México D.F. Sábado 27 de marzo de 2004
Arrancan a corrientes compromiso de disolverse; será "complejo y profundo": Godoy
En el PRD, tres videos consiguen lo que tres congresos nacionales no lograron
El líder del partido exige institucionalidad; deben impedirse los poderes fácticos, advierte
ARTURO CANO
ƑSe acabaron los chuchos? ƑNo más amalios ni uniyres ni bejaranos? ƑLos cívicos dejarán de resistir y los redires de irse por las ramas? ƑQué será del PRD sin sus tribus? La disolución de las corrientes es, dicen en la hora de la peor crisis en la historia perredista, el gran remedio. La propuesta había comenzado a correr hace unas semanas en Morelia, desatado ya el escándalo que involucró a funcionarios del Gobierno del Distrito Federal y dirigentes partidistas, pero faltaba que las corrientes aceptaran. Sí, pero que no se nos señale como la causa de todos los males, decían los jefes de las tribus más numerosas.
Hace dos días, Nueva Izquierda convocó a algunos de los jefes de las otras corrientes. Se reunieron por la noche en la casa de uno de los chuchos. Ahí anunciaron, para sorpresa de algunos asistentes: "Nos vamos a disolver". Quisieron informar para que el anuncio público no se tomara como jugada oportunista y para empujar la idea de que "nos disolvemos todas las corrientes o ninguna".
ƑDesaparecerá realmente la vasta nomenklatura que ha dado vida e identidad al PRD? El proceso será "complejo y profundo", admite Leonel Godoy, presidente del partido, quien pide en su discurso un voto de confianza. Un proceso complejo porque las corrientes tienen recursos, aparato, edificios y en algunos casos hasta lema, logotipo y publicaciones propias; todo al margen de las estructuras del partido.
Las propuestas de reforma a los estatutos, dicen los perredistas, bastarán para que la disolución no sea cosmética. Control de los dineros en precampañas y campañas internas, salida de las comisiones electorales y de fiscalización de todos los miembros de corrientes, prohibición de que realicen afiliaciones, y registro con nombre y apellidos de los integrantes de las corrientes que se reagrupen tras la disolución. Serán, las nuevas, "corrientes de opinión".
Unos lo creen suficiente. Otros, que todo terminará en un cambio cosmético. "Asumimos en serio la disolución y empezamos un nuevo momento del PRD", expresa Jesús Zambrano, jefe de los chuchos. Juan Guerra, uno de los cercanos a Rosario Robles, es incrédulo y chacotero: "Las corrientes son como el villano de Terminator II, sus moléculas siempre se vuelven a juntar".
"Yo sí les creo", afirma Saúl Escobar, integrante del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) y miembro de la efímera Unidad y Renovación (Unyr), en referencia a los chuchos, la corriente "más estructurada", que podría haber opuesto la principal resistencia. En el análisis de Escobar, en la decisión de los chuchos fue determinante que las diferencias en su dirección ya eran enormes. "ƑQué haces cuando tienes problemas con tus socios? Pues liquidas el negocio y cada quien se queda con su cachito".
Otro dirigente afirma que los chuchos están aprovechando el viaje para deshacerse de personajes incómodos e "indefendibles", a los que respaldaban sólo por ser miembros de la corriente.
La propuesta de disolver las corrientes salió de la fugaz Unyr, pero Leonel Godoy la retomó de inmediato y la empujó con fuerza. Pero las corrientes no dieron el sí de inmediato.
La semana pasada, mientras todas las corrientes debatían internamente el asunto, Zambrano cavilaba: "De acuerdo, las disolvemos. Cuando Cuauhtémoc habla de disolver las corrientes lo que está diciendo es: 'disuélvanse ustedes'. ƑPara regresar al partido de antes? ƑPara que sea él quien tenga el único peso? ƑY los gobernadores? Ricardo Monreal nos metió en una crisis con su precandidato. En Tlaxcala y Baja California Sur también andamos en problemas. Cárdenas presenta su programa al margen del partido. ƑCómo se regulan los poderes fácticos? ƑCómo se fortalece la institucionalidad del partido?"
Godoy, en su discurso de ayer, retoma la inquietud cuando, tras proponer la disolución de las corrientes, señala: "De la misma manera, no se deben permitir poderes fácticos al margen de la institucionalidad partidista". Pero nada más. Porque los chuchos han brindado su disolución, dicen dirigentes de otras corrientes, sin obtener ninguna garantía de los "poderes fácticos".
Dos caras de una moneda
Cuauhtémoc Cárdenas hace unos días: "Vamos a ver qué sucede, qué otros videos nos presentan de aquí a 2006, y vamos a ver quién queda".
Este día de arranque del octavo congreso perredista quedan él y Andrés Manuel López Obrador que, contra las previsiones de algunos, se presenta en el congreso. Cárdenas llega primero, sin bulla alguna. Cuando el gobernante de la capital de la República aparece en las pantallas gigantes del salón que alguna vez fue el cine Ariel se arma la gritería: "šDuro, duro, duro!"
"Todos nos sentimos avergonzados", diría después Godoy, al hablar de los videos con las manos en los dólares. Pero antes, la ovación sigue. Los delegados perredistas sí creen eso de que "no le han quitado ni una pluma a nuestro gallo". La pregunta de algunos es, sin embargo, si todavía tienen gallo.
Pero ahí está el candidato inevitable del PRD en 2006, si nos atenemos a los aplausos. Y éste da un discurso, improvisado, con apenas unas notas manuscritas frente a sí. Dice que será breve: "No puedo mezclar...", suelta, antes de manifestar su "coincidencia plena" con el discurso de Godoy. Resistimos el salinato, resistiremos esta nueva embestida "de los mismos", sigue López Obrador, quien insiste: "una cosa es el gobierno y otra el partido".
Poco antes Godoy le había dirigido un mensaje: es necesario que los gobernantes surgidos del PRD acudan periódicamente a las instancias correspondientes.
Desde que comenzó la crisis de los videos, López Obrador no había visto cara a cara a los dirigentes de su partido.
El contacto, señala José Antonio Rueda, cabeza de la Red de Izquierda Revolucionaria (Redir), habían sido unas llamadas telefónicas a Godoy: "Totalmente insuficiente. No es concebible que frente al golpazo que hemos sufrido tengamos que estar imaginando lo que él piensa".
Por cinco segundos se diluyen esas quejas. Los cinco segundos que López Obrador se acerca a saludar a Cárdenas para la foto. Ovación para ambos. Del público en general y de los miembros de las corrientes que pronto habrán de esfumarse.
Los pesos pesados y los pesos medios de las corrientes. "Son dos caras de la misma moneda", sostiene Rueda. "Las deformaciones propiciadas por las corrientes y los daños que el caudillismo ha hecho al PRD van juntas", completa.
"Asumo lo que pueda corresponderme como militante y, en su momento, como presidente del partido y como su candidato presidencial", parece responder Cárdenas en una afirmación que le gana aplausos.
Rudo es el discurso de Cárdenas, según algunos delegados. Machaca con la idea que ha pregonado en semanas recientes, su propuesta de agenda nacional para ya, para 2004, no 2006. Propone que se cumplan las recomendaciones del informe Del Villar, que documentó las irregularidades en la elección de dirigentes perredistas de 2002; critica las alianzas electorales con el PAN, y pone el dedo en la llaga de los videoescándalos, a propósito de un volante que miembros de la corriente de René Bejarano distribuyen entre las bases perredistas: "Corrupción es corrupción... Nada la justifica".
La propuesta de Cárdenas de hacer cumplir las recomendaciones de la Comisión de Legalidad y Transparencia son vistas con recelo por los jefes de las corrientes en proceso de disolución. Algunas, se dice, ya fueron rebasadas por los hechos, pues el CEN perredista intervino en algunos estados donde las direcciones electas habían sido cuestionadas. En todo caso, la propuesta cuauhtemista equivaldría a quitar posiciones a las corrientes en algunos comités estatales y municipales y en el consejo nacional. El matiz lo introduce Godoy cuando propone una "comisión especial investigadora" que reciba las denuncias de la corrupción actual y retome "en lo posible" las recomendaciones del informe Del Villar.
Otra propuesta de Cárdenas es dejar en "plena libertad" a Godoy, neocardenista de pura cepa, para restructurar los órganos de dirección del partido, "del Comité Ejecutivo y el Consejo nacionales para abajo", asevera. También saca chispas, aparentemente, pero los dirigentes de las corrientes sostienen que la restructuración del CEN ya estaba prevista.
Las mañas del invencible
Pasajes del documento de la Comisión de Legalidad y Transparencia: casillas zapato en Baja California y Chiapas; robo de paquetes electorales en el aeropuerto de Tijuana, Baja California; encartes ilegales de casillas de Campeche; desaparición de material en la carretera México-Oaxaca; intento de clonación en San Luis Potosí; robo de casillas completas con la complicidad de sus funcionarios en Morelos; secuestro de la paquetería en un municipio mazahua mexiquense.
Por irregularidades como las anteriores, la Comisión de Garantías y Vigilancia anuló las elecciones en Veracruz, Puebla y Oaxaca, y suspendió el proceso en Hidalgo. Por su parte, la comisión encabezada por Samuel del Villar encontró problemas significativos en el Distrito Federal, Jalisco, estado de México, Chiapas, San Luis Potosí, Michoacán, Aguascalientes, Tamaulipas, Campeche. En Chihuahua, Zacatecas, Nuevo León y Baja California el cómputo de las votaciones nulas afectó los resultados.
"No hay una sola práctica fraudulenta denunciada por nosotros como oposición frente al otrora invencible PRI, que no se haya producido" en esa elección, señala el informe.
Pliego de mortaja
"Las corrientes no han sido el problema del PRD", aseveraba Zambrano hace unos días. ƑCuál entonces? Ponía un ejemplo: "Rosario Robles no fue una presidenta acotada, fue una presidenta desbocada".
"En la medida en que se logre meter a las corrientes en la lógica de la institucionalidad se acotará también el caudillismo", afirma Rueda, con su idea de las dos caras de la moneda.
Una de las caras de la moneda comenzará a ser borrada. Claro, si la "voluntad política" alcanza esta vez a los perredistas. Una comisión formada por Jesús Zambrano, Saúl Escobar, Raymundo Cárdenas, Humberto Zazueta y Camilo Valenzuela -todos, por supuesto, de distintas corrientes- redacta esta noche el pliego de mortaja de las corrientes. Lo que no pudieron tres congresos nacionales lo consiguieron tres videos.
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