Dos casos relevantes

En años recientes han ocurrido dos casos distintos de declaratorias de monumento artístico. En octubre de 2000 Walter y Alexandra Gruen depositaron su colección de 38 obras de Remedios Varo Uranga (1908-1963) en comodato con el Museo de Arte Moderno.

Al poco tiempo la española Beatriz Varo Jiménez, sobrina de la pintora, inició un nuevo intento por acreditarse como heredera universal de su tía. En el litigio ha querido involucrar las 38 obras exhibidas en el MAM, dando por hecho que fue una ''herencia'' dejada por su familiar al fallecer.

El 26 de diciembre de 2001 las piezas en cuestión fueron declaradas monumento artístico, mientras que unos meses después se oficializó su donación al pueblo de México.

El pasado 6 de febrero el Instituto Nacional de Bellas Artes solicitó amparo contra la sentencia emitida el 14 de enero por el Tribunal Superior de Justicia del DF, que ratifica a Beatriz Varo como heredera universal. En la medida que el fallo afirma que las 38 obras forman parte de la ''masa hereditaria'', se debe demostrar que fueron adquiridas con posterioridad por los Gruen.

A su vez, toda la obra pictórica de la creadora jalisciense María Izquierdo fue declarada monumento artístico el 24 de octubre de 2002. En diciembre de ese año, seis coleccionistas solicitaron amparo.

Sin embargo, el 28 de octubre de 2003 el juzgado decimocuarto de lo civil itinerante imitió una sentencia de sobreseimiento al considerar que en la demanda de amparo no se acreditó el interés jurídico de los quejosos.

MERRY MAC MASTERS