Cortado de modo ilegal, uno de cada tres árboles, dice

Semarnat condena a industriales que trafican con madera clandestina

JOSE DIAZ BETANCOURT CORRESPONSAL

Guadalajara, Jal., 1Ɔ de julio. En 15 zonas del país plenamente identificadas se corta de manera ilegal un árbol por cada dos autorizados, lo que podría representar al menos 4.5 millones de metros cúbicos de madera talados sin autorización cada año, informó el titular de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Alberto Cárdenas Jiménez.

Al inaugurar ayer la Expo Forestal 2004 en esta ciudad, el funcionario federal indicó que esas 15 zonas se encuentran principalmente en Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Chiapas, Chihuahua y Durango.

En esos lugares, insistió, se tala un árbol ilegalmente por cada dos autorizados, en números gruesos. Indicó que además de los 9 millones de metros cúbicos de madera autorizados para cortarse cada año a nivel nacional, otros 4.5 millones serían talados de modo clandestino.

Agregó que en esas entidades se estaría generando 60 por ciento del volumen total de madera cortada ilegalmente por "mafias" y grupos organizados de "criminales" que cuentan con armas de grueso calibre y sofisticados equipos de comunicación y de transporte.

Ante ese panorama, informó, se instalarán en los bosques cámaras de vigilancia y se "sellarán" las rutas de salida de la madera ilegal.

Paradójicamente, agregó, en esas mismas zonas del país viven 12 millones de mexicanos que sobreviven en condiciones de pobreza extrema y de marginación.

Cárdenas Jiménez enumeró ante los comercializadores e industriales de la madera los factores estratégicos para ganar la batalla al corte ilegal de árboles.

"No podemos seguir haciéndonos pedazos en toda la República para evitar la tala ilegal mientras existan industriales perversos alimentando el mercado con madera clandestina", abundó.

Cárdenas Jiménez fue testigo de calidad del convenio firmado por la Comisión Nacional Forestal y el Banco Mundial para una primera aportación de 9 millones de dólares que servirán para realizar estudios tendientes a obtener un crédito global por hasta 100 millones de dólares, que se utilizarán en el impulso del Programa de Pago de Servicios Ambientales.

Este programa, describió Cárdenas Jiménez, servirá para reducir los 6 mil millones de dólares de productos derivados de la madera que anualmente se traen a México desde el extranjero, de los cuales 4 mil millones son de papel.