BAJO LA LUPA

Alfredo Jalife-Rahme

ƑSe le cayó el sistema internacional a Bush?

Se repite la "estrategia de tensión"

SE EMPIEZA A permear la inevitabilidad de otra "guerra de 100 años". Un día después del hito histórico del 14 de marzo, que desprendió a España del pernicioso bushismo y la regresó a su carril natural de la familia europea, Gabriel Kolko (GK) analiza lúcidamente "las elecciones de Estados Unidos, el futuro de las alianzas y las lecciones de España" (Sydney Morning Herald 15/3/04).

A GK SE le considera un importante historiador de la guerra moderna y es autor del relevante libro Un siglo de guerras: política, conflictos y sociedad desde 1914, y en el año 2002 publicó ƑOtro siglo de guerras? Para GK, "estamos experimentando cambios fundamentales en el sistema internacional, cuyas implicaciones y consecuencias podrían en última instancia tener el mismo alcance que la disolución del bloque soviético". ƑAsistimos a la disolución del bloque occidental (whatever that means), que se fracturó con la invasión anglosajona a Irak, en la que colaboró perversamente José María Aznar, pese al repudio de 90 por ciento de la opinión pública de su país y que puso en peligro de extinción a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y al G-7 (extensivo al G-8)?

UN AÑO DESPUES de la espuria invasión a Irak, la doctrina Bush -que intentó sepultar el sistema internacional vigente para imponer el tóxico y racista unilateralismo neoimperial de la petrocracia texana y su permanente guerra preventiva por medio del "choque de las civilizaciones" huntingtoniano- se encuentra hecha añicos y sus reverberaciones flamígeras han alcanzado a Europa después de haber descuartizado a la antigua Mesopotamia. ƑFue el hito del 14 de marzo el equivalente a la caída del muro de Berlín? Quizá más. Eso es lo que afirma en forma persuasiva GK: "la fortaleza estadunidense, hasta cierto punto crucial, se basaba en su habilidad para convencer a otras naciones de que sus intereses equivalían a que Estados Unidos prevaleciera en su papel global. Pero su visión y las últimas consecuencias de su misión mundial, incluyendo su extraordinariamente vaga doctrina de guerras preventivas, son en la actualidad más peligrosas e inciertas que cuando existía el comunismo".

HOY LOS NUEVOS enemigos de Estados Unidos son varios de sus ex aliados, quienes no siguen a ciegas sus exigencias abstrusas. Los costos de seguir a Bush suelen ser muy caros, como le sucedió a Aznar y al Partido Popular, comenta GK, quien destaca que "no es del interés nacional de los aliados tradicionales estadunidenses perpetuar las relaciones creadas de 1945 a 1990. La administración Bush, mediante su ineptitud y vaga ideología del poder estadunidense, que desconoce los límites por sus ambiciones globales y prefiere iniciativas unilaterales que desprecian las consultas con sus aliados, han erosionado seriamente el sistema de alianzas en el que la política estadunidense se basó desde 1947". El mundo se ha vuelto más inseguro con la proliferación de todo tipo de armas de destrucción masiva y con la probable relección de Bush, cuya política exterior no variará mucho. A juicio de GK, "el orden internacional será muy diferente en 2008". Tampoco hay que echar las campanas al vuelo con el arribo de Kerry al poder, porque la política exterior estadunidense ha sido "bipartidista" y "esencialmente consensuada desde 1947. Ser crítico de Bush no justifica pensar lo mejor de Kerry", y si los demócratas ganan intentarán reconstruir, en nombre del internacionalismo, el sistema de alianzas que existía antes de la guerra en Yugoslavia en 1999, cuando aún la administración Clinton hizo de lado los poderes de veto intrínsecos a la OTAN".

CON KERRY EN el gobierno, aduce GK, "el poder estadunidense para actuar en la escena mundial será todavía mayor, porque los críticos de los vigentes órdenes doméstico y exterior no llegarán al poder este noviembre". La fractura iraquí "orilló a Francia y Alemania a ser más independientes mucho antes de lo que pensaban, y el futuro papel de la OTAN es puesto en tela de juicio de forma tal que era inconcebible hace dos años". ƑLa Unión Europea tendrá su propia fuerza militar, independiente de la OTAN y del control de Estados Unidos? Todo parece indicar que esa es la tendencia: "Francia y Alemania se oponen vigorosamente a la doctrina bushiana de la guerra preventiva", y GK vaticina que el primer ministro británico, Tony Blair, a riesgo de ser defenestrado por el electorado, no tendrá más remedio que "regresar a Gran Bretaña el proyecto europeo". Las lecciones de la votación española demuestran que "los políticos que anteceden las demandas imperativas de Estados Unidos por encima de sus intereses nacionales tienen poco futuro". En dimensión micrométrica, Ƒlo alcanzará a percibir Fox, quien prosigue impúdicamente la texanización de la política exterior mexicana, convertida en política del rancho Crawford?

MAS AUN: "LA administración Bush ha transformado de manera muy peligrosa lo que era en la década de los 90 una floreciente relación cordial con la ex URSS en una cada vez más tensa relación". Estados Unidos rompió su promesa de 1997 y cuenta extender la OTAN a las fronteras de Rusia y ha empezado a establecer bases militares en el Cáucaso y Asia central: "ha orillado a que Rusia modernice sus arsenales nucleares para permanecer como superpotencia militar".

EN ESTE CONTEXTO, "los aliados de Estados Unidos se preguntarán a sí mismos si las alianzas tradicionales representan más riesgos que beneficios y sin son necesarias". Por lo pronto, la Unión Europea considera la posibilidad de levantar el embargo de venta de armas a China, a lo que resueltamente se opone Washington, y Francia no ha dudado en realizar maniobras militares conjuntas con China en vísperas de las elecciones en Taiwán, donde fue derrotada la enmienda secesionista, en paralelo a la controvertida relección de su belicoso presidente. GK avanza una teoría temeraria, pero quizá exageradamente certera, de que Estados Unidos se encuentra menos preocupado por combatir el "terrorismo, definido en forma amorfa", que en "confrontar a Rusia y China en un contexto incierto que podría tener profundas y prolongadas consecuencias que ni los aliados de Estados Unidos ni sus poblaciones se encuentran inclinadas a apoyar", y concluye que "Washington será más prudente y más seguro sólo si la administración Bush es forzada a aislarse y a carecer de aliados".

EL 14 DE marzo el periódico escocés Scotsman On Sunday publicó los asertos de Jean Louis Bruguiéres, principal juez antiterrorista de Francia, quien cataloga la guerra contra el terrorismo global como "la guerra de los 100 años de los tiempos modernos". Los archivos de inteligencia ocultan lo sucedido en la guerra contra el terrorismo durante la guerra fría, y el periódico escocés retrasa sus orígenes específicos a Europa, en el reagrupamiento nazi, inmediatamente después de la guerra, que al inicio quedó en la nómina de los "aliados" pero luego se separó para librar un terrorismo neonazi con escuadrones de la muerte que procrearon sus redes en toda Europa mediante la "orquesta negra", que incluyó el ordine nuovo (el nuevo orden), el cual perpetró el bombazo contra la estación de trenes en Bolonia. Ordine nuovo desarrolló una nueva teoría política: la "estrategia de tensión", que parece repetirse a principios del siglo XXI en Madrid, cuyo objetivo consiste en perpetrar ataques terroristas para culpar a grupos radicales de izquierda: "el primer paso es destruir la estructura del Estado democrático bajo la cobertura de actividades comunistas". Así, en medio del pánico y la confusión, se inducía "a que el ejército restableciera el control perdido". El periódico resalta que existe una familiaridad asombrosa entre los atentados de Bolonia y Madrid, basados en la "estrategia de tensión"; además, que tardó una generación ganar la guerra contra el terrorismo durante la guerra fría, hasta que se logró penetrar a las organizaciones para luego enjuiciarlas, no sin dejar de advertir en forma ominosa que "la guerra que provocó el sangriento pandemónium de la semana pasada bien podría durar más que la pasada guerra y ser más sucia".

LA "ESTRATEGIA DE tensión" parece haberse trasladado a las televisoras de la globalización financiera. En la delicada situación mundial, a alguien le convino exhibir un falso reportaje en la televisora de Kosovo (Stratfor. 18/3/04) que ha reincendiado los rescoldos del "choque de las civilizaciones" huntingtoniano en los Balcanes, con saldo de 22 muertos y 500 heridos en los enfrentamientos entre islámicos albano-kosovares y serbios ortodoxos, y ha puesto a prueba la seguridad continental en el flanco sureste de la Unión Europa, a tres días de la fecha hito del 14 de marzo, en la que el inteligente electorado español descubrió el perverso engaño desinformativo de Aznar. Lo que no consiguió éste con la manipulación de los bombazos en Madrid lo pudo obtener en forma más benigna el presidente de Taiwán, Chen Shui Bian, y su vicepresidenta, quienes de manera surrealista sufrieron un extraño atentado un día antes de las elecciones que les dieron la victoria. Hoy se juega como nunca con los sentimientos de las naciones, gracias al poder omnímodo que otorga la privatización de los medios de comunicación, que son tan orwellianos en sus intereses sectarios como las televisoras estatales de corte estalinista en sus intereses totalitarios. En los tiempos de la bushiana "guerra contra el terrorismo global", una televisora, dependiendo de su controlador y designios políticos que se reflejan en su plantilla de comentaristas, puede ser de gran creatividad pero también de gran destructividad. Como no existen mensajes inocuos ni mensajeros inocentes, la "propiedad" privada de las televisoras se ha tornado en tema jerárquicamente axiológico. Por necesidad ontológica, en la democracia posmoderna la propiedad de las televisoras, en especial la difusión de noticiarios, tiene que ser plural y exige el derecho simétrico de réplica de los afectados, lo cual conlleva ineluctablemente a la democratización de sus consejos de administración, que pueden trastocar el orden público para intentar reorganizar a las sociedades a su voluntad y de acuerdo con sus intereses sectarios. No se puede entender la doctrina Bush sin su poderosa arma desinformativa Fox News. Los Cisneros en Venezuela, por citar un vicioso ejemplo muy común en Latinoamérica, no son simples "propietarios" de medios. Representan intereses políticos puntuales del peor bushismo, el del gobernador de Florida, Jeb, y el criminal grupúsculo antidemocrático del Irán contras y su filial mexicana en el "edificio Omega" de paseo de la Reforma en la ciudad de México (de ahí la santa alianza Cisneros-Rozental Gutman-Castañeda Gutman). Una televisora, aún en su barra cómica, es a final de cuentas un proyecto político de la más alta jerarquía, en el que se juegan los destinos de las naciones. Es tan nociva para la democracia una televisora totalmente pública como otra totalmente privada, y esto no lo previó el gran visionario canadiense Marshall McLuhan en su Galaxia Gutenberg. La democracia deja de ser viable sin una genuina democratización de los medios de comunicación, primordialmente la radio y la televisión, las cuales, paradójicamente, en la fase de la globalización financiera no solamente se han convertido en los medios teleológicos y telemétricos idóneos del control financiero y político de las masas, sino también en la fuente primaria de la deliberada desinformación como parte quintaesencial de la panoplia bélica de la permanente guerra preventiva y del "choque de civilizaciones". La globalización financiera privatizó el aire; es decir, se adueñó del vehículo del mensaje, y pone en tela de juicio la capacidad de una televisora "privada" para difundir el bien común y todo aquello que convenga a los objetivos públicos que no necesariamente se cotejan con los intereses excesivamente "privados". Como lo demostró la guerra fría, no existe mejor antídoto para prevenir el nuevo terrorismo y su "estrategia de tensión", extensivos a la perniciosa desinformación y su sedicioso "terrorismo político-electorero", que la democracia plural y la aplicación de las leyes por jueces independientes. Por ello las procuradurías penales, como en Estados Unidos y Gran Bretaña, deben ser forzosamente plurales. Y en forma idealista, algún día deberán constituir los instrumentos justicieros de la sociedad civil universal en beneficio de la enriquecedora biodiversidad de todas las especies de la creación.