De no resolverse su situación, "iremos a matar a quienes nos quitaron casas y animales"

Desalojados de Tlalchinol exigen a las autoridades gestionar su regreso, en Hidalgo

CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL

Tlanchinol, Hgo., 4 de abril. "Si el gobierno no resuelve, nos vamos a ir a matar con ellos. Al fin que ya perdimos todo; no nos importa perder la vida". De esta manera resumió Jesús Hernández Hernández el sentir de 22 familias, a quienes el lunes pasado desalojaron de sus casas en la comunidad Tequispitzal sus vecinos de Chichiltepec, presuntamente por órdenes del ex alcalde Nemorio Medina Hernández.

El 23 de mayo de 2001 el mismo Nemorio Medina, entonces presidente municipal de Tlanchinol, ordenó a sus seguidores de Chichiltepec destruir las casas de habitantes de Tequispitzal, con la intención de "corrernos para quedarse con las tierras", dijo Jesús Hernández Hernández.

Entonces la cosa no pasó a mayores y, no obstante su desventaja numérica, se impusieron los de Tequispitzal.

Pero el lunes pasado, contó Juana Hernández, llegaron unas 300 personas, quienes preguntaron por el delegado municipal Andrés Hernández Hernández, "y lo fuimos a traer a la milpa". Cuando llegó le pidieron las escrituras de "las tierras donde tenemos nuestras casitas y animalitos"; el delegado les mostró los papeles, pero una hora después, "tomados de aguardiente, nos amenazaron y nos dieron una hora para irnos o nos mataban".

Muchos salieron con la ropa que portaban. Atrás dejaron sus viviendas y animales de corral.

Las 22 familias -hombres, mujeres y niños- salieron de sus casas construidas sobre aproximadamente dos hectáreas, y llegaron a la cabecera municipal, a unos 70 kilómetros de distancia.

Los agresores, vecinos de Chichiltepec, se apoderaron de tierras, destrozaron casas, se quedaron con animales y pusieron un cerco en los accesos principales de su comunidad.

Al día siguiente del desalojo, reporteros de Huejutla intentaron llegar al lugar "y los corrieron a pedradas", contó Jesús Hernández. Desde entonces "ninguna autoridad ha acudido al lugar".

Añadió que con sus vecinos acudió al Ministerio Público de Huejutla, "y le pedimos que se hiciera justicia, pero nos dice que quiere hechos. ¿Cuáles hechos? Ahí están nuestras casas destrozadas, nuestros animalitos robados, ¿quieren más hechos?"

Los desalojados recibieron albergue en la parroquia de Tlanchinol y este sábado fueron reubicados en el auditorio municipal por órdenes del alcalde Teodoro Linarte Sánchez.

Al auditorio municipal llegó el regidor del PRD y presidente de la asamblea municipal de Tlanchinol, Pablo Luciano Hernández, quien atribuyó el conflicto "a intereses políticos, a la mafia de los que a fuerza quieren gobernar".

-¿Tiene algo que ver Nemorio Medina, ex alcalde priísta?

-No lo podría afirmar, pero podría ser -indicó el regidor perredista.