Habla Alberto Chimal, Premio San Luis Potosí

La literatura de ficción ''nunca es profecía ni metáfora directa''

El orden de las lecturas contraviene el orden del tiempo. Los lectores reconocen en los maestros influjos de sus alumnos.

José Agustín como antecedente de Juan José Arreola, Jorge Luis Borges como precursor de Leopoldo Lugones, dice en entrevista Alberto Chimal, quien a su vez tiene como antecesor al Gran Cronopio Julio Cortázar.

Chimal es ganador del Premio San Luis Potosí 2002, con Estos son los días y autor de más de una docena de obras entre las que destacan Vecinos de la tierra, El país de los hablistas y Gente del mundo. Lo que hasta ahora ha realizado ''son experimentos, búsqueda de diferentes temas, diferentes enfoques para decir las cosas".

Heredero de una tradición narrativa que lo ubica entre la rememoración detallada de Borges, la narración breve de Julio Cortázar y los libros de viajes, refiere que en los años recientes el cuento se ha revitalizado en la medida que los escritores buscan nuevas formas de contar.

Otros géneros reaparecen: el bestiario, las historias a manera de catálogo o las novelas compuestas de fragmentos.

''Lo mejor que se está haciendo son cuentos muy extensos y novelas cortas."

Disolución de certidumbres

Estos son los días significa para Alberto Chimal una ruptura respecto de sus anteriores libros, pues reúne historias contadas de manera tradicional con otras que quieren ser mucho más raras, lo que importa no es tanto la invención de mundos como metáforas de éste, como en Gente del mundo, sino las narraciones tradicionales en las que se juega con el tiempo y se presentan personajes más complejos.

Esto surge porque ''no tenía un conjunto de historias, no tenía un libro de unidad temática o formal, centrada, eso es lo que muchas veces se pide al hacer un libro de cuentos.

''Todos los textos son diferentes entre sí y lo que los reúne es la estructura; me gusta jugar con la disposición de los textos, con la forma en que se va contando."

En el libro publicado por Ediciones Era, Chimal muestra la ''disolución de las certidumbres" y de los papeles sexuales, la inspección de la historia mediante la historia misma, al tiempo que expone el texto ''antiautobiográfico", como manera de exorcizarse de aquello en lo que no desea convertirse y cuestiona ''la separación lector-personaje-autor" dentro de las preocupaciones cotidianas.

Entretenimiento rentable

Ganador de los premios Nezahualcóyotl (1996), Benemérito de América (1998) y Kalpa (1999), entre otros, y la beca para Jóvenes Creadores del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (Fonca), considera que ya puede hablarse de una generación o por lo menos un grupo de escritores con características afines en México, entre ellas la de haber cursado talleres de creación literaria.

En su nueva obra, Chimal se interesó en las historias de ficción, a la manera de Juan Rulfo, Carlos Fuentes o Italo Calvino, pues pretende alejarse de la etiqueta de lo fantasioso que ''más bien es un término mercantil para vender películas y juegos de video", siempre será mejor referirse a ''lo que nos liga con lo que está al borde del lenguaje o en el centro de la misma experiencia humana".

La ciencia ficción de ahora, agrega Alberto Chimal, no sabe manejar el miedo ni la inquietud; lo que se entiende como entretenimiento rentable ''es una serie de sobresaltos calculados, de emociones poco profundas cuyo fin es entretener", en cambio la literatura de ficción ''nunca es una profecía, nunca una metáfora directa".

La escritura es duda

A sus 34 años, después de varios libros y premios, el autor no está tranquilo. ''Cuando uno se empieza a creer sus boletines de prensa, se acaba la escritura, en la medida en que uno se convierte en una celebridad, en un líder de opinión, la capacidad de invención desaparece, la escritura es duda y es incertidumbre".

Chimal prefirió la escritura al ideal de inconsciencia de exacerbación del individualismo, de la violencia no extrema pero cotidiana contra todo y contra todos que se nos quiere imponer.

Estos son los días se presentará el 7 de julio a las 19 horas en la sala Adamo Boari del Instituto Nacional de Bellas Artes.

JORGE RICARDO