"Aún no hay nada; puede apelar": Rosario Ibarra

Rosario Ibarra de Piedra, dirigente del Comité Eureka, manifestó que el auto de formal prisión que se dictó la madrugada de ayer a Miguel Nazar Haro, ex titular de la desaparecida Dirección Federal de Seguridad (DFS), nada significa, ya que aún no es algo "firme" y él tiene 72 horas para apelar o buscar un amparo.

Pero ahora, destacó Ibarra de Piedra, también pesa ya sobre Nazar Haro otra orden de aprehensión por la desaparición de Ignacio Salas Obregón, y el hijo del ex director de la policía política, José Luis Nazar Daw, "se preocupa y dice que mejor su papá permanezca en el penal de Topo Chico" para no enfrentar un nuevo proceso, pero ahora en la cárcel de La Palma.

"Hasta que no se sepa dónde están los desaparecidos, hasta que no vea que han sido procesados y se hace justicia contra todos y cada uno de los que hemos citado como inculpados con razón, ya que no los inventamos -el ex presidente Luis Echeverría, Mario Moya Palencia, los secretarios de la Defensa Nacional desde 1970, los titulares de la PGR, procuradores estatales, secretarios de Gobernación, entre muchos otros-, hasta que no suceda eso no podré manifestar algo de satisfacción", sostiene.

Antonio Hernández, ex integrante del Partido de los Pobres, destacó a su vez que la detención de Nazar Haro "es un paso importante, no puede considerarse como una cuestión de menor relevancia, porque en términos reales el ex titular de la DFS jugó aquí el mismo papel que en Chile tuvo el general Manuel Contreras, director de inteligencia nacional, de la Dina".

Hernández señaló: "Hay que esperar que el juez aquilate y le dé el valor y todo el peso a las pruebas que se han aportado por parte de la fiscalía especial, dado que en el Archivo General de la Nación se encuentra toda una serie de documentos que certifican que las personas hoy desaparecidas estaban en manos de la DFS; si no fuera así, ni siquiera habría referencias en los archivos oficiales".

VICTOR BALLINAS