México D.F. Viernes 2 de julio de 2004
Asegura que de ganar el PRI quedarán
impunes las corruptelas del actual gobernador
Castigo a Patricio Martínez, principal oferta
de la oposición en Chihuahua
Los escándalos de la administración impactan
de forma negativa la campaña tricolor
MIROSLAVA BREACH Y ANDREA BECERRIL /I CORRESPONSAL
Y ENVIADA
Chihuahua, Chih., 1º de julio. La administración
de Patricio Martínez dejará como saldo la polarización
total de la vida política en Chihuahua. Tanto, que generó
la creación de bloques partidistas y llevó a la oposición
a tener como bandera central impedir la impunidad del mandatario, a quien
se responsabiliza de enriquecimiento inexplicable y de solapar nexos de
miembros de su gabinete con el crimen organizado.
Por
ello, cuando sólo faltan tres días para la jornada electoral
en la que se elegirá gobernador, 67 alcaldes y 33 diputados locales,
la coalición Todos Somos Chihuahua, que encabeza el panista Javier
Corral, insistió en que el eventual triunfo del aspirante del PRI,
José Reyes Baeza Terrazas, es el salvoconducto para Martínez
y sus millonarios negocios al amparo del poder.
En ese escenario de confrontación, el priísmo
relanzó una serie de acusaciones sobre el tráfico de influencias
que habría prevalecido en el sexenio del ex gobernador panista Francisco
Barrio Terrazas, pero sin la repercusión que tuvo la difusión
de esos mismos expedientes -donde se habla de negocios del hermano del
ahora coordinador de la bancada del PAN en San Lázaro- en la contienda
de hace seis años, en la que resultó triunfador Patricio
Martínez.
De hecho, en estos comicios se repite la pelea por el
poder entre los dos grupos dominantes en Chihuahua. El candidato del PRI,
José Reyes Baeza, es sobrino del ex gobernador Fernando Baeza, el
mismo que respaldó el arribo a la gubernatura de Martínez
y quien el año pasado le cobró la factura para consolidar
la hegemonía a través de su pariente.
A su vez, al aspirante de la alianza Todos Somos Chihuahua,
conformada por el PAN, PRD y Convergencia, Javier Corral Jurado, se le
considera ahijado político de Barrio Terrazas y ha tenido que enfrentar
por ello y por su alianza con un partido de izquierda una fuerte oposición
interna de los grupos de ultraderecha del panismo local.
A lo largo de sus 120 días de campaña -sin
contar los cuatro y medio meses de precampaña-, Corral Jurado estructuró
un mensaje y una serie de propuestas basados en un cambio en la forma de
conducción que distingue a Martínez, y que acabe con abusos
y atropellos y el deterioro político, económico y social
en que se encuentra el estado.
En su cierre de campaña, el 26 de junio, Corral
Jurado advirtió: "Nadie tenga duda: un eventual triunfo del PRI
significaría más impunidad y complicidad con uno de los gobiernos
más corruptos que hemos padecido en toda nuestra historia. Votar
por Baeza sería premiar a su compadre Patricio Martínez.
Simple y sencillamente quedaría en el olvido su inmensa riqueza
inexplicable, la vinculación de su gobierno con la mafia del narcotráfico".
Investigaciones de legisladores de oposición documentaron
que, al inicio de su mandato, Martínez poseía 80 bienes inmobiliarios,
los cuales para el segundo año se elevaron a 250. Ha sido muy comentada
la participación de su hermana Clara Martínez en la compra
de terrenos y propiedades para la remodelación del centro histórico,
negocio de muchos millones.
Para el candidato priísta Reyes Baeza -que contiende
también con los partidos del Trabajo y el Verde Ecologista en la
Alianza con la Gente- no ha sido fácil superar el impacto de la
gestión de Martínez en su campaña. Al arranque de
sus actividades electorales se encontró con el escándalo
de las llamadas narcofosas, en el que se vieron involucrados el
entonces procurador Jesús José Solís y el comandante
de la Policía Judicial del estado, Vicente González.
En la demanda de juicio político contra el gobernador
Martínez, presentada por varios diputados federales del PAN, entre
ellos Gustavo Madero, tanto en los congresos local como federal, se detalla
que los servicios de inteligencia de la DEA y la FBI informaron a la Procuraduría
General de la República (PGR) de la existencia de una finca en Ciudad
Juárez donde se inhumaba clandestinamente a las víctimas
de unos sicarios, quienes "revelaron que recibían órdenes
de un comandante de la Policía Judicial de la entidad".
Se advierte también en el documento que a cuatro
meses de que concluya su administración, el gobierno de Patricio
Martínez está envuelto "en un cúmulo de sospechas
y acusaciones por su relación con el narcotráfico y la ola
de violencia en la entidad que, según cálculos de organismos
civiles, ha cobrado casi 500 vidas en cinco años''.
Al escándalo de las narcofosas antecedió
la ejecución del abogado Mario Escobedo, defensor de dos
detenidos bajo la acusación de participar en los asesinatos de mujeres
en Ciudad Juárez, pero con procesos llenos de irregularidades. Uno
de ellos, Gustavo González Meza, La Foca, quien denunció
que fue torturado para declararse culpable, falleció en la prisión
estatal en circunstancias misteriosas.
Por si fuera poco, el subjefe de Averiguaciones Previas
de la Procuraduría estatal, Alonso Lastra, fue arrestado acusado
de pertenecer a una red de tratantes de blancas. Este otro escándalo
orilló a los propios priístas a pedir al candidato Baeza
Terrazas el deslinde del gobierno de Martínez.
Nunca lo hizo, pero ante las denuncias reiteradas sobre
el involucramiento del aparato de justicia en la protección al narco,
sus operadores negociaron la salida del procurador Solís, a
quien finalmente debió aceptar Martínez.
Para el dirigente estatal del PAN, Jesús Manuel
Tarín, es obvio que José Reyes Baeza tiene el compromiso
de proteger a Patricio Martínez.
El candidato priísta evade el tema cuando se le
insiste en que responda; señala que no será tapadera, pero
sostiene que no hay pruebas ni de riqueza indebida de Patricio Martínez
ni de un probable involucramiento con el narcotráfico.
En un cuestionario que respondió para el periódico
Norte de Juárez sobre ese tema, Baeza señaló
que de existir "denuncia o querella que reúna los requisitos de
procedibilidad que fija el Código Penal, el órgano ministerial
debe actuar en consecuencia, con absoluta imparcialidad y objetividad".
Repite que se trata de una campaña sucia instrumentada
por sus adversarios para tratar de descontar "la enorme ventaja" que les
lleva en las encuestas.
Sin embargo, en el centro de la valoración que
harán los electores del estado está justamente el desempeño
de Patricio Martínez al frente del gobierno estatal; su fracaso
en materia económica, como se evidencia en el crecimiento del desempleo,
y los graves problemas de inseguridad y violencia en las principales ciudades
de la entidad.
La apuesta de Baeza Terrazas es que todos esos elementos
negativos queden desactivados con la fuerte campaña publicitaria
que desplegó tanto en medios electrónicos como en la prensa
escrita.
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