Llama a hallar una fórmula para reformar el régimen de jubilaciones y pensiones

Fox pide a trabajadores del IMSS "amplia colaboración"

Insiste en que no se tocará "ni un milímetro" de las prestaciones laborales que han ganado

CLAUDIA HERRERA BELTRAN Y JESUS ARANDA ENVIADOS

Alvarado, Ver., 21 de abril. El presidente Vicente Fox pidió a los trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) su "amplia colaboración" para que, junto con el gobierno federal y los empresarios, encuentren una fórmula que permita reformar el régimen de pensiones y jubilaciones de la institución.

El mandatario defendió la propuesta del gobierno federal que -dijo- aumenta la edad de jubilación a 65 años e insistió que sólo involucra a los empleados de nuevo ingreso y no a los jubilados ni a los que laboran actualmente, a quienes "no se toca ni un milímetro" de lo que han ganado.

Luego de que un pensionado se acercara a Fox y le preguntara sobre las reformas en el IMSS, el Presidente explicó a los reporteros que si no se corrigen los problemas en el instituto éste va a perder su viabilidad económica.

"Pido a los trabajadores del Seguro Social voluntad para que nos sentemos a platicar y equilibremos los derechos, que permitan que el instituto pueda cumplir sus obligaciones y responsabilidades con todos sus derechohabientes", afirmó luego de asistir a la ceremonia conmemorativa del aniversario de la defensa del puerto de Veracruz.

Posteriormente, en declaraciones que dio a la prensa a bordo del avión presidencial, en el trayecto de Veracruz a Acapulco, consideró que es "muy lógico, muy equitativo", que los nuevos trabajadores ahorren durante su vida y se ganen una pensión y jubilación a los 65 años, como cualquier otra persona en el país.

Sostuvo que no sólo se pide este esfuerzo al sindicato del IMSS, sino que también hay un compromiso del gobierno federal para sumarse a fortalecer la institución.

Explicó que la iniciativa gubernamental busca cerrar la diferencia entre los 12.5 millones de derechohabientes y los 370 mil trabajadores del instituto -que tienen prestaciones diferentes entre sí- y salvaguardar las finanzas del Seguro Social.

En opinión del mandatario, no se pueden limitar los alcances y los derechos de estos 12.5 millones de personas porque otro grupo "tenga una situación privilegiada". Subrayó que no se está pidiendo a los sindicalizados "nada extraordinario".

México necesita una institución "fuerte y con finanzas sanas", que tenga la capacidad de atender a todos los derechohabientes con hospitales y con servicios de salud de la calidad que se requiere, afirmó.

Insistió en que la propuesta surgió del consejo técnico del Seguro Social, que está compuesto por trabajadores y empresarios que están en favor de que los sindicalizados moderen o negocien el régimen de prestaciones.