Este año, 5 mil despidos en Pemex, confirma Calderón

Efectos negativos por altos precios del crudo, prevé Muñoz Leos

TRIUNFO ELIZALDE E ISRAEL RODRIGUEZ

Los efectos del incremento de los precios internacionales del petróleo crudo, que han llevado la mezcla mexicana a más de 32 dólares por barril, ''se vuelven más negativos en conjunto, a medida que un precio demasiado alto prevalezca; lo más conveniente para todos es tener un precio estable, razonable'', que no exponga a la economía nacional, señaló ayer Raúl Muñoz Leos, director general de Petróleos Mexicanos (Pemex).

Entrevistado en el aeropuerto internacional de la ciudad de México, momentos antes de partir hacia Los Angeles, Muñoz Leos reveló que la Organización de Países Exportadores de Petróleo ''ha ubicado el precio del barril del hidrocarburo entre 22 y 28 dólares, o sea, alrededor de 25 dólares por barril del crudo marcador, lo cual se deriva en un precio de cerca de 20 dólares para el mexicano, lo que pudiera ser considerado un rango de estabilidad que sería favorable para el mundo''.

Interrogado sobre si ese nivel del precio del crudo serviría para evitar la situación vivida durante el régimen del presidente José López Portillo, Muñoz Leos dijo que ''se lograría estabilidad, que es lo que todos buscamos, pues en muchas facetas de nuestras vidas hay altibajos''. Reiteró que si bien de inmediato a México le conviene que el crudo se cotice a precios altos, a mediano plazo las repercusiones ''harán que la cadena se nos revierta y entonces nos metemos en un círculo vicioso, y si vendemos el crudo a precio muy elevado puede afectarnos''.

Sobre la modificación a la ley orgánica de Pemex, Muñoz Leos dijo que se espera su aprobación este año, para que la empresa cuente con un régimen fiscal más favorable que le permita mantener parte de los recursos que genera. De esa manera podrá financiar su crecimiento con recursos propios y hacerlo ''más saludable, más sostenido''. Informó además que por cada dólar que la paraestatal recibe por la exportación de crudo, sólo le queda 40 por ciento, mientras el resto va a dar a las arcas del fisco.

Del monto de las reservas de crudo, afirmó: ''Son bastantes significativas y no creo que por decirlo de esa manera estoy evadiendo o trate de evadir la pregunta; nuestras reservas probadas nos duran a este ritmo de extracción (de 3 millones de barriles diarios) cerca de 11 años. Pero lo importante es que tenemos explotado sólo 20 por ciento del territorio'', de manera que 80 por ciento está sin explorar ''y eso es más que nada en el Golfo de México, donde según las indicaciones geológicas está el potencial más grande. Entre los aspectos que debemos atender se encuentra entonces el explorar con efectividad, con eficiencia, las aguas profundas del golfo, donde requerimos tecnología que no hemos desarrollado y que necesita recursos significativamente mayores''.

Sostuvo además que ''lograremos más que recuperar'' las reservas probadas que existían hace unos seis años y que han disminuido a causa del aumento de la extracción practicada en los tres primeros años de este sexenio.

Sobre su viaje a Los Angeles comentó que dictará en la UCLA una conferencia sobre las perspectivas de Pemex, su desarrollo y cómo constituirla en ''factor importante de la economía nacional''.

Adelgazamiento de la planta laboral

Pemex comenzó el proceso de adelgazamiento de su planta laboral, con la desaparición de tres de las siete direcciones de la empresa. Esto implicará el despido inicial este año de 3 mil empleados, de un total de 5 mil personas, tal como ha ordenado la Secretaría de Hacienda.

El secretario de Energía, Felipe Calderón, informó que en esta primera etapa de redimensionamiento de la paraestatal el recorte de la planta laboral será de 3 mil personas, ''probablemente un poco más''. Sin embargo, aclaró que no se afectará al personal de base o sindicalizado.

El funcionario justificó estas medidas porque Pemex enfrenta una situación difícil con riesgo de perder patrimonio, y en la que los pasivos superen a los activos.

En entrevista, Calderón Hinojosa destacó que Pemex tiene gran solidez, pero su contabilidad va mal, básicamente porque tiene una enorme carga fiscal, de manera que todos sus ingresos, incluso los excedentes por los elevados precios del crudo se van directo a Hacienda.

Reconoció que ante este problema Pemex necesita mejorar de manera sustancial su forma de operar, requiere ahorrar parte importante de sus gastos y reducir costos. Al cierre de 2003 tenía una plantilla laboral de 143 mil empleados, de los cuales 97 mil son sindicalizados.

En el primer trimestre la empresa reportó una pérdida neta de 89 millones de dólares, porque entrega en impuestos 61 por ciento de sus ventas totales; tampoco se ha beneficiado de los elevados precios del crudo prevalecientes desde 2003, porque Hacienda se lleva 100 por ciento de los ingresos excedentes sobre el precio del petróleo que el Congreso fija.

Paralelamente, dijo el secretario de Energía, hay un esfuerzo por reducir entre el personal de confianza algunas plazas que no estaban debidamente justificadas.

Por otro lado, Felipe Calderón subrayó que se dio un paso importante en la empresa, al crearse el comité de auditoría, que depende directamente del presidente del consejo de administración de la petrolera y que es presidido por el secretario de Energía.

Esta nueva instancia se creó a consecuencia de los recientes escándalos contables en compañías como a Enron y WorldCom, entre otras. Una de las cosas que se busca, explicó el funcionario federal, es mejorar las prácticas de gobierno corporativo, como exige la Ley Sarbanes- Oxley, que obliga a las empresas que colocan deuda en Estados Unidos y Europa contar con un comité de auditoría, independiente de la administración de la empresa.