Aniversario del museo del Castillo de Chapultepec

2 mil 800 años de historia por medio de Cucharas y utensilios...

MONICA RODRIGUEZ Y JAIME WHALEY

Cucharas y utensilios del mundo, 2800 años es la exposición que desde el primero de julio al 7 de agosto estará abierta al público en los salones del Castillo de Chapultepec.

La muestra, que cuenta con cerca de 900 utensilios, de un acervo de 2 mil 500 que el alemán Ernesto Richheimer coleccionó en 50 años y que luego de su muerte fue donado al Museo Soumaya, "deja ver un proceso evolutivo en los materiales y diseños en el mundo", señala la curadora Montserrat Ugalde Bravo.

Entre los materiales con los que han sido elaboradas las cucharas sobresalen la porcelana, plata, marfil, cobre, vidrio, hierro forjado, barro, piedra, obsidiana y madera. Los diseños han sido creados para las necesidades de cada época, por ejemplo, en la Edad Media fue cuando se originaron los estilos actuales.

El origen de la cuchara, expresa la curadora, data desde el uso de la misma mano "aunque después se adecuaron diversos objetos para ayudar a introducir los alimentos a la boca".

La exposición, que en octubre será montada en Tamaulipas, se divide en cinco módulos: Mesoamérica; La cocina, el servicio de mesa; Siglos XVI y XVII; Siglos XVIII al XX, y el gabinete de curiosidades.

Lo mismo hay piezas rituales zoomorfas las más semejantes a serpientes, que una coladera de Alaska que no es más que un caballito de marfil en acción de librar un obstáculo, utilizado, en la antigüedad, para aspiraciones por aquellos aficionados a los polvos hoy tan prohibidos, pero igualmente en boga.

La muestra ha sido exhibida en el Soumaya en toda su magnitud y en esta ocasión, informa Luciano Cedillo, director del Museo del Castillo de Chapultepec, se tendrán menos piezas, pero con toda la temática presente.

Toda la amplia parafernalia de cubiertos que antaño se utilizaba y que hoy a causa de las prisas o la comida rápida cayó en desuso, se podrá admirar. Hay tenedores con su soporte para no manchar el mantel, pues ay de aquel que osara poner los cubiertos sucios sobre los elegantes cubremesas. También figura un molinillo holandés de porcelana, idea hurta, seguramente, del tradicional utensilio mexicano para sacar espuma al chocolate.

Para recordar que la cocina es rito en cuanto a la preparación de los alimentos se muestran cascanueces, rebanadores de huevos, ralladores de verduras y legumbres, corta quesos, abreostiones, corta pastas, en fin. En la vitrina relativa a los niños se despliegan cucharas en ángulo para alimentar a los pequeños siempre y cuando la madre o nodriza sean derechas, pues si son zurdas, ya perdieron.

La exposición, explicó José Ortiz Lanz, coordinador de museos y exposiciones del Instituto Nacional de Antropología e Historia, es parte de los actos para conmemorar el 60 aniversario de que la centenaria fortaleza que corona el cerro del Chapulín, se convirtió en museo. "Queremos ratificar la voluntad del Museo Nacional de Historia de apertura a la diversidad, como en este caso es de la vida cotidiana, en la que leemos de diferente manera aspectos concretos del ser humano", agregó.