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México D.F. Domingo 7 de marzo de 2004
Actualmente produce Rosario Tijeras,
cinta que comenzó a filmarse en Colombia
La cinematografía de calidad requiere inversión:
Ehrenberg
En Colombia hay incentivos fiscales para quienes hacen
películas, es un buen ejemplo para México, considera Asegura
que el filme tiene posibilidades de impactar a escala internacional
JUAN JOSE OLIVARES
Rosario Tijeras, cinta que comenzó a filmarse
en Colombia y que está basada en la novela del escritor antiqueño
Jorge Franco sobre la época del sicariato en Medellín, en
la llamada guerra sucia del país sudamericano, es, a decir
de su productor, el mexicano Matthias Ehrenberg (quien produce junto con
Gustavo Angel), otro proyecto latinoamericano con "posibilidades serias
de hacer impacto a escala internacional", ya que ahora los cineastas de
estas latitudes "contamos historias reales, fuertes, interesantes, con
factura excelente y con grandes equipos de directores y actores".
El
largometraje, primero de un nuevo plan de producción en Colombia
de incentivos fiscales -que bien podría servir de ejemplo para México-,
tendrá un costo de 2.5 millones de dólares, "la mitad de
lo que hubiera costado si se filmara en nuestro país", afirma el
productor.
Rosario Tijeras tiene como objetivo "crear un cine
que genere expectativa y compita en este mundo. No hacer un cine localista
sino una expectativa internacional", afirmó Ehrenberg (Sexo,
pudor y lágrimas, Vivir mata, La habitación azul) acerca
de esta coproducción México-Colombia, dirigida por Emilio
Maillé, que se rodará en 10 semanas.
"Hemos decidido filmar en locaciones de Medellín,
como podrían haber sido de Tijuana. No hay ninguna diferencia, aunque
tiene el ingrediente de que la historia de Jorge Franco es en Medellín,
por eso decidimos venirnos para acá. Es para Colombia, donde aún
la infraestructura es precaria, pero ahora las autoridades están
dando todo el apoyo para las filmaciones", aseveró vía telefónica
Ehrenberg, quien agregó: ''Hay pocas cintas, pero, a partir de enero,
Colombia entró al selecto club de países que cuentan con
un esquema de incentivos fiscales para producción cinematográfica,
y eso es lo interesante. Las autoridades colombianas entienden que el cine
es importante. Lo que hace la ley es incentivar la participación
de la iniciativa privada. No obstante, será difícil, porque
Colombia, al igual que México, tiene un presupuesto restringido.
Pero el hecho de filmarla en Colombia demuestra que no todo es irse a Estados
Unidos, y que hay que fortalecer el cine latinoamericano."
La película -protagonizada por los colombianos
Flora Martínez y Manolo Cardona; el vasco Unax Ugalde y el mexicano
Rodrigo Oviedo- plasma la realidad de la violencia, "refleja una situación
geoeconómica, geosocial que se vivió en Colombia hace unos
10 años, donde se apreciaba desde el lujo más tremendo hasta
la pobreza más extrema. No es otra película de narcos,
no es una apología, sucede donde había una guerra entre narcos,
esa fue la época de Pablo Escobar, pero no es sobre eso. Es una
cinta que generará expectativa, si la rodamos como la queremos hacer;
tendrá un formato importante, porque es muy ambiciosa", abunda Ehrenberg.
Para el productor, la cinematografía de un país
no se tiene que restringir a su localidad.
"No por hacer una película en Los Angeles, Hungría
o en cualquier parte, deja de ser nuestra cinematografía. La historia
es fuerte y triste. El elenco está brillante. Es un rodaje grande
para una cinta latinoamericana. Se trata de mostrar el nivel que tenemos."
Emilio Maillé, el realizador, es un documentalista
que ha hecho trabajos como Un Buñuel mexicano, y otros sobre
las máximas figuras del toreo, como Curro Romero y Manolete,
entre otros. A decir de éste, "Rosario Tijeras hace una narración
muy libre del libro y se hace en un tono diferente, pues al no conocer
Medellín logramos sacar con mayor frescura la esencia de las cosas.
Esta mirada de la ciudad va a sorprender".
La adaptación de la obra corrió a cargo
de Marcelo Figueras, la dirección de fotografía está
a cargo de Pascal Martí (Le fate ignoranti), la música
es de Alberto Iglesias (Hable con ella), la dirección de
arte de Salvador Parra (Antes que anochezca) y la edición
será de Iván Aledo (Los amantes del círculo polar).
El elenco es de 50 actores, un equipo técnico de
cerca de 100 personas, 3 mil extras y una alta factura, pues según
Ehrenberg "el cine de calidad requiere inversión".
Uno de los protagonistas, Unax Ugalde, asegura que no
fue la violencia del mundo del sicariato lo que le atrajo de la película.
"Lo que me sedujo de Rosario fue el amor incondicional, eterno e
intangible que viven su personaje y el mío. Así como Rodrigo
Oviedo representa la violencia a través de Johnefe, yo represento
el amor a través de Antonio".
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