.. |
México D.F. Martes 8 de junio de 2004
ACUSE DE RECIBO
José Agustín Ramírez
Uncut, gran revista para narcoveteranos
AQUIENES
BUSCAN UNA buena revista de rock, que no caiga en los vicios de la
mercadotecnia y las modas efímeras, les presento un magazine inglés
que tiene todo lo que (ojo) un buen rocanrolero puede desear, especialmente
si se trata de esos nostálgicos amantes del "verano del amor", adoradores
del rock de los años 60: Uncut. Esta publicación contiene
reportajes y fotografías siempre sorprendentes, cientos de reseñas
sobre lo más actual en cultura internacional, también rinde
riguroso homenaje a los ídolos de la era jipiosa. El año
lo empezó dándole la portada a Keith Richards, para continuar
con Morrison, Hendrix y los Who, hasta llegar a la edición de mayo
que dedicaron al maese Eric Clapton, con motivo de su reciente disco
de versiones de Robert Jonhson. Se trata del 84 para ser precisos, que
incluyó una entrevista con Clapton, la cual, sin duda, es la más
reveladora que haya concedido, pues habla de sus severas adicciones al
alcohol, la cocaína, heroína y sus primeras experiencias
con LSD, de la mano de The Beatles, en la fiesta en la que presentaron
el Sargento Pimienta. Narra su difícil rehabilitación,
la trágica muerte de su hijo, quien a los cuatro años cayó
de un séptimo piso, mientras relata su inicio con la lira y su saga
junto a la Crema, los Dóminos, y, finalmente, las razones de su
desnivelada carrera de solista.
LOS EXHAUSTIVOS REPORTAJES de la revista dan portada
a los ídolos de antaño, pero ofrecen las críticas
de discos, películas, DVD y libros recientes, crónicas de
conciertos y entrevistas con personalidades contraculturales. En mayo,
por ejemplo, Mickey Rourke relata su propia decadencia y Lou Reed habla
de su nuevo disco en vivo, Animal serenade (mayo, 2004), mientras
se rinde homenaje a los 10 años de Tony Montana. Además,
siempre regala un disco, y el más reciente fue una antología
hecha por el mismísimo Clapton sobre sus rolas favoritas (desde
luego se pueden pedir este y otros números atrasados, que siempre
son de colección).
EN EL NUMERO de junio, el disco de regalo es una
muestra de lo mejor del rock de 2004, y la portada está dedicada
a Roger Waters, por la redición de su último disco con Pink
Floyd: The final cut, el cual sale a la venta por primera vez en
cidí con una rola inédita extra: When the tigers
broke free; el subtítulo del álbum, por cierto (Réquiem
por el sueño de la postguerra), deja clara su sorprendente relevancia,
a 21 años de su lanzamiento. Así que olvídense de
la Rolling Stone, Spin y demás publicaciones poperas,
pónganse trucha y suscríbase por Internet a esta completísima
revista, ideal para reunir a familias enteras de narcoveteranos
y rocanrolebrias con sus drogos descendientes, o para el
simple deleite de todos aquellos con sed de noticias místico-anarquistas.
Eso sí, exclusiva para gabacho-parlantes. Lléguenle en www.uncut.co.uk,
o escríbame un emilio, y les digo donde conectarla aquí
mismo en el DeFiéndete.
John Lee Hooker: Face to face
CARA
A CARA CON el rudo fantasma del mismísimo Boogie man
(por no decir el Coco del blues), don John Lee Hooker, estará
usted al conocer el nuevo disco de este músico, si gusta de este
azulado ritmo, del cual este brother es casi, casi el padrino. Se
trata de las últimas grabaciones que el maestro realizó en
2001, cuando falleció, e incluye colaboraciones estelares de otros
veteranos como Johnny Winter, Canned Heat, Van Morrison, George Thorogood
y Robert Cray. El retraso en su aparición (enero, 2004) se debió
a una producción póstuma que seguramente requirió
bastantes retoques, pues la voz del jefe Hooker se escuchaba en declive,
debido a que estaba a punto de partir hacia el otro mundo; sin embargo,
todo su espíritu está presente, con excelentes piezas como
la arrabalera Boogie chillen o una nueva versión de su clásico
Dimples, acompañado de Morrison.
Retorna Diamanda Galás, La Diosa Serpiente
LA
SERPIENTE CANTA y Defixiones will an testament son los títulos
de lanzados simultáneamente que ofrece la sicótica reina
de los alaridos, quien hace en el primer caso un homenaje a sus ídolos
de blues, soul y hasta country, pues se trata de puros cóvers o
espectrales versiones de clásicos, como Burning hell, de
John Lee Hooker, en el que Diamanda se transforma en una mezcla de Tina
Turner y la mismísima Hecate. También destaca la aterradora
I'm so lonesome I could cry, del maese Hank Williams, mientras
la multicovereada I put a spell on you, del legendario Screaming
Jay Hawkins (otro gran gritón), es resucitada con toda la fuerza
de esta bruja vocal. El otro disco, Defixions... también
es doble, pero se trata de rolas originales en un marco conceptual, pues
narra, a manera de ópera-rock, una terrible y críptica tragedia
histórica, cercana al corazón de esta diva griego-estadunidense:
el genocidio de los asirios y armenios a manos de Ataturk, de 1915 a 1923,
masacre que costó la vida de más de 3.5 millones de personas
y que, sin embargo, es poco recordada, excepto por la hermana Diamanda,
también conocida como La Serpiente que Canta. Oscuridad e
inspiración garantizadas, camaradas darketos.
Patti Smith: Trampin', de La Matrona de Punk
NO
ESTA QUE digamos chingonsísimo, pero la camarada Smith
siempre es referente de calidad, madurez y constancia rocanrolera. Ahora
regresa con un disco inspirado, pero con canciones mejores que otras, como
en sus tres discos anteriores: Gone again (96), Peace and noice
(97) y Gung ho (2000), todos ellos bastante buenos, pero no geniales,
incluido este nuevo, Trampin' (mayo, 2004) o Vagando, como
podríamos traducir la canción que cierra y da nombre al disco
y que es un viejo y triste gospel que la Smith canta con voz exhausta,
acompañada sólo de su hija en el piano. Han de saber que
en lo que va del milenio, Patti ha resentido la pérdida de su madre
(a quien dedica la pieza Mother Rose), su padre, su esposo, su hermano,
su mejor amigo y hasta a su pianista de cabecera.
ESTE NUEVO MATERIAL es una muestra de fuerza, dignidad,
libertad creativa e inteligencia, casi un milagro, viniendo del pueblo
más nefasto del mundo, o sea el gringo, al cual Patti fustiga
en la rola Radio Bagdad, que se extiende por más de 12 minutos
y termina con alaridos cíclicos, que rezan: "Están saqueando
la cuna de la civilización". Además esta maestra que afirma
vivir feliz autoexiliada de la sociedad. Al ser interrogada sobre el gobierno
de Georgie boy Bush ha declarado: "La presente administración
ha orillado a mi país y al mundo a una situación muy dura,
financiera, ambiental y sicológicamente. Estoy totalmente en desacuerdo
con las políticas de Estados Unidos, no me representan".
The blues, a musical journey
PARA
MELOMANOS Y CINEFILOS, esta serie de siete programas titulado Martin
Scorsese presenta: El Blues, un viaje musical, debería ser un
acontecimiento, pues no sólo se trata de un documental muy completo
y bien investigado, que aborda todos los enfoques posibles del blues (desde
su pasado más ancestral, en Africa, hasta su futuro en el rock,
otros géneros y demás generaciones), sino que reúne
un espectacular reparto de directores: Scorsese dirige Feel like going
home; Wim Wenders se chuta The soul of a man; Clint Eastwood
está excelente con su Piano blues, lo mismo que Mike con
Adiós a Las Vegas y Figgis con Red, white and blues,
mientras Richard Pierce se rifa con The road to Memphis y Marc Levin
aborda las violentas relaciones entre Godfathers and sons, o las
conexiones entre el árbol genealógico del blues y su descendencia
en el hip hop y el gangsta rap. Todo este proyecto multidiciplinario también
incluye, desde luego, un soundtrack que usted puede adquirir por
medio del sello Universal, aunque hay un disco especial dedicado exclusivamente
a Eric Clapton, que salió en Polydor Records. El DVD es una entrega
de la compañía Snapper music (www.snappermusic.com/theblues).
RECUERDE, COMPADRE LECTOR, que si piensa comprar
este material ahora mismo, quizás la única forma posible
será por medio de su computadora, a través de la méndiga
Internet, y necesitará, además de tarjeta de crédito,
un reproductor de DVD multiregional. Orale pues, camaradas, sobres
de ellos, pero póngase trucha. Es un DVD que no dvd
perderse.
|