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México D.F. Domingo 29 de febrero de 2004
A LA MITAD DEL FORO
León García Soler
Mandatos a la mitad, democracias a medias
NADIE IMAGINO QUE a la mitad del camino, los allegados del Macabeo abajeño lanzarían cargos de lesa majestad en la plenaria cetemista, nada menos, sancta sanctorum del corporativismo cortesano que iluminó la ruta de la dictadura perfecta hasta el derrumbe del priato tardío y la restauración del antiguo orden bajo el mismo signo tecnocrático que arde en el fuego fatuo de un Congreso plural que amaneció poder. Nada más institucional que la CTM y el movimiento obrero. Nadie más institucional que Leonardo Rodríguez Alcaine, cuyo suplente y relevo único es nada menos que Carlos Romero Deschamps. Ahí hablaron de mejoras en el salario real, tanto el presidente Vicente Fox como su patronal secretario, Carlos Abascal. Y ardió Troya.
QUE ES UN MERO DECIR. Le silbaron, lo abuchearon, le gritaron lindezas al "Señor Presidente" que enunciaba puntillosamente los muchos logros de su política económica: no hay empleos, pero la inflación ha bajado tanto que los salarios "reales" son cada vez más altos y el nivel de vida de los trabajadores mejora, mejora, mejora, a golpe de indicadores macroeconómicos y disciplina fiscal. Los cuadros cetemistas, poco duchos en el juego de abalorios que persiste desde que el FMI y el Banco Mundial callaron ante el pasmo de mexicanos más fondistas que el fondo, reformistas de mitos fantásticos, ángeles de la dependencia, equilibristas del crecimiento cero con la disciplina del nanodéficit: le chillaron al orador, le silbaron.
CARLOS ABASCAL HABIA pagado su cuota: Ƒpor qué insistió el presidente Fox en repetir la misma canción, en hablarles de la proeza del crecimiento que no se ve, no se siente, pero está en las cifras que elaboran sus colaboradores? Hubo, hay quienes culpan a sus pésimos operadores políticos, a los escribanos del verbomotor, a los presuntos analistas de clientela que "lo llevaron ante una asamblea hostil, a una encerrona partidista"; a la cueva del dinosaurio que ya no sabe si despierto o dormido, pero está ahí. Luis Felipe Bravo Mena, candidato a dejar el mando del PAN, partido en el que ya nadie hace caso de nada ni de nadie, se desgarró las vestiduras: šhan ofendido al señor Presidente! Le pusieron una trampa. šLe han faltado al respeto! Reverdeció la higuera de la sicofancia.
A MIGUEL ALEMAN LE DECIAN El Señor. Lisa y llana sumisión ante el tlatoani del primer relevo generacional. Bajo el mando de Fidel Velázquez, a quien rindió pleitesía el sinarca patronal en el acto de marras, los cetemistas acuñaron aquello de "el primer obrero de la patria". Y ahí la llevaron. Tuvieron que resistir la fuerza política de Adolfo López Mateos, su apoyo a Rafael Galván, por ejemplo, así como embates abiertos de Luis Echeverría Alvarez. Y ahí la llevaron. Nunca lograron el sindicato único. Ni siquiera los contratos de industria. Pero entre cismas y jaripeos, entre liderazgos auténticos y movimientos auspiciados desde las alturas, sindicatos blancos o negros en espera de la productividad opaca: ahí la llevaron. Del pacto reformista con Carlos Salinas al choque frontal con el doctor Zedillo y el recambio de brújula en el Poder Ejecutivo.
MALA HORA ÉSTA para retomar el señorpresidentismo genuflexo que ignora la fuerza de las instituciones y proclama la supremacía de la persona en la que pretenden encarne la dignidad republicana. Mala hora. El presidente Fox habló en la CTM y ha repetido el discurso en otros foros, porque cree en las cifras que le dan sus colaboradores; tiene fe en los augurios cuando han pasado tres años de su mandato y se han fugado las promesas de crecimiento y las ofertas de prosperidad hechas al calor de la campaña mediática. Y la convicción mesiánica de quien creyó los mitos del autoengaño ideológico y "sabía" que todo lo hecho en la empresa privada era superior a lo hecho en el gobierno; que al interior de éste todo es corrupción y la iniciativa privada es impoluta.
TRES AÑOS EN BUSCA del verdugo de Joseph Le Maistre. Las fiscalías especiales desperdigan leña verde. Las instituciones arden. Una semana de discursos rituales y, de pronto, el secretario de la Defensa, el general Vega García, fulmina a quienes cuestionan a la institución: la Brigada Blanca no es el Ejército. Hay que hacer política y dejar de abrir frentes sin ton ni son.
EN LA CTM, JUNTO al presidente Fox, estuvo Juan S. Millán, gobernador de Sinaloa y uno de los jóvenes turcos que incorporó Fidel Velázquez al diluirse el vigor de los Cinco lobitos. Millán aspira, todos aspiran a la candidatura para 2006. Pero sabe que estamos en 2004 y diez entidades estrenarán gobernador al concluir los procesos electorales. Sinaloa de Leyva entre ellas. La pluralidad exige equilibrio, además de respetar el valor de los tiempos políticos. Por eso, el que compartió escenario con su paisano Enrique Jackson y con Emilio Chuayffet, con el líder del SUTERM y con el del STPRM, procuró el juicio equilibrado de lo sucedido. No que fuera simple anécdota. O desahogo de cuadros que vean amenazado su papel en el juego de poderes. El reacomodo de fuerzas es global y el júbilo por el arribo de la democracia del mercado libre se ha tornado angustia por los poderes electos que apenas llegan a la mitad de sus mandatos.
PODER REAL HA SIDO el sindicalismo en la política mexicana. Manuel Camacho, académico entonces, diría que era apenas un grupo de influencia. Y la presencia del ferrocarrilero al frente del Congreso del Trabajo pareciera dar la razón a los de la productividad que los patrones invocan como los viejos sinarcas a Cristo Rey. Sin ese factor de poder real no se puede gobernar. En estos días de duelo por el baño de sangre en Haití, Colin Powell recomienda a Jean Bertrand Aristide "examinar cuidadosamente" si debe renunciar al cargo de presidente. La realidad se adelantó. George W. Bush enviará un puñado de marines: aquí pasó lo de siempre, pero en toda la América nuestra cunde el síndrome de las democracias que se quedan a la mitad del camino. Los analistas de nuestro vecino del norte hacen recuento.
EL PATÉTICO LANCE del argentino Fernando de la Rúa, los trabajadores bolivianos que echaron al señor Lozada, el amago constante de la violencia en Colombia y de ruptura en la Venezuela que gobierna Hugo Chávez bajo amenaza. Sociedad dividida y el imperio americano encubierto con el velo del referéndum. Y hay más. Pero los mexicanos que estrenamos sufragio efectivo y nos dimos la opción del pluralismo democrático, estamos atrapados por el proceso histórico: Vicente Fox fue elegido para gobernar durante seis años. Ni un día más, ni un día menos. Eso no ha cambiado. Fue factor de estabilidad para la transmisión pacífica del poder hasta el punto de encuentro de la derecha tecnocrática y neoliberal del priato tardío, con la derecha patronal, confesional y ultramontana que vendió su alma a los poderes mediático-espectaculares.
VICENTE FOX ACUDIO a la Rotonda de los Hombres Ilustres, hoy dicha de "las Personas Ilustres", para rendir homenaje a Manuel Gómez Morín. Vale. Y nadie se diga desilusionado. Servidor público fue el de Chihuahua, partícipe en la instauración del banco central. Bajo el mando y gobierno de Plutarco Elías Calles, estadista, creador de instituciones. Vale. Y nadie se diga desilusionado. En la obra de Lampedusa hay más que el retruécano aristocratizante de cambiar para que todo permanezca igual. Poder constituido y poderes instituidos hacen sedimento. Pensar que puede dar fruto el cambio en el vacío, es plantar olmos en la nada. Somos. La política que se hace en México no es la que se hace en Europa, en China, en Rusia, en Estados Unidos de América. Hay que respetar la institución presidencial, dicen Juan S. Millán y sus compañeros.
LA INSTITUCION. NO ERA una encerrona "para ofender al señor Presidente". Los tartufos lamentan que se politice lo político. La política económica y de empleos no cambió con Fox. Es la misma que aplicaba Zedillo: es la que Carlos Salinas convirtió en cruzada de modernización para "insertarnos" al primer mundo. Vueltas a la noria. Cuando Ernesto Zedillo asistía a un acto obrero, lo llevaban bajo palio, resguardado por pretorianos y cortesanos que se soñaban transgresores de la "sana distancia". Ni así pudieron evitar las silbatinas, los abucheos. Y al final, la abierta rebeldía de los trabajadores al servicio del Estado, a quienes encerraron en Los Pinos para que no hicieran demasiado ruido. Y lo hicieron.
VICENTE FOX ESTA a la mitad del camino: punto de no retorno, decían los pilotos de antaño. Punto de alto riesgo, dicen los consejeros de su amigo George W. Bush. El deber de la oposición es oponerse. No hace falta rendir homenaje a Pero Grullo, ni evocar al filósofo de Güemes. Pero en esta hora 11, aciertan los del priísmo que apuestan a que concluya su mandato el Macabeo abajeño. En las urnas y frente a un gobierno con poder y respetado, han de reivindicar los del priísmo el poder que entregaron al alimón los que despachan en los sótanos de la Casa Blanca y los de la cúpula mexicana que no se conforma con ser oligarquía y se sueña plutocracia.
POR LO PRONTO, Vicente Fox emprende una campaña para confrontar su realidad con la de Andrés Manuel López Obrador. El de Tabasco no quiere pelear. Pero el de Guanajuato lo va a seguir hasta que se eche. O hasta que le haga frente. No se avizora todavía el combate al PRI que sacó de Los Pinos. A Fox no lo incomoda ni la punzante certeza con la que Roberto Madrazo enfrenta los comicios por venir. Los del PAN visten hábito franciscano. Los jóvenes acólitos sostienen los cirios para velar a Luis Felipe Bravo Mena y pasar la estafeta a uno de su generación. Felipe Calderón conserva energía y hace política sucesoria tradicional. Después de todo, Santiago Creel no para de hablar: fluye la palabrería y está cegado el conducto político que era y debiera seguir siendo la Secretaría de Gobernación.
VIENEN DIAS DE INTENSO quehacer político. Manuel Angel Núñez ya está en campaña abierta, en pos de la candidatura de su partido, de la Presidencia de la República, dice el de Hidalgo. Fox va a los Chimalapas y pregona la solución de un conflicto por la posesión de la tierra, no únicamente entre campesinos, sino entre los estados de Chiapas y de Oaxaca. José Murat puso la mira en los cacicazgos del capital: hay que ver el asunto de frente y veremos la mano de los taladores del bosque, señor Presidente.
Y LA CONAGO VA. La Convención Nacional Hacendaria va. Y el estado de México va a celebrar esta semana sus 200 años de existencia; entidad de la Federación; estado libre y soberano al que han confluido inversiones de capital y migraciones de mexicanos que le dan la primacía en el número de ciudadanos inscritos en el registro electoral. No es que Arturo Montiel aspire. Todos aspiran. Pero lleva ventaja el del estado de México. Por lo pronto urge dejar atrás la mojonera de medio sexenio. Andele, señor Fox, de aquí p'al real. No vaya a ser la de malas.
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