llevado a un hospital y quedó a disposición del Ministerio Público, ignorándose qué pasó después.